?Es xen¨®fobo?

Queda fatal definirse como una persona xen¨®foba, es de otro siglo ser racista. Pero... ?depende? ?Qu¨¦ grado de tolerancia se tiene respecto a las personas extranjeras y cuando se empieza a creer en los prejuicios? La psicolog¨ªa responde que var¨ªa seg¨²n la cercan¨ªa de la situaci¨®n, de lo que afecte, de lo que suponga. "Afortunadamente el ser humano ha evolucionado a querer ser lo m¨¢s pol¨ªticamente correcto, pero solo mientras se pueda. Las posiciones pueden cambiar en el momento en el que se ven amenazados o perjudicados por la persona extranjera, ah¨ª es cuando salta la asunci¨®n del rumor como creencia", describe Manuel Mart¨ªnez, catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa Social de la Universidad de Sevilla y redactor del Manual de ayuda para deconstruir rumores que forma parte?la red Anti-rumores que la Consejer¨ªa de Justicia de Andaluc¨ªa ha lanzado para desmontar, evitar, rebatir y erradicar los prejuicios vertidos contra la poblaci¨®n migrante.

Los rumores son frases f¨¢ciles de decir, pero dif¨ªciles de demostrar y experimentar, en cambio, pueden derivar en actitudes desvirtuadas o desproporcionadas. Albert Einstein mencion¨®: ¡°Triste ¨¦poca la nuestra. Es m¨¢s f¨¢cil desintegrar un ¨¢tomo que superar un prejuicio". "Los 'moros' traen problemas porque son terroristas, las mujeres que tienen una relaci¨®n con un hombre nacional lo hacen por inter¨¦s, los inmigrantes quitan el trabajo, son delicuentes, no se integran, no se adaptan, abusan de los servicios sociales"... son algunos de los estereotipos recogidos por la red como destacados contra esta poblaci¨®n.

Los escenarios son f¨¢ciles de visualizar. En un ejercicio de imaginaci¨®n solo hay que intentar sentir muy de cerca a un familiar cas¨¢ndose con una persona subsahariana, a un latinoamericano optando al mismo puesto de trabajo, a un marroqu¨ª que ha llegado antes a urgencias, a un asi¨¢tico abriendo un negocio que hace la competencia... "Se ve claro en la pel¨ªcula Adivina qui¨¦n viene esta noche, el que no es racista de verdad, solo tendr¨¢ un momento de autocr¨ªtica y lo aceptar¨¢ con naturalidad, pero el que lo es, buscar¨¢ justificaciones para mantener la actitud prejuiciosa",? ilustra Mart¨ªnez.?

?Es xen¨®fobo?

La tarea de la red Anti-rumores, que incluye a miembros de cerca de 40 organizaciones entre asociaciones sociales y culturales, ONG, sindicatos, fundaciones, expertos y voluntarios, ser¨¢ dotar de argumentos s¨®lidos y objetivos los datos definitivos para eliminar infundios. Algunos ejemplos de su trabajo de prueba se leen en la Gu¨ªa para deconstruir rumores, trabajada por profesores y miembros de la red para que sirva de modelo de c¨®mo rebatir supuestos infundados en la sociedad y que ser¨¢ la l¨ªnea a seguir. Como muestra se aclaran los siguientes supuestos: "Han cogido a una banda de rumanos albano-kosovares. Eso es absurdo. O son rumanos o albano-kosovares. Es como si dices: han cogido a una banda de espa?oles colombianos" o tambi¨¦n; "Las polacas que vinieron a recoger fresas se han quedado con los hombres de Lepe. ?Qu¨¦ exageraci¨®n! Es verdad que hay unas decenas de parejas mixtas con mujeres del Este. De varios miles de mujeres que han estado viniendo en los ¨²ltimos a?os, se han formado varias parejas ?qu¨¦ tiene eso de extra?o?", se lee en la gu¨ªa.

La primera fase del proyecto, que comenz¨® el pasado marzo, consisti¨® en poner en contacto a especialistas, profesionales, profesores y expertos vinculados con cuestiones migratorias en Andaluc¨ªa o que est¨¢n relacionados con personas migrantes por su profesi¨®n. Y han comenzado a trabajar observando tambi¨¦n iniciativas similares a las de Barcelona, Pa¨ªs Vasco u otras regiones europeas. "Se han catalogado cuatro tipos de agentes anti-rumores, que es como se les llama a las personas que est¨¢n formadas para tener argumentos que den respuesta a los prejuicios. De momento est¨¢n los mediadores, los comunicadores, los miembros de las organizaciones y los expertos", detalla Jos¨¦ Castillo, director de Xul, entidad que gestiona el proyecto. "Con la informaci¨®n que se genere, cualquier persona podr¨¢ rebatir los rumores y convertirse en agente anti-rumores. Hay grandes posibilidades de cambio", a?ade Castillo. Mediante seminarios, acciones, campa?as, audiovisuales, encuestas, una gu¨ªa y un manual, la informaci¨®n se va difundiendo paulatinamente entre la sociedad.

"Es una estrategia basada en crear agentes antibulos, que identifiquen malentendidos o declaraciones interesadas que afecten de forma negativa a la poblaci¨®n migrante que vive en Andaluc¨ªa, m¨¢xime en este periodo socioecon¨®mico", detalla Javier Vargas, director general de Pol¨ªticas Migratorias de la Junta. "Tenemos que evitar situaciones de ruptura de cohesi¨®n social y desmontar objetivamente la red de infundios que se dan en la sociedad", a?ade Vargas, que como ejemplo apunta a que apenas un 0,6% del gasto sanitario andaluz se invierte en la poblaci¨®n inmigrante.

Uno de los objetivos es conseguir una fuerte presencia en Internet, desde donde se trabajar¨¢ para denunciar el contenido xen¨®fobo o discriminatorio, informarse y potenciar la empat¨ªa hacia la poblaci¨®n inmigrante. A trav¨¦s de los perfiles de Facebook y Twitter se podr¨¢ participar en generar contenido relacionado con esta cuesti¨®n, que forma parte de la l¨ªnea de trabajo del III Plan Integral para la Inmigraci¨®n de Andaluc¨ªa Horizonte 2016, que contar¨¢ el pr¨®ximo a?o con una dotaci¨®n inicial de 1.257 millones de euros de fondos europeos y andaluces.

La red ser¨¢ previsiblemente una plataforma para erradicar rumores, pero Mart¨ªnez propone adem¨¢s para disminuir esta amenaza, crear condiciones para que se de un contacto positivo entre los migrantes y los "aut¨®ctonos". Acercarnos entre todos. "Hay que proveer informaci¨®n precisa sobre las personas migradas y los efectos positivos de las migraciones en la comunidad. Si logramos una relaci¨®n de interdependencia entre personas aut¨®ctonas y al¨®ctonas, frenaremos los rumores falsos, disminuir¨¢n los prejuicios y mejorar¨¢n las relaciones intergrupales", se lee en el manual. El conocimiento rompe los miedos.