Diez mil kil¨®metros desde casa para dos horas de radioterapia
Unos 650 lucenses reciben tratamiento en A Coru?a porque en el nuevo hospital de su provincia no lo tienen
¡°A m¨ª, como soy diab¨¦tica y cr¨®nica de otras cosas, con todas estas volteretas, lo que me arreglan por un lado me lo estropean por el otro¡±. Con 60 a?os, para ser cr¨®nica de ¡°otras cosas¡±, haber recibido quimioterapia para un c¨¢ncer de mama y haber pasado el ecuador del tratamiento de radioterapia, Gloria Otero est¨¢ como un roble. Por lo menos de ¨¢nimo. Lo que peor lleva son las ¡°volteretas¡±. Los viajes de casi 200 kil¨®metros de ida y otros tantos de vuelta que hace de su casa en Abuime, en el Ayuntamiento de O Savi?ao, Lugo, al Centro Oncol¨®gico de Galicia, en A Coru?a, para una radiaci¨®n de cinco minutos. Cuando finalice el tratamiento, habr¨¢ recorrido 10.000 kil¨®metros para recibir 25 radiaciones.
Lugo, la provincia gallega m¨¢s extensa, es la ¨²nica cuyo centro de referencia (el Hospital Universitario Lucus Augusti, HULA) carece de unidades de hemodin¨¢mica a tiempo completo, de radioterapia y de medicina nuclear. Unos 650 enfermos se encuentran en la misma situaci¨®n que Otero, seg¨²n la Plataforma pro Hemodin¨¢mica 24 horas, Radioterapia y Medicina Nuclear.
Ya mi madre, en paz descanse, se neg¨® a tratarse por no ir a? A Coru?a. Vio que ten¨ªa los a?os y que iba a morir, y cre¨ªa que no iba a resistir tanto traj¨ªn.
Los kil¨®metros gallegos tienen mil metros solo en los mapas. En carretera cunden much¨ªsimo m¨¢s. Y Otero no viene sola y directa desde Abuime. La ambulancia recoge enfermos por toda la provincia de Lugo, con los correspondientes desv¨ªos. No todos los kil¨®metros, adem¨¢s, son rectos. ¡°Cada vez que vamos a O Corgo, tengo que mirar para unas fincas de puerros. ?Buf! Ah¨ª hay unas curvas salerosas. Y casi nunca me dejan ir delante para que no me maree, porque dicen que est¨¢ prohibido¡±, dice Gloria. O Corgo est¨¢ a unos 20 kil¨®metros al sur de Lugo, es decir, en direcci¨®n contraria a A Coru?a, lo que suma al itinerario 40 kil¨®metros de ida y otros 40 de vuelta. Los pacientes del suroeste de Lugo todav¨ªa podr¨ªan usar los servicios del Hospital de Ourense, que les queda m¨¢s cerca que su propia capital de provincia, pero los de las zonas lim¨ªtrofes con Asturias o Le¨®n ni siquiera tienen esa opci¨®n.
Lo parad¨®jico es que el HULA es el hospital m¨¢s reciente de la red sanitaria p¨²blica gallega. Se inaugur¨® en febrero de 2011, y el entonces y ahora presidente de Galicia, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, asegur¨® que en seis meses se licitar¨ªan las unidades de hematodin¨¢mica, radioterapia y medicina nuclear. Al final de ese a?o, populares, socialistas y nacionalistas consensuaron en el Parlamento una moci¨®n instando a la Xunta de Galicia a equipar al hospital en tres meses.
Desde entonces, la Plataforma pro Hemodin¨¢mica 24 horas, Radioterapia y Medicina Nuclear ha hecho de todo: desde obtener el apoyo de medio centenar de colectivos hasta convocar las manifestaciones m¨¢s numerosas de la democracia en Lugo, pasando por lograr que l¨ªderes pol¨ªticos hiciesen la ¡°ruta del c¨¢ncer¡± en ambulancias. Hace tres a?os, presentaron una iniciativa popular sustentada en 41.095 firmas validadas.
El pasado martes, el PP logr¨® descafeinarla. En lugar de implantar la unidad de hemodin¨¢mica en un plazo de seis meses y las otras dos en un a?o, aprob¨® ampliar todo a 18 meses, y se habla de ¡°procedimientos¡± y no de unidades, con lo que, por ejemplo, los lucenses ha de procurar tener los infartos en horario laboral bancario, de 8 a 3, si quieren ser atendidos en Lugo. A todo esto, ya desde casa, Otero dice que solo le quedan 10 sesiones: ¡°A m¨ª ya me da igual. Me gustar¨ªa que lo arreglasen para los que vienen detr¨¢s¡±.
En O Corgo recogieron el mi¨¦rcoles a Paulino G¨®mez Cap¨®n, setenta y tantos a?os ¡ªno lo precisa¡ª, para su cuarta radiaci¨®n. ¡°Estuve delante de casa, con el port¨®n de entrada abierto, a las siete de la ma?ana, y esper¨¦, esper¨¦ hasta las once. Llam¨¦ y primero me dijeron que no me hab¨ªa presentado y despu¨¦s reconocieron que se hab¨ªan equivocado y me llevaron por la tarde¡±. ¡°Esa es otra, que tenemos que estar como en una oficina, esperando hasta ¨²ltima hora para saber cu¨¢ndo nos recogen¡±, remacha Otero.
¡°Yo no tengo cobertura¡±, tercia en bajo Manuel Gallego Gallego, un hombre de 60 a?os de Parada de Montes, una aldea del sur de la sierra de O Courel. ¡°Avisan al taxi que me viene a buscar y me baja a Monforte¡±. No lo dice, pero el taxi son 22 euros. Tres d¨ªas no tendr¨¢ ambulancia. No hay bus directo de Monforte a Coru?a. Podr¨ªa coger un tren a las 7.30, pero tendr¨ªa que esperar a las 19.30 para la vuelta y un total de seis horas de viaje. En taxi, 150 euros.
La jornada de Otero del jueves comenz¨® a las 7.26, cuando la ambulancia la fue a buscar a su casa en Abuime. Ese d¨ªa no hab¨ªa m¨¢s pacientes que recoger por lugares y aldeas lim¨ªtrofes, as¨ª que la siguiente parada ya fue en la capital del sur de la provincia, Monforte de Lemos. A las 7.52 en una residencia geri¨¢trica recogieron a una paciente y a su acompa?ante (que, para disgusto de Otero, la desplaz¨® de su asiento). A los cinco minutos recogieron a otra usuaria en el Hospital comarcal y poco despu¨¦s, a otro en una segunda residencia de la tercera edad. De Monforte, directos al HULA, a donde llegaron a las 8.58, dejaron al ¨²ltimo embarcado y partieron hacia A Coru?a a las 9.05. Todav¨ªa parar¨ªan en R¨¢bade para recoger a dos pacientes.
Aun as¨ª, llegaron a las 10.06 al Centro Oncol¨®gico. ¡°Se dieron cuenta de que ven¨ªa el fot¨®grafo, sabe, y apuraron bastante¡±, apunta Otero. A las 10.30, emprendieron la vuelta. Ella lleg¨® a casa a las 14.37. ¡°No entiendo por qu¨¦ no tenemos radioterapia en Lugo, como en las dem¨¢s provincias. A m¨ª, cuando me dieron la opci¨®n de pasar la quimioterapia de Lugo a Monforte, era como estar en casa. Ya mi madre, en paz descanse, se neg¨® a tratarse por no ir a A Coru?a. Vio que ten¨ªa los a?os y que iba a morir, y cre¨ªa que no iba a resistir tanto traj¨ªn¡±.
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