La estaci¨®n de Manzaneda acumula p¨¦rdidas pese a los rescates p¨²blicos

A pesar de los rescates e inversiones millonarias que se suceden peri¨®dicamente desde finales de los ochenta, la ¨²nica estaci¨®n de monta?a de Galicia sigue encallada en las p¨¦rdidas. Un cuarto de siglo despu¨¦s de su primera gran crisis y de la entrada de capital p¨²blico en el accionariado, Manzaneda a¨²n tiene una abultada deuda y serios problemas para vestir de nieve sus laderas durante los inviernos. Ni el esqu¨ª ni la diversificaci¨®n de la oferta de ocio con deportes ajenos al fr¨ªo han conseguido corregir la deriva de un proyecto que naci¨® en los a?os setenta y que, tras tres lustros, encall¨® a finales de los ochenta. Desde entonces, y salvo temporadas de grandes nevadas en los que ha vivido puntuales semanas de ¨¦xito, el proyecto levantado a m¨¢s de 1.500 metros de altitud en medio de un impresionante pinar, no consigue recomponerse.

Un primer rescate insufl¨® dinero p¨²blico en 1987 a una estaci¨®n de esqu¨ª impulsada, entre otros, por la familia Outeiri?o ¡ªeditora del grupo de medios La Regi¨®n¡ª que cre¨® Meisa (Manzaneda Estaci¨®n de Inverno, SA), una empresa que pas¨® a ser p¨²blica hace 25 a?os, tras un ag¨®nico per¨ªodo de escasez de nieve que casi acaba con ella. El ¨¦xito inicial, con miles de aficionados o equipos deportivos de primera divisi¨®n disfrutando de las instalaciones, se esfum¨® cuando los ochenta tocaban su fin. Incluso por aquel entonces, las cuentas no alcanzaron beneficios hasta 1986, casi tres lustros despu¨¦s de su fundaci¨®n. La Xunta se hizo entonces con Meisa y ante la reiterada escasez de nevadas de calidad, comenz¨® a invertir para diversificar la oferta del complejo, construyendo una piscina y un polideportivo o modernizando las infraestructuras ofertadas para pr¨¢ctica del deporte blanco. La idea tampoco fragu¨®, entre otras razones, por los deficientes accesos.

Esa inyecci¨®n de dinero y la asunci¨®n de la deuda acumulada se ha sucedido por parte de la Xunta, la Diputaci¨®n de Ourense y los Ayuntamiento de Trives y Manzaneda a?o tras a?o, con los n¨²meros marcados en rojo de forma permanente. El ¨²ltimo gran rescate se produjo en 2012, cuando Meisa volvi¨® a rozar el cierre tras acumular en un solo a?o 746.000 euros de p¨¦rdidas y reducir su cifra de negocio a la mitad. Y no eran las ¨²nicas: en casi tres lustros de gesti¨®n p¨²blica hab¨ªa perdido m¨¢s de siete millones. Aquel a?o, el grupo empresarial pontevedr¨¦s Mas Costas acept¨® entrar como socio de Meisa para relanzar, otra vez, la estaci¨®n de monta?a como un complejo multiusos. La Xunta anunci¨® una inversi¨®n de siete millones que, hasta ahora, se ha materializado parcialmente y que, tras tres a?os, deja un saldo positivo para la empresa hotelera. No pag¨® nada por el 37% de acciones que hered¨® de las cajas de ahorro fusionadas y que ahora han sido parcialmente recompradas a precio de mercado por la Diputaci¨®n de Ourense, que acaba de retornar a Meisa tras ocho a?os fuera. La extinta entidad bancaria abandon¨® el accionariado en 2012 sin afrontar su parte de la deuda, pero concedi¨® a la empresa un ventajoso cr¨¦dito de 3,5 millones.

Y es que la llegada de Mas Costas al accionariado tampoco ha equilibrado las cuentas. Manzaneda sigue perdiendo dinero: 741.000 euros en 2014. A pesar de que el resultado de explotaci¨®n se volvi¨® positivo y creci¨® en un 250% respecto a 2013, la estaci¨®n sigue sin cuajar debido al abultado lastre que acumula. La empresa hotelera que no pag¨® nada por las acciones, tampoco pondr¨¢ este a?o dinero para sufragar esa deuda. Ser¨¢n, otra vez, Xunta, Diputaci¨®n y Ayuntamientos de Trives y Manzaneda quienes asuman ¨ªntegramente los 675.000 euros que es necesario inyectar en Meisa para evitar la disoluci¨®n. Esos deficientes n¨²meros y las discrepancias internas con las ideas propuestas para volverlos a verde incluso provocaron, hace cinco meses, la dimisi¨®n de Arturo Rodr¨ªguez, director de la estaci¨®n y subdirector general de la divisi¨®n hotelera de Mas Costas.

La ¨²ltima esperanza pasa por otro voluminoso proyecto que la Administraci¨®n gallega estuvo a punto de aprobar hace unos d¨ªas pero que ha quedado aparcado a la espera de informes t¨¦cnicos. Si la nieve no va a la monta?a, Xunta, Diputaci¨®n y Mas Costas llevar¨¢n all¨ª nieve artificial con nueve millones. Las obras para instalar un complejo sistema de innivaci¨®n comenzar¨¢n en 2016 y permitir¨¢n cubrir de blanco las pistas de esqu¨ª, al menos, 120 d¨ªas al a?o. Ser¨¢ necesario construir una enorme balsa de agua de 50.000 metros c¨²bicos y un complejo sistema de tuber¨ªas y ca?ones para regarlo todo cuando no llueva. Esa complejidad y la Red Natura que protege el terreno requieren de un permiso medioambiental especial que todav¨ªa tramita la Conseller¨ªa de Medio Ambiente, que hace una d¨¦cada ya rechaz¨® un proyecto similar.