Como los vecinos simp¨¢ticos del tercero

Qu¨¦ nervios. El estadio llevaba casi lleno un par de horas, pero hubo que esperar hasta las 21.37 para que el cielo de Madrid se encendiera con las primeras r¨¢fagas de fuegos artificiales. Era la se?al de que los cinco responsables de esta nueva invasi¨®n brit¨¢nica asomaban sus bellos rostros postadolescentes. Cuatro minutos m¨¢s tarde se diseminaron por el pasillo central para que cada espectadora (disc¨²lpenos el 10 por ciento de aforo masculino) evaluara sus preferencias. ?Mechas rubias disparadas? ?Barbita incipiente? ?Camiseta sin tirantes con brazos tatuados? ?Bermudas y media pierna al aire? Niall chapurre¨® algo de castellano, lo que siempre punt¨²a, antes de que Don¡¯t forget where you belong invitara al despliegue masivo de banderitas rojigualdas. Pero el ojito derecho de las ni?as sigue siendo, por mayor¨ªa abrumadora, Harry Styles. Incluso con esa especie de turbante moruno que se coloc¨® en mitad de la melena.

El pop pr¨ªstino y dulz¨®n de 1D ayuda a practicar ingl¨¦s

El pop pr¨ªstino y dulz¨®n de 1D ayuda a practicar ingl¨¦s y admite una escucha despreocupada. Todo en ¨¦l es tan feliz como aparentan ser sus art¨ªfices, que hasta se permiten cantarle a la eclosi¨®n hormonal (Live while you¡¯re young) con un riff prestado de los Clash e inundarnos de serpentinas con Happily. Through the dark tiene encanto ac¨²stico, las armon¨ªas vocales de You and I son meritorias y Little things o Moments pulverizaron las bater¨ªas de los m¨®viles de tanto agitarlos en modo linterna. Pero, por supuesto, llega un momento en que la avalancha de estribillos gritones se hace exasperante.

No importa. Lo de anoche en el Vicente Calder¨®n no era un mero concierto, sino la primera cita con unos chicos de 20 para miles de chicas de, a lo sumo, 15. Y los mozalbetes arrasaron porque, estando de buen ver, se comportan como los vecinos simp¨¢ticos del tercero. Cercanos, desali?ados, accesibles, bromistas. Seguro que dicen ¡°hola¡± en el ascensor y ayudan a subir la bolsa de la compra. Eso s¨ª: ning¨²n chico del tercero se hace blanqueamientos dentales tan concienzudos como los suyos.

Primera banda que encadena dos estadios desde los Rolling Stones en 1982

Hubo ayer plataformas elevadas en mitad del estadio, momentos de karaoke ca¨®tico (I gotta feeling, Viva la vida), lanzamiento de sujetadores, revuelo en Better than words ante una t¨ªmida insinuaci¨®n con epicentro p¨²bico. Y los consabidos episodios de bochorno guiri: los c¨¢nticos de Yo soy espa?ol, las promesas de ¡°Ti amo¡± (sic) a las seguidoras. Pero a falta de un diagn¨®stico sociol¨®gico, la terca realidad dice as¨ª: 45.000 almas ayer en el Manzanares, 30.000 esta noche (quedan entradas, chicas), primera banda que encadena dos estadios desde los Rolling Stones en 1982. Nos falta saber cu¨¢nta Lizipa¨ªna despachar¨¢n hoy las farmacias.