El Ayuntamiento pone a la venta 334 pisos de alquiler social con 189 familias
El Ayuntamiento coloc¨® 1.860 viviendas a un fondo de inversi¨®n en 2013 para sobrevivir
El Ayuntamiento de Madrid, gobernado por Ana Botella (PP), ha puesto a la venta tres promociones de vivienda p¨²blica de alquiler, con 334 pisos y 189 familias inquilinas. Hace justo un a?o ya coloc¨® 1.860 viviendas sociales al fondo de inversi¨®n Blackstone.
Botella anunci¨® en 2012 que la Empresa Municipal de la Vivienda (EMVS) no construir¨ªa m¨¢s pisos y se limitar¨ªa a gestionar los que ya tiene. Pero la sociedad est¨¢ en peligro de liquidaci¨®n por sus fuertes p¨¦rdidas, lo que le ha llevado a vender en un a?o un tercio de sus pisos de alquiler social. En 2018, le quedar¨¢n apenas 4.000 viviendas de las 8.600 que ten¨ªa en 2013, y, si se cumplen sus previsiones, ni un metro cuadrado de los 1,42 millones de los que dispon¨ªa (con capacidad para albergar 10.000 pisos protegidos).
En esta ocasi¨®n, la EMVS ha puesto a la venta 163 viviendas (ocupadas por 132 familias) en Villa de Vallecas, 90 viviendas vac¨ªas en Vic¨¢lvaro y y 82 viviendas (con 57 familias) en Usera. En total, son 15.276 metros cuadrados, con 334 garajes y 253 trasteros.
¡°Deber¨ªa estar castigado por ley¡±
"La situaci¨®n econ¨®mica es angustiosa. Pero la Empresa Municipal de la Vivienda y el ?rea de Urbanismo s¨®lo contemplan, como ¨²nica medida y salida a dicho escenario, la venta del patrimonio de la sociedad p¨²blica, sin importarles lo que eso suponga en la vida de miles de familias madrile?as", opina Jaime Lissavetzky. El portavoz socialista aboga por convertir la EMVS en una agencia municipal de vivienda, evitando que su funci¨®n social se supedite a los beneficios.
"Ana Botella deber¨ªa aclarar si esquilmar el patrimonio p¨²blico para sacar dinero r¨¢pido y que las empresas privadas hagan suculentos negocios es su modo de salir de la crisis", dice IU. "Deber¨ªa estar castigado por ley vender algo que se ha construido con el dinero de todos, y por tanto con su esfuerzo, para que se lucren unos pocos", a?ade la formaci¨®n liderada por ?ngel P¨¦rez, que defiende "el mantenimiento de un parque de viviendas de alquiler social".
Para el l¨ªder de UPyD, David Ortega, "la venta de viviendas ocupadas de alquiler social a fondos de inversi¨®n es una medida desesperada de una empresa p¨²blica p¨¦simamente gestionada por el PP". "La EMVS ha renunciado a la funci¨®n social para la que fue creada", concluye.
El inversor que adquiera esos pisos lo har¨¢ con inquilinos dentro, puesto que los contratos de alquiler son a 10 a?os. La renta anual estimada de esos arrendamientos asciende a 1,44 millones, aunque la morosidad de los inquilinos (familias con escasos recursos) alcanza hasta el 19%. Tomando como referencia el precio por el que se vendieron los pisos a Blackstone (69.000 euros de media), el Ayuntamiento podr¨ªa ingresar ahora 11,2 millones de euros. Adem¨¢s, se librar¨¢ de una deuda hipotecaria pendientes de dos millones de euros.
La operaci¨®n de Blackstone salv¨® a la EMVS de la desaparici¨®n, pero fue ruinosa en t¨¦rminos econ¨®micos y sociales. Las 1.860 viviendas (ubicados en Carabanchel, Centro, Villa de Vallecas y Villaverde) ten¨ªan un valor contable de 162 millones pero se colocaron por 128,5 millones, es decir, con un descuento del 20%.
La alcaldesa prometi¨® que las condiciones de los inquilinos no cambiar¨ªan. Sin embargo, ya han comprobado que no es lo mismo tener como casero a una empresa p¨²blica con fines sociales que un fondo de inversi¨®n que busca rentabilidad. Blackstone est¨¢ obligada a mantener las condiciones de los contratos, pero las aplica de forma estricta. Antes hab¨ªa 300 vecinos que no pagaban; ahora son 50, con cuatro desahucios pendientes y uno a punto de ejecutarse (en los otros tres casos, el Ayuntamiento est¨¢ buscando un piso alternativo a los afectados).
