El eterno alcalde de Marinaleda
Gordillo seguir¨¢ en el Ayuntamiento pese a creer que lo ¡°ideal¡± era estar en el Parlamento
El Ayuntamiento de Marinaleda (Sevilla) est¨¢ situado en la avenida Libertad. La misma que, seg¨²n su alcalde, Juan Manuel S¨¢nchez Gordillo, le dio Izquierda Unida para decidir si permanec¨ªa al frente del municipio sevillano o manten¨ªa su esca?o en el Parlamento. ¡°IU nunca ha intervenido en esto para nada¡±, explica el dirigente de la CUT. Pero su decisi¨®n de continuar como alcalde no ha sido voluntaria. ¡°Los vecinos quer¨ªan que me quedara en el Ayuntamiento. Sigo como alcalde m¨¢s por su presi¨®n que por convicci¨®n¡±, reconoce el hist¨®rico sindicalista. Sin embargo, el PSOE mantiene que Gordillo se ha visto acorralado ante la negativa de sus concejales de asumir el mando. Con esta decisi¨®n, en cumplimiento de la ley electoral andaluza, Gordillo pone fin a 13 a?os como parlamentario y punto y seguido a su perpetua presencia en la alcald¨ªa (35 a?os).
Gordillo renunci¨® a su esca?o el pasado mi¨¦rcoles, un minuto antes de que expirara el plazo. ¡°Ha sido una decisi¨®n muy dif¨ªcil¡±, se escuda el regidor para justificar el vaiv¨¦n de decisiones tomadas en los ¨²ltimos d¨ªas. En un primer momento, el sindicalista se inclin¨® por renunciar a la alcald¨ªa y compaginar su cargo como parlamentario con el de teniente de alcalde. ¡°Creo que esta era la mejor f¨®rmula. De esta manera, pod¨ªa seguir trabajando en el proceso de transformaci¨®n de Marinaleda y a su vez no fallar a los andaluces que me eligieron como parlamentario. Pero el pueblo es el que decide¡±, explica el pol¨ªtico, quien insiste en que esta opci¨®n era ¡°la ideal y la m¨¢s racional¡±. ¡°Si se produjera un milagro y pudiera cambiar de decisi¨®n, lo har¨ªa¡±, agrega.
La indecisi¨®n del l¨ªder de la CUT no solo ha alimentado estos d¨ªas las suposiciones sobre cu¨¢l podr¨ªa ser su estrategia, sino que tambi¨¦n ha dado alas a una oposici¨®n casi nula en el Ayuntamiento (el PSOE tiene dos concejales frente a los 9 de IU). ¡°Una vez m¨¢s, Gordillo ha montado el mismo circo al que nos tiene acostumbrados. Se ha re¨ªdo del pueblo con sus cambios de decisi¨®n¡±, critica el secretario general del PSOE de Marinaleda, Mariano Pradas. Pese a que el alcalde asegura una y otra vez que su decisi¨®n responde a la presi¨®n de los vecinos, los socialistas mantienen que este cambio de ¨²ltima hora se debi¨® a que ning¨²n concejal ha querido asumir el bast¨®n de mando. ¡°?Qui¨¦n se iba a prestar a ser un alcalde de paja?¡±, se pregunta el socialista, quien asegura que la idea de Gordillo era seguir gobernando el Ayuntamiento como teniente de alcalde. ¡°Eso es una estupidez¡±, replica el regidor.
Una hipot¨¦tica marcha atr¨¢s ha mantenido en vilo hasta el ¨²ltimo momento a los m¨¢s de 2.700 habitantes de Marinaleda. ¡°Sin Gordillo, el pueblo no ser¨ªa el mismo. Hemos estado bastante preocupados¡±, reconoce una de las pocas vecinas que quiere pronunciarse sobre el asunto. ¡°Su sitio est¨¢ aqu¨ª. Gobernar un Ayuntamiento de izquierdas es muy dif¨ªcil, cualquiera no es capaz¡±, apunta un vecino mientras toma un carajillo en la Casa del Pueblo, en cuyas paredes cuelga un retrato de Gordillo junto a otro de Hugo Ch¨¢vez. ¡°Yo prefer¨ªa que se hubiera quedado en el Parlamento, desde all¨ª tambi¨¦n puede ayudar mucho a Marinaleda¡±, asegura su compa?ero, quien defiende la opini¨®n minoritaria entre los vecinos. ¡°El Parlamento es un nido de lobos y Gordillo es una gallina. Se lo comen¡±, le replica. Pero esta incertidumbre no ha hecho mella en la relaci¨®n entre alcalde y ciudadanos. ¡°Puede que los vecinos se sientan defraudados. Espero que hagan borr¨®n y cuenta nuevo¡±, reconoce el regidor. ¡°Era una decisi¨®n muy dif¨ªcil, pero lo importante es que se ha quedado. Estamos muy contentos¡±, sentencia otra vecina.
Para S¨¢nchez Gordillo, la opci¨®n de seguir en el Parlamento era la m¨¢s ¡°adecuada¡± por varias razones. Principalmente, defiende que el ostentar el cargo de teniente de alcalde habr¨ªa facilitado el proceso de transici¨®n en el Consistorio, que hubiera pasado a las manos de su n¨²mero dos, Esperanza Saavedra. ¡°Los vecinos parecen que no conciben Marinaleda sin m¨ª, pero yo no voy a durar toda la vida. Creo que era el momento del cambio, un cambio para nada traum¨¢tico porque iba a seguir estando muy presente en el pueblo¡±, expone el regidor, quien considera que quiz¨¢s ha faltado m¨¢s di¨¢logo con la gente. ¡°Con mi enfermedad, todo ha sido muy precipitado y quiz¨¢s no he tenido el tiempo suficiente para explicarles a los vecinos que era mejor que me quedara en el Parlamento. Que no se trataba de una huida¡±, agrega antes de apuntar: ¡°Pero claro, si impones tus convicciones te llaman dictador, si no lo haces no te quedas tranquilo¡±.
Con este cuestionado paso atr¨¢s en su marcha al Parlamento, Gordillo confirma a su vez su decisi¨®n de presentarse a las pr¨®ximas elecciones municipales. ¡°Si me quedo no va a ser para seis meses¡±, afirma el regidor quien sigue defendiendo que es perfectamente compatible el cargo de parlamentario con el de alcalde. ¡°La ley electoral es antidemocr¨¢tica e injusta. El Parlamento pierde al expulsar a los alcaldes porque estos conocen la realidad de sus pueblos. Son diputados que hablan con realismo de las cosas, con conocimiento de lo que sucede¡±, defiende.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.