Catedrales vivas

Est¨¢n mucho m¨¢s cerca de nosotros de lo que podamos pensar. Este a?o la Comunidad de Madrid catalog¨® 284 ¨¢rboles singulares, una categor¨ªa que engloba a aquellos ejemplares que entran en una concreta defginici¨®n: ¡°Por su rareza, excelencia de porte, edad, tama?o, significaci¨®n hist¨®rica, cultural o cient¨ªfica, constituyen un patrimonio merecedor de especial protecci¨®n por parte de la Administraci¨®n¡±, dice el art¨ªculo 7.2 de la Ley 2/1991.

?¡°Muchos de estos ¨¢rboles son m¨¢s viejos que las catedrales m¨¢s antiguas de nuestro territorio. Han sido conservados y protegidos por nuestros antepasados por diferentes motivos. Es nuestra obligaci¨®n conservarlos y mantenerlos para las generaciones futuras¡±, explica Susana Dom¨ªnguez, presidenta de Bosques sin fronteras. Esta ingeniera forestal y de montes realiza un gran trabajo mediante publicaciones, gu¨ªas y programas de viajes como el llamado Abraza tus arboles. ¡°Intentamos transmitir el conocimiento y el respeto hacia los ¨¢rboles visitando a estos individuos excepcionales¡±, razona.

Existe, adem¨¢s, una gran tradici¨®n de naturalistas que desde el siglo XVI ¡ªcon la creaci¨®n por parte de Andr¨¦s Laguna de Segovia del jard¨ªn bot¨¢nico de Aranjuez¡ª han venido conservando y documentando este tipo de ¨¢rboles. Igualmente, hay asociaciones y ciudadanos que tambi¨¦n han colaborado en su cuidado. Un ejemplo es el Almez de la Arganzuela, que sobrevivi¨® a las obras de la M-30 gracias a la intervenci¨®n vecinal.

Otros individuos han desaparecido debido a su vejez o a enfermedades como la grafiosis, que afecta a un gran n¨²mero de olmos en la actualidad, muy valorados por su porte y antig¨¹edad. ¡°Estos ejemplares eran muy queridos por la gente del lugar. En muchos casos ocupaban las plazas de los pueblos. As¨ª fueron los olmos catalogados de Rascafr¨ªa y de Cubas de la Sagra¡±, precisa Ismael P¨¦rez, trabajador de la Consejer¨ªa de Medio Ambiente.

¡°Los ¨¢rboles singulares requieren una conservaci¨®n espec¨ªfica. Si hay un ¨¢rbol que le est¨¢ dando sombra a un singular habr¨ªa que podarlo para que no da?e al que est¨¢ protegido¡±, aclara Mariano S¨¢nchez, conservador del Real Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid. ¡°En los 25 a?os que llevo ocup¨¢ndome del jard¨ªn hemos perdido a un madro?o por grafiosis y a un almez por vejez¡±.

Aunque es necesario incidir en los pocos medios que se destinan a su atenci¨®n y preservaci¨®n. ¡°Hay muy pocas Comunidades Aut¨®nomas que tengan personal dedicado al cuidado de los ¨¢rboles, ni siquiera un m¨ªnimo presupuesto asignado al mantenimiento del cat¨¢logo. En general, es lamentable que se dediquen tan pocos recursos a estos individuos ¨²nicos e irrepetibles¡±, asegura la presidenta de Bosques sin Fronteras que afirma quedDesde la Consejer¨ªa de Medio Ambiente se han puesto las pilas en estos ¨²ltimos a?os y han comenzado a se?alar mediante mojones y carteles informativos la mayor¨ªa de ¨¢rboles singulares. ¡°El objetivo es doble¡±, se?ala P¨¦rez, ¡°por un lado informativo para que sean conocidos por la poblaci¨®n y por otro lado de protecci¨®n para que no se vean afectados por actuaciones negativas como obras, vertidos o desastres naturales¡±.

Por ejemplo dos ¨¢rboles del Jard¨ªn del Pr¨ªncipe catalogados como "singulares" se encuentran entre los m¨¢s de 200 abatidos por la tormenta en los jardines de Patrimonio Nacional de Aranjuez, seg¨²n han confirmado hoy t¨¦cnicos de Patrimonio: un pino pi?onero situado en la zona denominada Parque de Miraflores, dentro del per¨ªmetro al que no tiene acceso el p¨²blico; y un cipr¨¦s ubicado en el denominado hex¨¢gono norte de la Casita del Labrador.

Por este motivo es necesario valorar aquellos que a¨²n se conservan y pueden visitarse. Dom¨ªnguez destaca ¡°el pino de la cadena por su bonita historia, la olma de Guadarrama por su tama?o y escasez de ejemplares, los pl¨¢tanos y cipreses calvos de los jardines de Aranjuez por su historia y la encina de Ambite por su edad y tama?o¡±.

A lo que habr¨ªa que a?adir, alguno m¨¢s: el tejo de Barondillo, el ejemplar m¨¢s viejo de la pen¨ªnsula ib¨¦rica y que se acerca a los 1300 a?os; la secuoya gigante de la Casita del Pr¨ªncipe, en San Lorenzo de El Escorial, con 41 metros de altura; y el ahuehuete del Retiro. Se cuenta que en la guerra de la Independencia las tropas francesas instalaron una pieza de artiller¨ªa entre sus ramas.