Nada
Nos quedamos sin saber c¨®mo se pasa del 'business plan' al 'business' clan
Nada. Exactamente eso fue lo que pas¨® en la sesi¨®n de este lunes. Nada de nada. El primer compareciente, Ricard Puignou, no habl¨® pero bebi¨® mucha agua. El se?or Ricard Puignou es consejero delegado de Certio, una empresa que act¨²a en el ¨¢mbito de las ITV, y est¨¢ imputado por cohecho en la trama que afecta a Oriol Pujol, el ex secretario general de CDC e hijo del ex presidente de la Generalitat (de un tiempo a esta parte, todo en la pol¨ªtica catalana empieza por ex). El se?or Puignou manifest¨® su voluntad de acogerse al derecho de no declarar, se cruz¨® de brazos y, sin volver a decir ni piii? (por expresarlo en t¨¦rminos de automoci¨®n), escuch¨® aparentemente las preguntas de los portavoces de los siete grupos parlamentarios (ERC, PSC, PPC, ICV-EUiA, C's, CUP y CiU, en este orden). A medida que se suced¨ªan en vano las intervenciones de los diputados, el se?or Puignou iba pensando ¡°ommm¡± y de tal modo se le iba poniendo cara de ¡°ommm¡±. Ni un rictus, ni un tic, ni un temblor de p¨¢rpados. Nada. Absolutamente nada de nada. Cuando los portavoces de los partidos ven que no van a obtener respuesta, aprovechan para monologar, echarle bronca al compareciente y, seg¨²n su poder en la tierra, hasta ponerle de vuelta y media. Es uno de los est¨¦riles mecanismos que se han creado en esta comisi¨®n de investigaci¨®n sobre la corrupci¨®n, la cual est¨¢ resultando dedicarse bien poco a la investigaci¨®n (en consonancia con el resto de la ciencia espa?ola).
El se?or Puignou guard¨® durante toda su comparecencia un silencio ol¨ªmpico. Contemplar en el Parlament a los representantes del pueblo pregunt¨¢ndole in¨²tilmente a un empresario supuestamente corrupto, sin que ni una de sus cuestiones parezca rozarle los o¨ªdos, es como ir a votar y que las papeletas caigan una y otra vez in¨²tilmente fuera de la urna. El caso es que el compareciente dej¨® la sala sin decir nada. As¨ª que nada de nada.
Como el se?or Xavier Pujol, consejero delegado de Ficosa, no est¨¢ imputado por nada de nada, se avino de buen grado a contestar a todas las preguntas. Ficosa es la empresa de componentes mec¨¢nicos y electr¨®nicos para el autom¨®vil, que, en un proceso de deslocalizaci¨®n, compr¨® la planta de Sony en Viladecavalls. Se la ha vinculado tambi¨¦n a las ITV y al pago de comisiones. El se?or Xavier Pujol (?qu¨¦ dif¨ªcil hoy d¨ªa es no llamarse Pujol!) se mostr¨® ante la comisi¨®n como un empresario de ¨¦xito, brillante, simp¨¢tico, elocuente y locuaz. Ven¨ªa contento y hablaba de billones de euros, cont¨® con pelos y se?ales la operaci¨®n de Sony, invit¨® a los diputados a visitar su flamante factor¨ªa, les trat¨® de t¨² a todos y en un par de ocasiones se refiri¨® a s¨ª mismo en tercera persona. Y en eso consistieron su dos horas largas de declaraci¨®n, en explicar lo bien que la iba en la vida y dejar claro lo beneficioso de su empresa para el pa¨ªs. Respecto al asunto que le tra¨ªa a la comisi¨®n, nadie dijo nada, de modo que nos quedamos sin saber c¨®mo se pasa del business plan al business clan. Nada de nada o casi.
El se?or Xavier Pujol? se mostr¨® ante la comisi¨®n como un empresario de ¨¦xito, brillante, simp¨¢tico, elocuente y locuaz
S¨ª que hubo algo parecido a un robado posado cuando el portavoz socialista le pregunt¨® si pagaba todos sus impuestos en Espa?a y el se?or Xavier Pujol anunci¨® a bombo y platillo que no hab¨ªa ning¨²n acreedor suyo que se hubiera quedado sin cobrar. Intent¨® ir m¨¢s lejos el diputado ecosocialista y relacion¨® las ITV y las certificaciones energ¨¦ticas de edificios obligatorias con el pago de favores a Ficoasa, pero se cans¨® por el camino y al final decidi¨® no proseguir. Quien apret¨® el acelerador fue la portavoz de la Candidatura d'Unitat Popular, pero se sali¨® en la doble curva que lleva de la ideolog¨ªa al moralismo. Lo que tampoco conduce a nada. Una vez el empresario hubo abandonado la sala, se les ocurri¨® a unos diputados en corrillo una gran variedad de preguntas que no hab¨ªan formulado antes, al menos de esa manera. (Se conoce que era demasiado poderoso como para hacerle cierto tipo de preguntas.)
El tercer compareciente anunci¨® solemnemente que, al estar imputado, no iba a decir nada de nada, y sin embargo luego no par¨® de hablar. Las preguntas f¨¢ciles las contestaba enteras, las semif¨¢ciles a medias y en las comprometidas se acog¨ªa a su derecho a no declarar. Y entre pista y pista, denunciaba que estaba siendo v¨ªctima de un juicio paralelo, raz¨®n que los diputados refutaron. Se trataba del se?or Xavier Corominas, arquitecto y urbanista de l'Hospitalet del Llobregat, al que se relaciona con la trama del 3% en que andan envueltos el exsuegro y la exmujer de Jordi Pujol Ferrusola. Lo m¨¢s llamativo de su comparecencia era su extraordinario parecido f¨ªsico con el escritor Ray Bradbury. Lo cual tampoco significa nada. Pero ya es mucho para una ¨¦poca tan jodida.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.