¡®La Pantera Rosa¡¯ cumple 30 a?os ti?¨¦ndose... de color rosa

La primera obra p¨²blica del escultor Miquel Navarro, la gran fuente de hierro de Valencia conocida como La Pantera Rosa, cumple tres d¨¦cadas absorbida completamente por el esp¨ªritu crom¨¢tico del personaje animado y sin apenas vestigios del insecto que pretend¨ªa representar su autor.

La obra, ¨ªntegramente de hierro y 22 metros de altura e instalada en septiembre de 1984 en la entrada sur de la ciudad bajo el nombre oficial de "Fuente P¨²blica", acaba de ser pintada de rosa, algo que ha sorprendido a su autor, quien, sin embargo, acepta la transformaci¨®n como algo natural.

"?Pero si era roja!" es lo primero que pens¨® Navarro (Mislata, Valencia, 1945) al ver el cambio de color, pero seg¨²n reconoce a EFE, "no est¨¢ mal" pues la obra ya no es suya y adem¨¢s, mucha gente le ha llamado para decirle lo bonita que est¨¢. "Ya no tengo neuras", confiesa.

La fuente, en la que el escultor -Premio Nacional de Artes Pl¨¢sticas en 1986- pretend¨ªa representar un insecto, fue inmediata y popularmente rebautizada con el nombre de Pantera Rosa y aunque en un principio sorprendi¨® y no fue del todo entendida, se ha convertido en un s¨ªmbolo para los vecinos de la ciudad y un enclave "fijo" donde situar citas o contextualizar noticias, sucesos o atascos.

El mismo d¨ªa de la inauguraci¨®n, recuerda Navarro, hab¨ªa unos j¨®venes que ya se refirieron a ella como la Pantera Rosa, lo que, en su opini¨®n, "est¨¢ bien" pues es una manera de que la gente se familiarice y la haga propia.

Miquel Navarro recuerda esta primera gran obra con emoci¨®n y cari?o, as¨ª como que tras recibir el encargo del Gobierno local se puso manos a la obra inmediatamente "con un presupuesto baj¨ªsimo", pero entonces todo eso no le importaba pues pesaba m¨¢s el hecho de hacer una pieza en el ¨¢mbito p¨²blico.

A partir de ah¨ª ha hecho muchas otras en diferentes ciudades de Espa?a, como Barcelona, Bilbao, Vitoria, Las Palmas, M¨¢laga o Zaragoza, e incluso en el extranjero (Bruselas), por lo que cree que algo en esta primera Fuente P¨²blica trascendi¨® m¨¢s all¨¢ del contexto local al que estaba enfocada.

"Creo que la ciudadan¨ªa se qued¨® impresionada", asegura en una conversaci¨®n, en la que entiende la sorpresa ya que reconoce que no se trata de una fuente al uso, aunque conceptualmente cree que puede recordar a las fuentes romanas que conmemoran la tra¨ªda del agua potable desde las cercan¨ªas de Roma al centro.

Considera que hubo gente que lo entendi¨®, pero fue poca, mientras que la gran mayor¨ªa ve en ella al m¨ªtico personaje de ficci¨®n, nacido a partir de los t¨ªtulos de cr¨¦dito de la pel¨ªcula La Pantera Rosa, de Blake Edwards y estrenada en 1963.

Los dibujos animados vieron la luz un a?o m¨¢s tarde de la mano del prestigioso animador Friz Freleng, a quien Edwards pidi¨® tres cosas: que fuera graciosa, muda y de color rosa.

Navarro piensa que, despu¨¦s de los 30 a?os que ha cumplido su obra -restaurada en 1997 ante su entonces grado de deterioro-, el hecho de que est¨¦ limpia es una consideraci¨®n a la pieza, pues en su opini¨®n, ha pasado un largo per¨ªodo de tiempo sin, como m¨ªnimo, un tratamiento de pintura.