Las bambalinas de los Cursos de Verano

Los Cursos de Verano de la UPV cerraron su ¨²ltima edici¨®n, celebrada entre mediados de junio y principios de septiembre, con un r¨¦cord de asistencia. Un total de 9.683 personas participaron en alguna de las 127 actividades propuestas, cifras que representan el ¨¦xito de una f¨®rmula iniciada hace 33 a?os y que responde al trabajo y esfuerzo del comit¨¦ directivo, el de selecci¨®n y el resto de personas que trabajan en los Cursos de Verano.

Jos¨¦ Luis de la Cuesta y Juan Etxeberria, director y subdirector, respectivamente, de los Cursos de Verano, todav¨ªa no han cerrado los balances y memoria de la edici¨®n reci¨¦n celebrada, pero ya trabajan en la siguiente.

La Fundaci¨®n que gestiona la iniciativa, perteneciente a la UPV, abrir¨¢ este octubre la convocatoria para la recepci¨®n de solicitudes para que bien, o profesores de la UPV, instituciones, entidades o hasta particulares, remitan sus propuestas. La convocatoria marca una serie de requisitos, ¡°que ser¨¢n los que en buena medida determinen si se acepta un curso dentro del programa¡±, explica De la Cuesta. El a?o pasado recibieron un total de 230 propuestas, frente a las 127 actividades programadas finalmente, con lo que m¨¢s de la mitad se quedan fuera.

Las sesiones sumaron en su ¨²ltima edici¨®n 9.683 participantes

El grueso del programa, unas 70 actividades, est¨¢ compuesto por los cursos ordinarios, las sesiones resultantes del proceso de selecci¨®n, mientras que, dependiendo del a?o, los congresos, generalmente propuestos por diversas entidades y con unos contenidos pr¨¢cticamente cerrados, suman entre 12 y 15, adem¨¢s de las alrededor de 30 iniciativas dirigidas a un p¨²blico m¨¢s amplio y dise?adas, principalmente, por Etxeberria.

¡°Nosotros no podemos hacer todos los cursos que nos presentan, por eso el comit¨¦ de selecci¨®n los ordena¡±, detalla De la Cuesta, quien previamente junto a su equipo ¡ªel comit¨¦ de direcci¨®n lo forman cinco personas de diversas especialidades acad¨¦micas¡ª, hacen una primera criba. Las propuestas se clasifican b¨¢sicamente en funci¨®n del cumplimiento de los requisitos exigidos. ¡°Quienes no respetan radicalmente las normas los descartamos, mientras que aquellos que cometen alg¨²n error, pero subsanable, y el resto, los remitimos al comit¨¦ de selecci¨®n¡±, continua De la Cuesta.

Es este organismo, nombrado por el rector de la UPV, I?aki Goirizelaia, y compuesto por especialistas en diversas materias, quien orden las propuestas recibidas siguiendo una serie de criterios como ¡°el inter¨¦s, el nivel de internacionalizaci¨®n, su valor econ¨®mico, la perspectiva en cuanto al n¨²mero de asistentes que puede atraer. Cuatro o cinco elementos¡±.

A partir del listado resultante y asegurando un equilibrio entre las diversas tem¨¢ticas (educaci¨®n, salud y asuntos sociales, entre otras) y el nivel (de car¨¢cter divulgativo, para personas con estudios relacionados con la materia y para especialistas), se va conformando el programa. Tambi¨¦n influye el presupuesto, los Cursos de Verano han contado este 2013 con 1,3 millones de euros, y tanto De la Cuesta como Etxeberria destacan el apoyo de la Fundaci¨®n BBVA, colaboradora desde hace 26 a?os de la iniciativa, y de otras instituciones, entidades o empresas, como Irizar, junto con la que organizan el ciclo El Viaje de la Vida, uno de los m¨¢s populares.

¡°Uno de los aspectos diferenciales¡±, aclara Etxeberria en referencia a los programas estivales de otros centros como la Universidad Complutense o la Men¨¦ndez Pelayo, es que ¡°cada curso obliga a tener una asistencia m¨ªnima de 40 alumnos, por lo que todos los temas deben tener un cierto inter¨¦s¡±.

Entre los asistentes destacan los profesionales de la educaci¨®n

Etxeberria, que forma parte del equipo de los Cursos de Verano desde hace 19 a?os, destaca adem¨¢s el cambio que se ha producido en el perfil de las personas que participan en estas iniciativas. Si hace unos a?os destacaban num¨¦ricamente los estudiantes universitarios, el porcentaje de estos se ha reducido dr¨¢sticamente hasta un 11,29% de los 9.683 totales. ¡°Antes de que entrar en vigor Bolonia los estudiantes recib¨ªan cr¨¦ditos por participar en estas actividades, y ahora que eso ha cambiado el perfil, tambi¨¦n lo ha hecho¡±, ilustra el subdirector de los Cursos de Verano.

Por su parte, los considerados ¡°profesionales¡± suponen el 56,17% y dentro de estos destacan los profesores, con un porcentaje del 21,06%. De hecho, recuerda Etxeberria, el curso que mayor asistencia ha concitado este verano fue el de Observaci¨®n sistem¨¢tica de la educadora Pilar-L¨®czy. Cuando educar empieza por cuidar, al que asistieron m¨¢s de 300 personas, llenando el aula magna de la Facultad de Educaci¨®n del campus de la UPV en San Sebasti¨¢n.

La oferta formativa estival de la UPV ha introducido cambios este a?o al incorporar al programa actividades que se ven¨ªan realizando en Bilbao y en Vitoria pero desligadas de la organizaci¨®n de los Cursos de Verano. As¨ª, la capital vizca¨ªna ha acogido este a?o 16 sesiones, mientras que la alavesa, tres.

Adem¨¢s, dentro de las 127 actividades de los Cursos nueve de ellas se han celebrado online durante todo el a?o. Son algunas de las propuestas m¨¢s significativas que se celebraron en la edici¨®n de 2013 y que la UPV grab¨® y elabor¨® materiales espec¨ªficos para tambi¨¦n poderse cursar a trav¨¦s de Internet. Este tipo de iniciativas, precisan De la Cuesta y Etxeberria, tambi¨¦n est¨¢n teniendo un notable ¨¦xito. Las actividades online han tenido este a?o 255 alumnos frente a los 194 de 2013.