¡®Infraestructuras cr¨ªticas¡¯: ?Qu¨¦ pasa si un d¨ªa falla todo?

?Qu¨¦ podr¨ªa ocurrir si un d¨ªa no funcionase nada, no hubiese luz, la comida se echase a perder, no se pudiera sacar dinero del cajero, ni pagar con tarjeta, ni cargar el m¨®vil...? El Centro Nacional para la Protecci¨®n de las Infraestructuras Cr¨ªticas (CNPIC) se ocupa de proteger los puntos determinantes del sistema, los que podr¨ªan instaurar el caos si fallasen. Ante la amenaza terrorista, el Ministerio del Interior ha se?alado 54 nuevos ¡°operadores cr¨ªticos¡±, empresas que dan servicios esenciales. El mapa de alto riesgo de Espa?a est¨¢ formado hoy por 93.

Una treintena de personas, ingenieros, inform¨¢ticos, qu¨ªmicos, hackers, con una media de edad de 40 a?os, y con un teniente coronel de la Guardia Civil al frente, controlan y protegen ¡ªdesde las anodinas instalaciones de unas antiguas oficinas de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico¡ª la seguridad de los puntos m¨¢s determinantes del sistema, todas aquellas infraestructuras que hacen que nuestra vida sea como es. Es decir, que cuando se apriete un interruptor se encienda la luz, o que al abrir el grifo salga agua, pero tambi¨¦n que se pueda sacar dinero de un cajero o pagar con una tarjeta en un comercio. Operaciones aparentemente sin importancia. Pero qu¨¦ pasar¨ªa si un d¨ªa no funcionase nada. Qu¨¦ pasar¨ªa si, por ejemplo, se fuese la luz de manera masiva. El Centro Nacional para la Protecci¨®n de Infraestructuras Cr¨ªticas (CNPIC), creado en 2007 y que depende directamente del Secretario de Estado de Seguridad, Francisco Mart¨ªnez, trabaja constantemente con esa clase de hip¨®tesis catastr¨®ficas para cubrir los huecos de seguridad de un sistema cada vez m¨¢s interconectado ¡ªm¨¢s all¨¢ de las fronteras espa?olas¡ª en el que cualquier disfunci¨®n podr¨ªa provocar un efecto domin¨® y hacerlo colapsar.

El establecimiento del nivel cuatro de amenaza terrorista ha llevado al Ministerio del Interior a reforzar esos planes estrat¨¦gicos de protecci¨®n. Actualmente en Espa?a hay 93 ¡°operadores cr¨ªticos¡±, o sea empresas que ofrecen servicios esenciales a la sociedad. De los que recientemente, y tras la llamada ¡°Ley PIC¡± de 2011 que regul¨® su protecci¨®n, se han designado 54 nuevos en los sectores del agua y el transporte. Previamente, en 2014, se se?alaron en el sector el¨¦ctrico, nuclear, el del gas, el petr¨®leo y en el sistema financiero. Y pr¨®ximamente le tocar¨¢ al sector alimenticio y al sanitario.

El documental American Blackout, realizado por National Geographic, ficciona ¡ªbas¨¢ndose en estudios y testimonios cient¨ªficos¡ª el caos y la devastaci¨®n que puede seguir a un apag¨®n de las dimensiones de todo Estados Unidos. Lo que inicialmente la gente se toma como una broma y graba con sus m¨®viles en la oscuridad, se convierte en un desastre progresivo que desencadena accidentes, agresividad, saqueos y, en definitiva, un estado de terror generalizado en diez d¨ªas. El impacto ¡ªse simula lo que suceder¨ªa si se tratase de un ciberataque que cortase la electricidad¡ª, se propaga en progresi¨®n geom¨¦trica, y acaba siendo similar al que podr¨ªa producir un desastre natural como un gran terremoto o un hurac¨¢n o un atentado brutal.

Uno de los principales refuerzos que ha realizado el Ministerio del Interior es precisamente en materia de prevenci¨®n de los ciberataques en las infraestructuras cr¨ªticas. ¡°El hecho de que todo funcione de manera computerizada es una ventaja por comodidad y rapidez pero incrementa ostensiblemente los riesgos del sistema¡±, reconoce Fernando S¨¢nchez, director de CNPIC. ¡°Nuestra sociedad es ahora, por ese motivo y por la dependencia de las tecnolog¨ªas, mucho m¨¢s interdependiente y menos aut¨®noma que hace d¨¦cadas¡±, reconoce.

Punto de inflexi¨®n

El punto de inflexi¨®n, de toma de conciencia de los grandes riesgos, fue el 11-S y despu¨¦s el 11-M. Hasta entonces, la protecci¨®n de las llamadas infraestructuras cr¨ªticas ¡ªen su mayor¨ªa (un 80%) empresas privadas, que prestan servicios esenciales¡ª depend¨ªa exclusivamente de sus propietarios. Pero el hecho de que fuesen las responsables de nutrir al sistema y de mantener el correcto funcionamiento de la sociedad por el tipo de servicio que prestaban, las convert¨ªa tambi¨¦n en un asunto de Estado. Por esa raz¨®n se cre¨® el CNPIC y por eso se empezaron a incluir esos ¡°operadores cr¨ªticos¡± en una lista en los planes de protecci¨®n, dando lugar a una especie de mapa de riesgos, que permanece ¡°a buen recaudo¡±.

Se trata de una colaboraci¨®n p¨²blico-privada: ¡°Por una parte las empresas incluidas en ese listado tienen que cumplimentar una serie de requisitos de seguridad porque son auditadas por Interior, y por otro lado entran en una plataforma en la que se establece su protecci¨®n prioritaria y donde comparten y tienen acceso a informaci¨®n sensible¡±, explica S¨¢nchez.

La idea es que ese mapa de alto riesgo se vaya completando progresivamente y sean cada vez m¨¢s las empresas incorporadas y mayor la protecci¨®n de esos servicios esenciales. Cuantos m¨¢s elementos incluya ese plano cr¨ªtico, m¨¢s seguro ser¨¢ el pa¨ªs al que corresponda.