El esgrimista batido en duelo con Duran

¡°Hay que saber combinar la fuerza con el equilibrio, capacidad de control, saber ver llegar al adversario y esperar el momento oportuno¡±. El democristiano no habla de pol¨ªtica, sino de esgrima, deporte que practic¨® de los 9 a los 22 a?os (fue subcampe¨®n de Catalu?a y de Espa?a) y que dej¨® para centrarse en ESADE, donde se licenci¨® en Direcci¨®n y Administraci¨®n de Empresas e hizo un m¨¢ster. En su trayectoria pol¨ªtica, ha hecho gala de sus dotes de esgrimista: en 1997 ingres¨® en la direcci¨®n de Uni¨® como dirigente de las juventudes y dio una peque?a estocada a Duran, al plantear una candidatura alternativa a la direcci¨®n para pedir m¨¢s apertura al partido. El ¨²ltimo golpe de florete ya han dejado a Duran tocado.

¡°Estoy en Uni¨® porque no conozco a una persona m¨¢s soberanista que Carrasco i Formiguera, uno de los fundadores del partido¡±, dec¨ªa Castell¨¤ en 2000, un a?o despu¨¦s de estrenar su cargo de diputado en el Parlament. Tras unos a?os en la empresa industrial Krupp, salt¨® a la pol¨ªtica profesional primero de la mano del consejero Ignasi Farreras en cuyo gabinete estuvo un a?o (de 1998 a 1999). Luego ya gan¨® el esca?o. Al dejar la rama juvenil del partido, ocup¨® varios cargos de confianza de Duran: fue secretario de Organizaci¨®n hasta 2010 y vicepresidente ejecutivo de Uni¨® hasta 2012. Combinaba la pol¨ªtica con la condici¨®n de profesor asociado de ESADE, pero tuvo que dejar las clases meses despu¨¦s de asumir la secretaria general de Universidades a la que accedi¨® con el primer Gobierno de Mas. Es habitual verle ir a su trabajo en los Ferrocarriles de la Generalitat.

En 2012 el sector independentista del partido plante¨® un ¨®rdago a Duran para tumbarle de la direcci¨®n, con una candidatura encabezada por el entonces alcalde de Vic, Josep Maria Vila d'Abadal. Castell¨¤ no se sum¨® a su lista y, junto a otros dirigentes j¨®venes y soberanistas (como Tit¨®n La?lla, diputada en el Parlament, o Pep Martorell, director general de Investigaci¨®n), apost¨® por quedarse con Duran e impulsar una enmienda para incluir la demanda de un ¡°Estado propio¡± en los Estatutos. ¡°Le pusimos una condici¨®n: que el d¨ªa siguiente fuera evidente que en la direcci¨®n de Uni¨® hab¨ªa independentistas. Pero no fue as¨ª¡±, lamenta.

Desde ese d¨ªa, empez¨® a fraguarse una rebeli¨®n que ha fructificado ahora. Amante del Liceu y de las tradiciones ¡ªes miembro de los Castellers de Vilafranca aunque hace dos a?os que su trabajo le impide ir a la colla y m¨¢s de una vez ha portado el drag¨®n de Sant Quint¨ª de Mediona, que pesa m¨¢s de 100 kilos¡ª, Castell¨¤ supo como buen esgrimista aguardar su momento.

Y la estocada ha sido de ¨®rdago. Pero a¨²n le queda un reto: que el sector soberanista que encabeza ¡ªrechaza el calificativo de ¡°cr¨ªtico¡± porque su tesis la respalda la mitad de su grupo¡ª se haga con el control del partido y vire la situaci¨®n de Uni¨®. El reto, en un partido controlado con mano f¨¦rrea por Duran, es may¨²sculo, pero ¨¦l ya dio pistas cuando, en 2009, le preguntaron en el Parlament por una frase que le representara: ¡°Nada es imposible¡±.