Los doctores Vi?als ser¨¢n juzgados por las muertes del Madrid Arena

Los doctores Sim¨®n Vi?als y su hijo Carlos tendr¨¢n que sentarse en el banquillo de los acusados por la muerte de tres j¨®venes en el pabell¨®n Madrid Arena el 1 de noviembre de 2012, durante la fiesta de Halloween. As¨ª lo ha decidido la Secci¨®n 23 de la Audiencia Provincial de Madrid tras desestimar el recurso presentado por ambos facultativos contra la decisi¨®n del juez de instrucci¨®n n¨²mero 51, Eduardo L¨®pez Palop, de procesarles.

El magistrado instructor les imputaba los delitos de homicidio por imprudencia (penado de uno a cuatro a?os de prisi¨®n) por las muertes de Cristina Arce de la Fuente, Katia Esteban Casielles y Roc¨ªo O?a Pineda. Las tres llegaron en parada cardiorrespiratoria a la enfermer¨ªa y, seg¨²n el juez instructor, recibieron una deficiente atenci¨®n por parte de los doctores. Les atribuye omisi¨®n del deber de cuidado exigible a un profesional de la medicina, lo que habr¨ªa contribuido al fallecimiento de las tres.

L¨®pez Palop tambi¨¦n se?ala la insuficiencia de medios de la enfermer¨ªa, sin personal o instrumental suficiente. Ni siquiera ten¨ªa agua corriente. Los m¨¦dicos dieron a las tres muchachas por muertas, pese a que estaban en parada cardiorrespiratoria.

El abogado de los doctores apel¨® la resoluci¨®n del juez instructor al entender que la situaci¨®n que desemboc¨® en la muerte se produjo en la avalancha mortal registrada en el vomitorio de entrada a la pista del pabell¨®n Madrid Arena. Tambi¨¦n se?al¨® que no sabe si las j¨®venes llegaron con vida a la enfermer¨ªa. Y a?ade que se prepar¨® la enfermer¨ªa para un espect¨¢culo con un aforo de unas 7.000 personas y ¡°no 30.000, como al final acudieron¡±.

Los magistrados de la Secci¨®n 23, que preside Mar¨ªa Riera Ocariz, han analizado los testimonios y los informes periciales presentados por las partes, en especial por algunos testigos que afirmaron durante la instrucci¨®n que los m¨¦dicos no hab¨ªan utilizado adrenalina para reanimar a las v¨ªctimas o que no lo hicieron en la cantidad suficiente para que surtiera efecto. Los jueces han concluido que ¡°existen indicios racionales¡± de que hay unos hechos punibles que ¡°deben ser necesariamente enjuiciados¡±. ¡°La prueba que se practique en ese acto nos dar¨¢ la soluci¨®n definitiva a las cuestiones planteadas en el recurso¡±, concluye la sala.