La extraordinaria historia de una mujer normal

Susana se las arregla para trabajar en el colegio, cuidar de su hijo Juan Ignacio (cuyo ¡°retraso madurativo¡± le hace comportarse como un ni?o), hacerse cargo ella sola de la casa y vigilar a su sobrina, enviada al pueblo como castigo por fumar porros (¡°solo uno¡±). Podr¨ªa vivir en cualquier barrio y nadie hablar¨ªa de ella. Pero esta Susana tiene una particularidad: est¨¢ en la sala peque?a del Teatro Espa?ol (hasta el 22 de marzo), la ha creado Lorena Roman¨ªn, y la ha puesto en escena Adriana Roffi. Su vida, aunque es como muchas, tiene t¨ªtulo: Como si pasara un tren. Y hay gente que se sienta a escucharla.

El principal reto de Roffi fue que el tr¨ªo madre castradora, hijo dependiente, sobrina rebelde no se quedara en el clich¨¦. ¡°Susana, en otras obras, ser¨ªa la vecina graciosa, la gritona¡±, opina Mar¨ªa Morales (C¨®rdoba, 1975), encargada de darle vida. Pero ahora Susana, eterna secundaria, tiene el papel principal.

Como la propia int¨¦rprete, por primera vez protagonista tras a?os de carrera y una nominaci¨®n a los Goya como actriz revelaci¨®n en 2014. ¡°Quer¨ªamos hablar de la mujer normal. Y de lo que le pasa a ella, no solo a su entorno. Yo hago un homenaje a las de mi familia. A su viaje. Es por ellas, por los cambios en sus vidas, por lo que evoluciona la sociedad¡±, se?ala.

El viaje es, adem¨¢s, universal. Eso asegura Roffi desde su Argentina natal, donde se encuentra trabajando con el autor y director teatral Daniel Veronese. ¡°En muchos puntos, hacen espejo la madre espa?ola y la argentina¡±, asegura.

El salto entre el original de la bonaerense Roman¨ªn y la obra que ven los espectadores madrile?os se limita a ajustar el lenguaje y cambiar la Patagonia por alg¨²n punto de Castilla. ¡°Habla de tu aldea y hablar¨¢s al mundo¡±, insist¨ªa Roffi en los ensayos. As¨ª, si Valeria (Marina Salas, que ha aparecido en Tres metros sobre el cielo, El barco) y Juan Ignacio (Carlos Guerrero) so?aban sobre el papel con montar en AVE, ahora planean escaparse hasta el Tren a las Nubes, en Los Andes. Y juegan al bingo. Y cantan Resistir¨¦ sobre las voces del D¨²o Din¨¢mico.

Si la obra se mueve en torno al deseo de viajar en tren, el propio recorrido de la compa?¨ªa, nacido hace un a?o, se ha alimentado de un sue?o concreto: la Sala Peque?a del Espa?ol. ¡°Somos un equipo humano de fe, aunque obviamente no fue f¨¢cil¡±, asegura Roffi. La escenograf¨ªa m¨ªnima de la obra (sof¨¢, mesa, alfombra) naci¨® en la sala independiente La Trastienda y consigui¨® hacerse un hueco en el off del Lara para terminar asent¨¢ndose en el mayor de los teatros municipales. La escasa producci¨®n tiene una doble motivaci¨®n, explica: ¡°Esa es mi forma de plasmar la verdad... pero tambi¨¦n era nuestra posibilidad material de contar¡±.

El ¨¦xito de Como si pasara un tren se ha producido tambi¨¦n al margen de los cauces oficiales. ¡°La repercusi¨®n de esta obra ha tenido que ver con lo que genera en el p¨²blico¡±, explica Morales. La actriz critica que las historias que giran en torno a mujeres (¡°femeninas no, ?por qu¨¦ las protagonizadas por hombres no se les llama masculinas?") no tienen a¨²n ¡°la importancia social que merecen¡±. ¡°El argumento no resultaba atractivo. Los problemas de una madre sonaban a telefilme para algunos, porque ese es el ¨²nico espacio que han tenido. ?Es que no tenemos planteamientos filos¨®ficos, vitales?".

Adriana Roffi y Lorena Roman¨ªn preparan ya otra obra. Como si pasara un tren estar¨¢ de gira por Espa?a la temporada que viene. Pero siguen siendo una excepci¨®n: a menos personajes femeninos (sobre todo a partir de cierta edad), menos trabajos para las actrices. Mar¨ªa Morales, de hecho, no tiene a¨²n ning¨²n otro proyecto. El viaje contin¨²a: ¡°Esto va para largo. Como un tren siberiano¡±.