El Supremo confirma la anulaci¨®n de la licencia ambiental de Iberpotash

Otra sentencia en contra de la actividad de Iberpotash en el Bages. El Tribunal Supremo ha decidido desestimar los recursos presentados por la sociedad propiedad del grupo israel¨ª ICL y de la Generalitat y confirma as¨ª una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a que anulaba la autorizaci¨®n ambiental utilizada por Iberpotash. De acuerdo a ese permiso, la compa?¨ªa minera continuaba operando y vertiendo desechos de sal en El Cogull¨®, una monumental monta?a que ha ido creciendo en paralelo a la extracci¨®n de potasa en la mina de Sallent.

La sentencia concluye la "inexistencia de licencia de actividad y funcionamiento de la escombrera o dep¨®sito salino" de El Cogull¨®, que se extiende en 50 hect¨¢reas con m¨¢s de 40 millones de toneladas. M¨¢s all¨¢ de las pruebas periciales presentadas por Iberpotash, el Tribunal Supremo considera que la documentaci¨®n aportada por el Ayuntamiento de Sallent para defender la legalidad de la escombrera "no deja lugar a duda acerca de la inexistencia del acta de comprobaci¨®n ni de acuerdo de puesta en marcha" del vertedero, que Iberpotash pretende reducir en las pr¨®ximas d¨¦cadas para aprovechar los residuos salinos en sal vacuum, tras la construcci¨®n de una planta en la zona.

La Secci¨®n Quinta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo asegura que "no se ha presentado dato ni documento del que se pueda deducir la existencia de licencia de actividad" y "en cuanto a la de funcionamiento es patente su inexistencia", prosigue el fallo.

Tras considerar que la autorizaci¨®n medioambiental no atend¨ªa al derecho europeo, estatal y auton¨®mico, el fallo considera que la Administraci¨®n catalana tampoco demand¨® un programa de restauraci¨®n adecuado ni una fianza acorde al coste que tendr¨ªa recuperar la zona ambientalmente.

La sentencia asegura que el hecho de que "una actividad ilegal perdure en el tiempo con la tolerancia de la Administraci¨®n" no es una raz¨®n para "permitir que se perpet¨²e", un hecho que el tribunal considera que es lo pretendido tanto por Iberpotash como por la Generalitat con sus recursos a la sentencia anterior del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a.

Iberpotash present¨® al Tribunal Supremo el acuerdo aprobado por la Generalitat con el que se modificaban las normas urban¨ªsticas para cumplir la sentencia del TSJC, con lo que la empresa minera aseguraba que su actividad "se ajusta actualmente al ordenamiento urban¨ªstico". La sentencia considera "innecesaria e intranscedente" la presentaci¨®n de ese documento.