La sauna de Babel
DV8 presenta en el Mercat su impactante ¡®John¡¯
John, de la emblem¨¢tica compa?¨ªa de danza londinense DV8 Physical Theatre, es una cascada de palabras, un discurso en ocasiones repetitivo, sobre la marginalidad. El abundante texto se come las emociones. Texto en ingl¨¦s, cuya traducci¨®n se sobretitula en catal¨¢n. ?Virtudes de John? Pues impecable puesta en escena y magn¨ªfica interpretaci¨®n: los nueve miembros de DV8 dejan que las palabras moldeen con rudeza sus cuerpos desembocando en un expresivo gesto. Menci¨®n para el bailar¨ªn Hannes Langolf, el protagonista.
Las palabras moldean con rudeza los cuerpos desembocando en un expresivo gesto
Para este espect¨¢culo de danza teatro verbatim (al pie de la letra), Newson se ha inspirado en la historia de un hombre real, John, que vivi¨® una infancia traum¨¢tica, que se adentr¨® en el mundo de la drogadicci¨®n y que pas¨® por la c¨¢rcel, si bien luch¨® por redimirse y lo logr¨®. Esta fuente de inspiraci¨®n ha servido a Newson para trazar un espect¨¢culo con un discurso elegante sobre el amor entre gais, a la vez que convierte las saunas en oasis de paz donde estos hombres comparten sus soledades. No obstante, esta disertaci¨®n contiene demasiadas opiniones (el autor entrevist¨® a 50 hombres en una sauna para armar el montaje): la obra, al final, se convierte en una torre de Babel. No tiene, pues, la fuerza ni la contundencia de su trabajo anterior, Can we talk about this?
John tiene un comienzo potente, se narra la infancia del protagonista en el marco de una familia desestructurada. Una madre ladrona y alcoh¨®lica y un padre que violaba a su hermana. La escenograf¨ªa giratoria, formada por diferentes compartimientos, muestra en cada uno una escena terrible de los primeros a?os de la infancia de John. La narraci¨®n de esos hechos dura los primeros quince minutos de los 75 del espect¨¢culo. El resto son las diversas y numerosas opiniones en boca de los hombres que acuden a las saunas; eso s¨ª, algunas de ellas no exentas de humor. No hay, entonces, un equilibrio entre las diferentes partes del espect¨¢culo. ?Intencionado? Puede ser, quiz¨¢ Newson quiere emocionar y aburrir en diferentes dosis al espectador. Subrayar, sin embargo, el acertado collage musical que abarca diferentes g¨¦neros y que ayuda a crear diferentes ambientes.
El carrusel de la vida
Pocas veces en un teatro tiene uno tanto la sensaci¨®n de estar metiendo la cabeza en una vida ajena. Y qu¨¦ vida. La desastrosa y dur¨ªsima vida de John, devastada por un padre maltratador, una madre ladrona, alcoh¨®lica y suicida, las drogas, la pobreza, la delincuencia, la c¨¢rcel. El carrusel inexorable e implacable de esa vida ¡ªcon momentos atroces¡ª se representa de manera sensacional con la escenograf¨ªa que va girando para mostrarnos los diferentes escenarios del drama. Son como las p¨¢ginas de un terrible libro de cuentos troquelado que los personajes, los actores-bailarines, atraviesan en un continuum hipnotizante, La m¨²sica y el baile, espl¨¦ndidos, enfatizan la historia y a la vez le otorgan una nueva dimensi¨®n fascinante. La valent¨ªa, la entrega y la t¨¦cnica de los int¨¦rpretes, capaces de decir textos y a la vez realizar movimientos de una plasticidad asombrosa, son extraordinarias. Anoche, en la segunda funci¨®n, el p¨²blico ¡ªese p¨²blico connoisseur que ha conseguido Casades¨²s en el Mercat¡ª, aplaudi¨® con fuerza, haciendo salir tres veces a saludar a los int¨¦rpretes, un espect¨¢culo muy duro pero de aquellos que dejan poso en la retina y en el esp¨ªritu.
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