La gesti¨®n de El Paular pasa de los monjes a una empresa p¨²blica

La empresa p¨²blica Tragsa toma el relevo a los monjes benedictinos en la gesti¨®n integral del Real Monasterio de Santa Mar¨ªa de El Paular.

El Ministerio de Educaci¨®n, Cultura y Deporte ha firmado un acuerdo con Tragsa por un periodo de 25 a?os con una misi¨®n: conseguir que el conjunto monumental se autofinancie y se convierta en la pieza clave de la revitalizaci¨®n de toda la comarca del Guadarrama.

Cultura ha encargado a Tragsa que rentabilice el conjunto hist¨®rico

Tambi¨¦n se autoriza a los monjes al uso parcial del Monasterio para continuar con la vida y la actividad que llevan desarrollando desde 1954, ¡°como medio de generaci¨®n de recursos que garanticen su subsistencia¡±.

La empresa p¨²blica deber¨¢ rentabilizar todas las unidades de negocio del conjunto arquitect¨®nico, propiedad del Estado y Bien de Inter¨¦s Cultural con categor¨ªa de monumento desde junio de 1876. El Ministerio es consciente de que el hotel ubicado dentro del Real Monasterio ¡ªcerrado hace dos semanas¡ª constituye uno de los principales activos con los que cuenta Tragsa para la revitalizaci¨®n del conjunto.

La multinacional Sherwood no renov¨® a su vencimiento el contrato de arriendo de las instalaciones, que hab¨ªa formalizado con la orden benedictina en julio de 1973; hasta ese momento estaban explotadas por la sociedad Entursa, antigua empresa nacional de turismo. Sus puertas permanecen cerradas desde el 14 de julio, y se ha rescindido el contrato a los 46 trabajadores, la mayor parte vecinos de Rascafr¨ªa.

Los monjes recibieron el usufructo del conjunto en 1948. Desde ese momento, el Ministerio se ha ocupado de la reconstrucci¨®n y restauraci¨®n del conjunto hist¨®rico, y los monjes de su gesti¨®n y mantenimiento en buen estado.

La intenci¨®n del Ministerio es que el establecimiento, de gran arraigo y el ¨²nico de sus caracter¨ªsticas en la zona, salga a licitaci¨®n p¨²blica, aunque no dan fecha para ello. Los despedidos esperaban que la Administraci¨®n estatal se encargara de garantizar su subrogaci¨®n en la nueva empresa. No va a ocurrir. Fuentes ministeriales aclaran que ¡°la pr¨®xima adjudicaci¨®n no est¨¢ sujeta a contrataci¨®n¡±. Sobre todo, se excusan, porque las Administraciones p¨²blicas no han tenido nada que ver con la decisi¨®n de la empresa al respecto. A?aden que, adem¨¢s, cualquier cadena interesada tendr¨¢ que hacer frente a la renovaci¨®n de las instalaciones, que se encuentran obsoletas, y la reforma llevar¨¢ un tiempo indeterminado dependiendo de hasta donde se quiera llegar.

Los trabajadores se sienten abandonados a su suerte por parte de la Administraci¨®n. ¡°No nos han recibido ni han escuchado nuestro planteamiento, se pod¨ªa haber negociado una soluci¨®n¡±, sostiene Antonio Velasco, presidente del comit¨¦ de empresa del hotel.

Con 59 a?os tiene pocas esperanzas de conseguir un nuevo empleo. ¡°Empec¨¦ a trabajar en el hotel con 19 a?os y ver este final es muy triste. Se han cargado el pilar de la econom¨ªa del valle y de toda la comarca¡±, asegura.

La alcaldesa de Rascafr¨ªa, la socialista Ana Garc¨ªa Masedo, corrobora la importancia de abrir nuevamente las instalaciones. ¡°No solo eran las bodas que se celebraban all¨ª, sino que toda esa actividad redundaba en los comercios y otros peque?os hoteles y casas rurales¡±, explica Garc¨ªa Masedo.

Una opini¨®n que enlaza con la encomienda ministerial a Tragsa, en la que juega un papel fundamental la dinamizaci¨®n del entorno y consolidar a El Paular como un atractivo cultural y tur¨ªstico. Para ello, la empresa deber¨¢ dise?ar un plan de gesti¨®n que incluya explotaci¨®n, uso de las edificaciones y los terrenos del conjunto. Habr¨¢ un seguimiento por parte de una comisi¨®n mixta ministerio-Tragsa.

En 1996, la direcci¨®n general de Bellas Artes, aprob¨® un plan director en el que se contemplaba la necesidad de una gesti¨®n integral del lugar. En el marco de esta iniciativa se suscribi¨® un convenio entre el Ministerio de Cultura y la Comunidad de Madrid por el que se han realizado obras por 15 millones.

Tambi¨¦n se intent¨® crear una fundaci¨®n con participaci¨®n de todas las administraciones, que la crisis econ¨®mica hizo inviable.

La restituci¨®n de los 52 frescos de Vicente Carducho a su ubicaci¨®n original en el claustro supuso un gran impulso para el Real Monasterio. Ahora llega el turno de Tragsa.