Uber se desmarca de la econom¨ªa colaborativa en su primer juicio

Atr¨¢s quedaron los d¨ªas en los que Uber defend¨ªa en Espa?a que se mov¨ªa en las aguas de la econom¨ªa colaborativa, que sus usuarios carec¨ªan de ¨¢nimo de lucro y que ejerc¨ªan de ch¨®feres para compartir gastos. Ante el Juzgado de lo Mercantil N? 3 de Barcelona, donde se ha enfrentado este jueves a su primer proceso judicial en Espa?a, estos argumentos han brillado por su ausencia. La defensa ha optado por definir a su cliente como una "empresa de servicios de la sociedad de la informaci¨®n" radicada en Holanda que ejerce de "intermediadora" entre conductores y pasajeros a trav¨¦s de una aplicaci¨®n para m¨®vil, con "el apoyo" de su filial espa?ola, Uber Systems Spain.?

Esta ¨²ltima es el objeto de la demanda de la Asociaci¨®n Profesional ?lite Taxi, que le acusa de ser una "cooperadora necesaria" de una actividad que cae en la "competencia desleal y el abuso de posici¨®n", seg¨²n ha explicado antes del juicio el abogado de ?lite, Diego Salmer¨®n. "Los conductores de Uber no tienen licencia para transportar pasajeros y la compa?¨ªa no paga ning¨²n impuesto. Adem¨¢s, la firma se posiciona de manera fraudulenta en el mercado, propiciando que el consumo vaya hacia su lado", ha denunciado.

Un pensionista, un cocinero y un reci¨¦n estrenado taxista que llevaba m¨¢s de dos a?os en el paro han declarado ante el juez como antiguos ch¨®feres de Uber. Los tres llevan a sus espaldas multas de al menos 4.000 euros por transportar viajeros sin contar con el permiso necesario. Han declarado que su ¨²nico contacto f¨ªsico con la empresa fue la reuni¨®n inicial en la que recibieron una lista de instrucciones sobre c¨®mo realizar el servicio y un tel¨¦fono m¨®vil en el que solo funcionaba la aplicaci¨®n de UberPop, la modalidad con la que la multinacional se introdujo en Barcelona en abril de 2014. Con esta misma se extendi¨® a Madrid y Valencia hasta que el Juzgado de lo Mercantil N? 2 de Madrid orden¨® el pasado mes de diciembre el cese cautelar de sus actividades en todo el Estado a ra¨ªz de otra demanda interpuesta por la Asociaci¨®n Madrile?a del Taxi (ATM) .

Los testigos han negado que la empresa les exigiera estar conectados a la aplicaci¨®n. Han afirmado que pod¨ªan rechazar los viajes que les ofrec¨ªan y que la empresa les aseguraba que si ten¨ªan problemas con la polic¨ªa, ella se har¨ªa cargo. "Yo hice el mes gracias a los incentivos porque con las carreras eran un perjuicio total", ha a?adido el pensionista. La acusaci¨®n ha se?alado esta pol¨ªtica de incentivos como una forma de "marcar la cuota" de los ch¨®feres y a la provisi¨®n de m¨®viles como "la disposici¨®n de herramientas de trabajo".

Los abogados de ?lite han afirmado que seg¨²n estos hechos y un informe de la Inspecci¨®n de Trabajo presentado al juez, la relaci¨®n laboral de Uber y los conductores "queda acreditada" y han recordado que "no es necesario firmar contratos" para que esta exista.?

El letrado de Uber ha mostrado su "sorpresa" ante las acusaciones de ?lite: "De lo ¨²nico que se habla es de la aplicaci¨®n. ?De verdad puede transportar gente una app?" La defensa ha insistido en la calidad de "intermediador" de su cliente: "No es m¨¢s que el tradicional corretaje, pero con el avance que es la tecnolog¨ªa. Se pone en contacto a dos iguales".

El abogado de Uber ha a?adido que si ?lite "entiende que hay competencia desleal porque alguien transporta viajeros sin tener licencia, son los conductores los que deber¨ªan estar aqu¨ª", tras recordar el testimonio de dos guardias urbanos, que han asegurado que las denuncias que pusieron cuando intervinieron ch¨®feres de Uber iban contra estos y no la empresa. Aunque omiti¨® mencionar que el Departamento de Territorio y Sostenibilidad abri¨® a la compa?¨ªa un expediente sancionador por cada usuario denunciado.

"Una app no compra 400 m¨®viles para repartirlos entre sus usuarios ni da formaci¨®n o charlas informativas. La realidad es que ha estado contratando a personas necesitadas en condiciones precarias", ha zanjado Salmer¨®n, entre el centenar de taxistas que protestaba a las puertas de la Ciudad de la Justicia, algunos de ellos venidos desde Madrid, Valencia, Bilbao y Gij¨®n.

Al no recurrir a su argumento de formar parte de la econom¨ªa colaborativa, Uber tambi¨¦n ha dejado de lado el del vac¨ªo legal en el que esta opera. "En la intermediaci¨®n electr¨®nica no hay ninguna laguna legal. Est¨¢ muy regulado en Europa", ha dicho su abogado, que ha pedido al juez que haga una consulta a Europa sobre el caso antes de determinar su veredicto. El magistrado ha respondido que lo meditar¨¢ y que tendr¨¢ una respuesta para despu¨¦s de la fiesta de San Juan.