Entre Andorra y Gibraltar
Como se ha visto en el proyecto Castor, la principal fuente de riqueza de Espa?a es la extracci¨®n de la riqueza de sus gentes
Las hemos visto gordas, pero sin duda una de las mayores, le¨ªdo lo publicado, ha sido el desprop¨®sito de la plataforma Castor. Afirmar¨ªa que la mezcla de codicia, amiguismo, incompetencia y desprecio a la ciudadan¨ªa supera todos los l¨ªmites, pero nada nos garantiza que en los pr¨®ximos meses no sea noticia una barbaridad todav¨ªa mayor. Los esc¨¢ndalos de las cajas, los ERE, el Palau de la M¨²sica y otros cl¨¢sicos contempor¨¢neos nos hab¨ªan entrenado para lo peor, pero cuanto m¨¢s se lee sobre el proyecto Castor m¨¢s se asombra uno.
Los ingredientes son inmejorables. Si sumamos Ministerio de Industria, proyecto de alta tecnolog¨ªa, ACS, inversi¨®n multimillonaria y gas, el resultado que obtenemos es el de la chapuza monumental del proyecto Castor. Nos quer¨ªan convencer de que el fracking no supon¨ªa peligro alguno y nos tachaban de retr¨®grados por no aceptar esas maravillas de la t¨¦cnica. La diferencia es abismal, nos dec¨ªan: en vez de inyectar agua para encontrar gas y provocar alg¨²n que otro terremoto, se trata de inyectar gas en el fondo submarino¡ para provocar alg¨²n que otro terremoto. El Instituto de Geolog¨ªa ha hallado una relaci¨®n directa entre los se¨ªsmos y los almacenes de gas, pero eso no es noticia. La noticia, si acaso, ser¨ªa que alg¨²n instituto nos describiera las leyes que rigen la miner¨ªa m¨¢s vieja de este pa¨ªs, la que ejerce sobre sus habitantes la clase extractiva. Seg¨²n c¨¢lculos de Industria, la planta est¨¢ valorada en 1.700 millones de euros. Conviene tener en cuenta la cifra porque estamos hablando de lo que de una u otra manera vamos a tener que pagar si queremos que los habitantes de las zonas lim¨ªtrofes a la falla puedan dormir tranquilos.
Florentino P¨¦rez, muy en su l¨ªnea, declar¨® a Jordi ?vole que se cre¨® una alarma innecesaria y que all¨ª, de terremotos, nada de nada. Se ve que los temblores no llegan hasta Madrid, ni hasta las casas del se?or P¨¦rez o de los sucesivos ministros de Industria, Hacienda y Econom¨ªa que han firmado o consentido una indemnizaci¨®n que todav¨ªa nadie sabe situar en la escala Richter.
Es el peligro de los Gobiernos demasiado business friendly y de los partidos demasiado friendly con algunos business
Hace un par de a?os se public¨® un libro altamente recomendable que aqu¨ª se ha traducido como ?Por qu¨¦ fracasan los pa¨ªses? El texto de Daron Acemoglu y James A. Robinson tiene alg¨²n punto d¨¦bil, puede que no describa suficientemente bien la influencia de unos pa¨ªses sobre otros, pero detalla con destreza los mecanismos del poder que ejercen las ¨¦lites extractivas sobre las sociedades. La tradici¨®n vamp¨ªrica espa?ola, por supuesto, se halla representada por gran cantidad de casos hist¨®ricos que el lector va leyendo mientras se pregunta si se lo dicen o si se lo cuentan. Es el peligro de los Gobiernos demasiado business friendly y de los partidos demasiado friendly con algunos business. Se ve que durante el mandato del ministro socialista Miguel Sebasti¨¢n lo de los estudios s¨ªsmicos no se estilaba. Como la gesti¨®n del ministro Soria es indescriptible, nos podemos seguir esperando lo peor, hoy en un sentido y ma?ana en el contrario.
La conclusi¨®n es clara, por continuada, repetida y hasta predecible: la principal fuente de riqueza de Espa?a es la extracci¨®n de la riqueza de sus gentes. Digo de Espa?a pero no har¨¦ distingos en lo que se refiere a Catalu?a, ?cu¨¢nto tiempo hace que nuestra nobleza local nos orde?a por pasar por autopistas o, simplemente, por abrir el grifo? La planta desalinizadora de El Prat o el alargamiento de las concesiones de autopistas son nuestros peque?os castores, nuestro drenaje duplicado, hecho diferencial donde los haya.
Acemoglu y Robinson describen algunos de los mecanismos que han llevado a crear instituciones inclusivas, que son las que permiten la creaci¨®n de riqueza. En nuestro pa¨ªs conviven extractivas e inclusivas, a veces de manera consensuada, a veces de manera conflictiva. El problema es que el poder del lado oscuro se retroalimenta. ?Es l¨®gico revisar el estado de los coches? Claro, pero eso no quita que las concesiones de las ITV sean un chollo. ?Es TV-3 una mala televisi¨®n? Pues no, es lo m¨¢s decente, pero cuando vemos el entramado de productoras que la drenan, nos acaba pareciendo l¨®gico que quisieran externalizar la gesti¨®n de la publicidad.
La empresas de gesti¨®n de aguas, ?son inclusivas o extractivas? Pues depende del lado en que uno se quede en la desalinizadora o en la privatizaci¨®n de Aig¨¹es del Ter-Llobregat. Si hasta las empresas lecheras, que conciertan precios, orde?an a los productores m¨¢s que estos a sus vacas¡ La Comisi¨®n Nacional de la Competencia, siempre tarde, siempre mal, ?es una instituci¨®n extractiva o inclusiva? Esta es reciente y tambi¨¦n de las gordas, en el edificio de la nueva Audiencia Nacional, presupuestada en 13 millones, llevan gastados 20. Debe ser un edificio sismorresistente.
?Por qu¨¦ fracasan los pa¨ªses? Si han nacido entre Andorra y Gibraltar y han visto aplaudir a Messi a las puertas del juzgado, por una vez, no hace falta que lean el libro, de verdad. Saben m¨¢s que sus autores.
Francesc Ser¨¦s es escritor
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