Los vecinos de Arganzuela solicitan la cesi¨®n del mercado de Legazpi
40 colectivos piden al Ayuntamiento un centro donde realizar actividades despu¨¦s del derribo de la Traba
Todo el mundo conoce a Eva en Arganzuela. Pero nadie la ha visto todav¨ªa. No es una persona, ni siquiera es algo material. De momento, solo es un proyecto que los vecinos del distrito madrile?o tratan de sacar adelante desde el desalojo, el pasado agosto, del centro social ocupado La Traba. Lo llaman?Espacio Vecinal de Arganzuela (EVA). Y pretenden que sea un sitio de "todos y para todos" donde poder desarrollar las actividades que se hac¨ªan en el local derribado. Con esa intenci¨®n, cerca de 40 colectivos han solicitado al Ayuntamiento este martes la cesi¨®n de uso del antiguo mercado de frutas y verduras de Legazpi, abandonado desde hace a?os.?
Los promotores de la iniciativa presentar¨¢n su proyecto a la concejala de Arganzuela, Carmen Rodr¨ªguez Flores, el pr¨®ximo 11 de noviembre y tienen planeada una movilizaci¨®n el 15 para recabar apoyos. Adem¨¢s de los colectivos que conformaban la Traba, se han unido al proyecto cinco asociaciones vecinales, redes de solidaridad popular, huertos urbanos y AMPAS de los colegios de esta zona del sur que cuenta con?151.090 habitantes.?
Ninguno de los proyectos que se han planteado para reinventar este espacio municipal de m¨¢s de?24.000 metros cuadrados se ha llegado a poner en marcha. Sobre la mesa, hab¨ªa varias opciones para reconvertir este local protegido en?un intercambiador de transportes, una oficina de turismo que ofreciera informaci¨®n sobre Madrid R¨ªo, un aparcamiento, oficinas e incluso un nuevo mercado de abastos. Pero ninguno ha llegado a ver su primera piedra. "Lleg¨® la crisis y se quedaron sin dinero para hacer nada. Ahora el mercado?est¨¢ cerrado a cal y canto y sigue deterior¨¢ndose", se?ala Ra¨²l Rivero, representante de la Traba, quien no descarta la idea de ocupar el espacio si la Administraci¨®n no les da una respuesta.?
Los impulsores del proyecto se comprometen ¡ªapunta Rivero¡ª?a "adecuar el espacio y a generar y gestionar actividades abiertas al p¨²blico y sin af¨¢n de lucro". A cambio reclaman al Consistorio el pago del suministro b¨¢sico de?agua y luz. Las negociaciones no han llegado tan lejos esta tarde, pero al menos han conseguido la promesa del consistorio de que estudiar¨¢ su propuesta, que sigue la senda de iniciativas parecidas a la del Centro Social Seco, en el distrito de Retiro, y del Espacio Vecinal Montamarta en San Blas.
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