Un imputado exime a Orozco y se?ala a Besteiro en el caso ¡®Gara?¨®n¡¯

El presunto objetivo era burlar la reforma de la LOUGA (Lei de Ordenaci¨®n Urban¨ªstica de Galicia), que entraba en vigor d¨ªa de A?o Nuevo de 2006, para ganar una edificabilidad que la nueva normativa obligar¨ªa a reducir de forma considerable, y que posiblemente afectar¨ªa a varios miles de metros cuadrados. El abogado del promotor de las pol¨¦micas torres de O Gara?¨®n, moles de viviendas a pie del coraz¨®n verde de Lugo, el parque Rosal¨ªa de Castro, investigado en este caso en el que tambi¨¦n est¨¢n imputados Jos¨¦ Ram¨®n G¨®mez Besteiro, l¨ªder de los socialistas gallegos, y Xos¨¦ L¨®pez Orozco, exalcalde de Lugo, ha prestado declaraci¨®n esta ma?ana ante la juez Pilar de Lara. Y a lo largo de m¨¢s de hora y media, seg¨²n fuentes relacionadas con la investigaci¨®n, ha eximido al exregidor del PSdeG y ha responsabilizado a Besteiro de negociar personalmente con ¨¦l un convenio urban¨ªstico que beneficiaba al promotor, Ricardo Iglesias, igualmente imputado.

El letrado de Iglesias, Javier Calvo, ha reconocido que ¨¦l mantuvo a solas dos reuniones con Besteiro para negociar la elaboraci¨®n del PERI (Plan Especial de Reforma Interior) y el convenio de la promotora con el Ayuntamiento, y que adem¨¢s recibi¨® varios correos electr¨®nicos del socialista que ya no conserva. Seg¨²n esta versi¨®n de los hechos, el pol¨ªtico, entonces concejal de Urbanismo en Lugo, le dio supuestamente una serie de directrices y le encomend¨® redactar el borrador del convenio por el que la empresa deber¨ªa ser indemnizada si el Ayuntamiento no sacaba adelante el plan antes del 1 de enero de 2006. La tramitaci¨®n avanz¨® r¨¢pidamente a finales de 2005 con la aprobaci¨®n de ambos documentos y el ¨²ltimo requisito se aprob¨® en una intempestiva sesi¨®n extraordinaria de la junta de Gobierno: O Gara?¨®n recibi¨® la bendici¨®n municipal el d¨ªa de Fin de A?o, que adem¨¢s ca¨ªa en s¨¢bado y no se trabajaba en el consistorio.

Los investigadores creen que el promotor, en 2004, compr¨® los terrenos de la unidad de actuaci¨®n CS5 (m¨¢s conocida como Gara?¨®n por el nombre que ten¨ªa la finca) a sus propietarios de antes despu¨¦s de consultar con Besteiro acerca de la edificabilidad. El plan presentado por el due?o anterior, aprobado en 2003, abr¨ªa la mano generosamente a favor de la empresa, pero, seg¨²n se sospecha, un a?o m¨¢s tarde el socialista le advirti¨® a Ricardo Iglesias de que ya no se le iba a permitir la misma superficie de viviendas. A pesar de todo, seg¨²n las mismas fuentes, el promotor compr¨®, aunque, para no hacerlo a ciegas, pact¨® unas condiciones. Y para ello mand¨® por delante a su asesor legal, Javier Calvo, que, seg¨²n ha confirmado hoy, se reuni¨® a solas con Besteiro.

Seg¨²n su declaraci¨®n, pactan que el promotor, en el nuevo PERI, cambie la ubicaci¨®n de los inmuebles y reduzca la edificabilidad (lo que se traduce en menos edificios, pero m¨¢s altos y con mejores vistas), aunque mucho menos de lo que le obligar¨ªa la ley auton¨®mica una vez que entrase en vigor. Tambi¨¦n acuerdan que el Ayuntamiento renuncie a la edificabilidad que le correspond¨ªa por ser propietario a t¨ªtulo lucrativo. Todo esto, para ganar zonas verdes, algo que, seg¨²n el abogado, Besteiro le recalca. Para evitar problemas pol¨ªticos, dice, el entonces edil quiere que el abogado justifique en los documentos que el convenio tiene como fin ganar jardines para la ciudadan¨ªa. Con estas condiciones, y con la cl¨¢usula de indemnizaci¨®n para la promotora en caso de que el proyecto no salga adelante seg¨²n lo convenido, el abogado redacta el borrador del convenio y lo presenta en el Ayuntamiento. Esta versi¨®n coincide con la de un t¨¦cnico responsable de la elaboraci¨®n de estos tr¨¢mites en el consistorio de Lugo, cuando asegur¨® este verano a la juez que, como excepci¨®n a lo acostumbrado, no hab¨ªa intervenido en la redacci¨®n, que el documento se lo entregaron hecho y que supon¨ªa que hab¨ªa corrido a cargo de los "pol¨ªticos".

La declaraci¨®n de Besteiro en calidad de imputado, prevista para finales de julio, fue suspendida sin fecha porque el juzgado no hab¨ªa recibido toda la documentaci¨®n requerida y porque el promotor se?al¨® a su propio abogado defensor como la persona que hab¨ªa negociado personalmente con Besteiro. Al aparecer este nuevo protagonista en escena, la magistrada aplaz¨® la cita a la espera de tomar declaraci¨®n al letrado. Besteiro sigue esperando para explicarse ante la juez, que todav¨ªa no lo ha citado y, previsiblemente, llamar¨¢ a declarar antes a Orozco.

De Lara imputa los delitos de prevaricaci¨®n, cohecho, contra la ordenaci¨®n del territorio y negociaciones prohibidas al secretario general de los socialistas gallegos, que por su parte insiste una y otra vez en que tiene documentos que prueban su inocencia y cree que la demora en ser llamado a declarar le est¨¢ causando un grave perjuicio. A Orozco, De Lara le atribuye los mismos delitos salvo cohecho. Seg¨²n la investigaci¨®n, G¨®mez Besteiro compr¨® al anterior due?o de O Gara?¨®n supuestamente mediante un contrato privado un piso en otra calle el 30 de diciembre de 2004, el acuerdo fue elevado a p¨²blico el 31 de mayo de 2005. Seg¨²n el juzgado, en diciembre consta que el pol¨ªtico pag¨® 36.000 euros en met¨¢lico como se?al. El resto, hasta 138.232,78 euros, se habr¨ªa abonado en cheque. Este era el precio de tasaci¨®n hipotecaria ocho a?os antes de realizarse la operaci¨®n: seg¨²n un informe pericial, el valor en el momento de la compraventa deb¨ªa ser de 170.000 euros.

Adem¨¢s, seg¨²n las pesquisas judiciales, el socialista reform¨® presuntamente este domicilio declarando en el Ayuntamiento del que formaba parte como edil de urbanismo un precio cinco veces menor del real. El sumario recoge que la licencia fue solicitada por el anterior due?o, es decir, el promotor de O Gara?¨®n que despu¨¦s vendi¨® el solar a Ricardo Iglesias, aunque el piso ya era de Besteiro. Y que fue Besteiro quien autoriz¨® con su r¨²brica la reforma. M¨¢s all¨¢ de todo esto, la juez sospecha que, en realidad, la firma encargada de llevar a cabo la obra dom¨¦stica no quiso cobrarle al pol¨ªtico, porque la factura fue emitida cinco a?os m¨¢s tarde a nombre de la esposa de Besteiro, despu¨¦s de que el empresario supiese que estaba siendo investigado por otra causa, la Operaci¨®n Carioca.?