El juzgado halla posibles restos humanos en el burdel de la Carioca
La Guardia Civil rastrea de nuevo el club en busca de pistas de una mujer desaparecida en 2007
La b¨²squeda con perros de rastreo ¡°ha sido positiva¡±. De esta manera tan escueta resumen la jornada de trabajo investigadores que estuvieron presentes ayer durante la persecuci¨®n de alg¨²n vestigio de restos humanos en el Queen's, el club de alterne de Lugo sobre el que se teji¨® la trama del caso Carioca, de tr¨¢fico de mujeres, proxenetismo y corrupci¨®n policial. Especialistas en la b¨²squeda de personas de la Guardia Civil llegados de Madrid y agentes de la Polic¨ªa Judicial de A Coru?a, adem¨¢s de esos pocos de la comandancia de Lugo en los que se apoy¨® la juez Pilar de Lara durante los ¨²ltimos seis a?os, peinaron la finca trasera del burdel en busca de pistas sobre una mujer de nacionalidad brasile?a que trabaj¨® a las ¨®rdenes del jefe del local, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Ad¨¢n, y desapareci¨® sin dejar rastro un d¨ªa del a?o 2007. Diversos testimonios recogidos por la magistrada del n¨²mero 1 de Instrucci¨®n en la investigaci¨®n, todav¨ªa en parte bajo secreto sumarial, apuntan a que la chica, de nombre supuesto Ana (aunque algunas personas relacionadas con el caso aseguran que en el trabajo se hac¨ªa llamar tambi¨¦n Sara), muri¨® de una tremenda paliza que recibi¨® presuntamente de manos del proxeneta. El cuerpo, esa misma jornada, se habr¨ªa hecho desaparecer y el rastro de la joven, inmigrante sin la documentaci¨®n en regla, se esfum¨® por completo. Ayer Ad¨¢n, actualmente en libertad provisional, acompa?ado por su abogado, tuvo que estar presente durante el registro de las instalaciones. El terreno fue desbrozado para facilitar la b¨²squeda por parte de los canes. Cada uno de ellos, con su gu¨ªa, olfatearon el recinto y una y otra vez acabaron se?alando un ¨²nico lugar: el gran agujero que apareci¨® abierto bajo el suelo del que hab¨ªa sido despacho o lugar de refugio de Ad¨¢n, una habitaci¨®n apartada del resto de las instalaciones en la que el proxeneta sol¨ªa pasar largas horas recluido.
En el Queen's, ahora en ruinas y fuertemente custodiado d¨ªa y noche desde hace varias jornadas, entr¨® una excavadora y diversa maquinaria, pero los perros entrenados, tra¨ªdos desde Madrid, fueron la clave. Seg¨²n las fuentes consultadas, est¨¢n amaestrados para ¡°marcar solo restos biol¨®gicos humanos, incluso de sudor, y l¨ªquidos con antig¨¹edad superior a los 30 a?os¡±, aun cuando ¡°el cad¨¢ver haya estado envuelto en un pl¨¢stico o una s¨¢bana, porque en la putrefacci¨®n los fluidos traspasan cualquier superficie¡±. ¡°No cabe margen de error¡±, siguen explicando, ¡°porque distinguen perfectamente¡± si se trata de despojos o fluidos de cad¨¢veres humanos o de animales en descomposici¨®n, y estos ¨²ltimos ¡°ya no los marcan¡±.
La confirmaci¨®n, no obstante, de que se trata de lo buscado deber¨¢ pasar necesariamente por el laboratorio de Criminal¨ªstica de la Guardia Civil, adonde se ha remitido gran cantidad de material recogido. La juez decidi¨® volver a inspeccionar el Queen's ahora, tras la gran redada de 2009 y un profundo rastreo llevado a cabo en verano de 2010, despu¨¦s del hallazgo fortuito, a principios de este a?o, de varias excavaciones. Una de ellas, la m¨¢s aparatosa, apareci¨® abierta en el firme del despacho. Otra, m¨¢s peque?a, y donde se sospecha que podr¨ªa haber permanecido oculta una caja fuerte, se hall¨® en una de las casetas traseras en las que Ad¨¢n criaba gallinas. Despu¨¦s de 2007, seg¨²n revelan fotograf¨ªas, el suelo dej¨® de ser de tierra. Fue cubierto por una capa de cemento y el proxeneta prohibi¨® en adelante entrar all¨ª. Recientemente, seg¨²n comprobaron los investigadores, alguien cort¨® el hormig¨®n con una sierra radial y la tierra apareci¨® removida.
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