El problema de la EMVS es que estaba obligada a vender esas viviendas para sobrevivir. En octubre de 2012, Botella anunci¨® que el Ayuntamiento no construir¨ªa m¨¢s pisos protegidos. Primero, porque considera que es competencia de la Comunidad de Madrid (PP). Segundo, porque cree que ¡°ya no son necesarias¡±, puesto que el precio m¨¢ximo de los pisos protegidos es similar al de la vivienda libre. Y, tercero, porque la EMVS no puede endeudarse para hacer m¨¢s so riesgo de entrar en p¨¦rdidas y que el Ministerio de Hacienda (PP) ordene disolverla en virtud de la Ley de Sostenibilidad de la Administraci¨®n Local.
Pese a dejar de construir vivienda, la EMVS precis¨® en 2013 de un plan de supervivencia. La auditora PricewaterhouseCoopers se?alaba en un informe confidencial al que tuvo acceso EL PA?S: ¡°El negocio es deficitario, con un volumen significativo de pagos no corrientes inasumibles. El endeudamiento bancario no es sostenible y la compa?¨ªa tiene problemas severos de liquidez inmediata¡±.
El plan de viabilidad para evitar la quiebra contempl¨®, adem¨¢s de la venta de esas 1.860 viviendas de alquiler social, que el Ayuntamiento asumiera 20 parcelas con una hipoteca de 234 millones, que la EMVS hab¨ªa comprado en el momento ¨¢lgido de la burbuja y que no le serv¨ªan de nada toda vez que ya no iba a edificar vivienda social.
La EMVS ten¨ªa, a 1 de enero del a?o pasado, 6.152 viviendas en alquiler con un valor contable de 333 millones y una renta anual de 13,5 millones. Y, en venta, 2.450 inmuebles (por valor de 213 millones) y 1,43 millones de metros cuadrados de suelo.
El plan de salvaci¨®n preve¨ªa vender esos 2.450 pisos y todo el suelo antes de 2018. Sin embargo, la Intervenci¨®n General avis¨® en abril del incumplimiento del plan: las viviendas no se estaban vendiendo al ritmo requerido pese a descuentos del 20%, y el desequilibrio financiero previsto a final de a?o rozaba los 26 millones. Por ello, conmin¨® a ¡°adoptar medidas adicionales para compensar la desviaci¨®n¡±.
Ese requerimiento es el que explica que se hayan puesto a la venta ahora otros 334 pisos protegidos. Pese a que, seg¨²n Botella, la EMVS se iba a convertir en una empresa de alquileres sociales, en solo un a?o, cuando se cierre esta operaci¨®n, habr¨¢ pasado de gestionar 6.152 viviendas a tan s¨®lo 4.238. Cuando la alcaldesa anunci¨® que no construir¨ªa m¨¢s vivienda p¨²blica, en octubre de 2012, hab¨ªa 13.000 familias a la espera de un piso protegido.
Un a?o en alerta roja
- La alcaldesa, Ana Botella (PP), anunci¨®
en octubre de 2012 que el Ayuntamiento> dejaba de construir vivienda protegida. Hab¨ªa entonces 13.000 familias en lista de espera para obtener un piso.
- A 1 de enero de 2013, la Empresa Municipal de la Vivienda (EMVS) ten¨ªa 6.152 viviendas sociales en alquiler, 2.450 pisos en venta y 1,43 millones de metros cuadrados de suelo disponible.
- Un informe confidencial de la auditora PricewaterhouseCoopers publicado por EL PA?S en mayo revel¨® que la EMVS no era "operativamente viable". "El negocio es deficitario, con un volumen significativo de pagos no corrientes inasumibles. El endeudamiento no es sostenible y la compa?¨ªa tiene problemas severos de liquidez inmediata".
- La auditora recomendaba, entre otras medidas, vender pisos de alquiler para obtener liquidez a corto plazo.
- Ese mismo mes, el Ayuntamiento puso en venta 1.860 viviendas de alquiler social ¡ªcon inquilinos¡ª a un precio de 120 millones de euros (65.000 por piso de media). El valor contable de esas viviendas ascend¨ªa a 162 millones.
- Los pisos fueron adquiridos por el fondo de inversi¨®n estadounidense Blackstone por 128,5 millones, un 20% menos de su valor contable.
- Los inquilinos de estas promociones se han quejado de que las condiciones de su alquiler se han endurecido. Se han iniciado cuatro desahucios, aunque s¨®lo uno est¨¢ en v¨ªas de ejecuci¨®n.
- Pese a esta venta, la EMVS sigue en alerta roja. En el primer trimestre del a?o incumpli¨® el plan de salvamento, y acumula un desequilibrio de 26 millones.
- Ayer anunci¨® la venta de 334 pisos m¨¢s de alquiler social. En un a?o, su cartera pasar¨¢ de 6.152 a 4.238 viviendas.
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