El Tribunal Constitucional mantiene el veto al ¡®fracking¡¯ en Catalu?a
Tambi¨¦n La Rioja, Cantabria, Navarra y Andaluc¨ªa han legislado contra esta pr¨¢ctica
Falta la sentencia definitiva, pero de momento la Generalitat ha logrado que el Tribunal Constitucional (TC) levante la suspensi¨®n cautelar a sus cambios normativos que imped¨ªan, a la pr¨¢ctica, utilizar la fractura hidr¨¢ulica para buscar hidrocarburos en el subsuelo catal¨¢n. El alto tribunal congel¨® la norma en noviembre y ahora asume las explicaciones de una abogada de la Generalitat, quien argument¨® en sus alegaciones que el precepto denunciado por el Gobierno central ¡°no establece una prohibici¨®n general del fracking¡±, seg¨²n se?ala el auto del TC. Tambi¨¦n defiende el Gobierno catal¨¢n que su planteamiento es similar al de la legislaci¨®n b¨¢sica.
Esos planteamientos van en contra de lo expresado por la Generalitat y no acaban de convencer a los abogados del Estado. Seg¨²n consta en el auto aprobado por el pleno del Constitucional, estos desconf¨ªan de ese argumento de la Administraci¨®n auton¨®mica, al considerar que el art¨ªculo ¡°pretende disfrazar¡± una ¡°prohibici¨®n total y absoluta¡± a trav¨¦s de una ¡°perversa redacci¨®n¡±.
El art¨ªculo pol¨¦mico es el 167.1 de la Ley de Urbanismo, aprobado por el parlamento en enero del pasado a?o, en virtud de un acuerdo entre CiU y ERC. En ¨¦l, el Departamento de Empresa incluy¨® el siguiente texto: ¡°En la explotaci¨®n de recursos naturales en suelo no urbanizable, en el caso de aprovechamiento de hidrocarburos, no est¨¢ permitida la utilizaci¨®n de la tecnolog¨ªa de la fractura hidr¨¢ulica cuando pueda tener efectos negativos sobre las caracter¨ªsticas geol¨®gicas, ambientales, paisaj¨ªsticas o socioecon¨®micas de la zona, o en relaci¨®n con otros ¨¢mbitos competenciales de la Generalitat¡±. El Gobierno catal¨¢n evitaba entrar en materia energ¨¦tica, del Estado, y se encomendaba a sus competencias urban¨ªsticas para prohibir el uso del fracking.
Su actuaci¨®n iba en la l¨ªnea de un informe en el que llegaba a la conclusi¨®n que, por las caracter¨ªsticas geol¨®gicas del subsuelo catal¨¢n, en Catalu?a no ser¨ªa rentable utilizar la fractura hidr¨¢ulica, un pol¨¦mico procedimiento basado en la inyecci¨®n a presi¨®n de agua y productos qu¨ªmicos para deshacer la roca y lograr liberar gas. Adem¨¢s, el informe subrayaba ¡°los costes sociales¡± que supon¨ªa permitir esa pr¨¢ctica, que ha suscitado el nacimiento de plataformas opositoras, adem¨¢s de los potenciales municipios afectados.
La Generalitat ha recibido diversas peticiones de empresas en los ¨²ltimos para efectuar prospecciones en diferentes zonas de Catalu?a para intentar determinar si con el fracking se pod¨ªa extraer gas o petr¨®leo. La realidad, no obstante, es que todas esas peticiones han caducado sin que los interesados iniciales mantuvieran un inter¨¦s en continuarlas.
Existe un mayor temor por lo que pueda suceder en los cuatro proyectos que el Ministerio de Industria mantiene activos en zonas lim¨ªtrofas entre Catalu?a y Arag¨®n: Perseo, Prometeo, Atlas y Helios. Vivo el art¨ªculo 167.1, el Ejecutivo auton¨®mico podr¨ªa vetarlo.
El TC se ha pronunciado sobre el fondo del asunto en las normativas de Cantabria y de La Rioja que prohib¨ªan el uso del fracking en sus territorios y en ambos casos las declar¨® inconstitucionales con el argumento de que la ordenaci¨®n del sector energ¨¦tico y del subsector gas¨ªstico es una competencia exclusiva del Estado. Adem¨¢s de Catalu?a, La Rioja y Cantabria, las comunidades de Navarra y Andaluc¨ªa han legislado contra esta pr¨¢ctica.
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