La Vega de Granada ans¨ªa m¨¢s protecci¨®n
Los agricultores y ganaderos quieren protagonizar la recuperaci¨®n del ¨¢rea metropolitana
La Vega de Granada, que estructura el ¨¢rea metropolitana de la provincia, lleva a?os estrangulada. Fundamentalmente por la expansi¨®n urban¨ªstica desordenada que acarre¨® el boomdel ladrillo y que gener¨® discontinuidades evidentes en el ¨¢mbito m¨¢s cercano a la capital. Desde hace casi dos d¨¦cadas hay colectivos que reclaman su protecci¨®n, pero este movimiento ha crecido en los ¨²ltimos a?os y se est¨¢ consolidando en la comunidad educativa, lo que a priori garantiza que ir¨¢ a m¨¢s.
De momento, algo se ha conseguido. El Parlamento de Andaluc¨ªa se ha comprometido a protegerla. No es nuevo, y aunque han sido varias las propuestas y promesas ¡ªno pocas electorales¡ª, lo cierto es que poco o nada se ha hecho hasta la fecha. El pasado mes de abril la C¨¢mara aprob¨®, por unanimidad, crear una comisi¨®n t¨¦cnica y pol¨ªtica con este fin. Se han de concretar los plazos y las acciones a seguir, pero, de momento, es un principio.
Datos de la zona
- La Vega de Granada es una amplia llanura de inundaci¨®n por el fondo de la depresi¨®n del r¨ªo Genil que estructura el ¨¢rea metropolitana de la provincia.
- El espacio cuenta con una extensi¨®n de 1.500 kil¨®metros cuadrados.
- La distancia que ocupa es de 50 kil¨®metros de este a oeste y de 35 de norte a sur.
- La zona est¨¢ situada a unos 500 metros sobre el nivel del mar.
Con cautela pero ¡°esperanzados¡± acogen en la Plataforma Salvemos la Vega este logro. En 2013 presentaron la solicitud de declaraci¨®n de la Vega de Granada como Bien de Inter¨¦s Cultural, tipolog¨ªa Zona Patrimonial, con m¨¢s de 20.000 firmas de apoyo. Esa solicitud no lleg¨® a m¨¢s, pero s¨ª las r¨²bricas, que son m¨¢s de 50.000. Las organizaciones agrarias se unieron al principio a esta reclamaci¨®n, pero retiraron su apoyo despu¨¦s. Quieren proteger la vega pero no que los agricultores y ganaderos sean ¡°simples espectadores¡±. Estos buscan ser los protagonistas de la recuperaci¨®n y protecci¨®n de un espacio que conserva parte del sistema de riego de hace siglos, restos arqueol¨®gicos, fertilidad agr¨ªcola, diversidad de paisajes y patrimonio arquitect¨®nico y urbano.
Conseguir la protecci¨®n y la dinamizaci¨®n econ¨®mica y cultural desde el ¨¢rea metropolitana hasta Loja es lo que pretende el movimiento que desde hace dos a?os celebra un concierto ben¨¦fico con artistas como Miguel R¨ªos, que no dudan en defender la necesidad de luchar por el patrimonio que para Granada y los pueblos que se asientan sobre ella supone este espacio agr¨ªcola que tiene en torno al r¨ªo Genil uno de sus elementos aglutinadores.
El parlamentario socialista por Granada Javier Arag¨®n fue el que defendi¨® la proposici¨®n no de ley presentada tambi¨¦n por IU que posibilit¨® la creaci¨®n de la comisi¨®n. En su opini¨®n, es importante que ¡°todos nos hayamos puesto de acuerdo¡±. Ayuntamientos, organizaciones agrarias y colectivos sociales deben fijar ahora c¨®mo proteger un espacio que diariamente se ve sometido a riesgos y amenazas, pero que cuenta tambi¨¦n con ¡°importantes fortalezas y oportunidades¡±, destaca.
La crisis puede convertirse en una oportunidad para hacer las cosas de otro modo en un espacio que precisa respetar su protecci¨®n y a la vez potenciar los recursos para generar riqueza y empleo. Atr¨¢s qued¨® el Parque Agrario de la Vega de Granada que se anunci¨® como uno de los proyectos estrella de la conmemoraci¨®n del Milenio de Granada. Tambi¨¦n est¨¢ aparcado el Plan Especial de la Vega y hay una conciencia clara de que el Potaug (Plan de Ordenaci¨®n del Territorio de la Aglomeraci¨®n Urbana de Granada), que se aprob¨® en 1999, debe ser ¡°complementado¡± por otros instrumentos que den respuesta a la protecci¨®n de este espacio. La previsi¨®n es que despu¨¦s de verano haya resultados de esos trabajos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.