Tres falsos guardia civiles roban un cami¨®n con dos millones en platino

Tres hombres que se hicieron pasar por guardias civiles asaltaron la tarde del pasado lunes un cami¨®n de reparto en el que iban bidones de polvo de platino, valorados en unos dos millones de euros. Los asaltantes lucieron chalecos y emblemas del instituto armado para apoderarse del veh¨ªculo y secuestrar a su conductor durante unas cuatro horas, seg¨²n confirmaron fuentes de la investigaci¨®n. El ch¨®fer fue liberado ya de noche con las manos atadas, tras permanecer en el coche de los captores. Andando fue hasta una gasolinera de Legan¨¦s, donde pidi¨® ayuda. Todav¨ªa no hay detenidos por este robo.

El robo parece sacado de una pel¨ªcula, pero ocurri¨® en la realidad a las cinco de la tarde del lunes. En ese momento, un cami¨®n de una empresa de mensajer¨ªa iba cargado con 41 bidones de polvo de platino. Circulaba por la M-50, a la altura de la autov¨ªa de Valencia (A-3), en direcci¨®n hacia la provincia de Guadalajara, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n.

Un coche simul¨® ser un veh¨ªculo camuflado de la polic¨ªa

Un coche que simul¨® ser un veh¨ªculo camuflado de la polic¨ªa le adelant¨® y puso una luz lanzadestellos azul similar a la que utilizan los veh¨ªculos oficiales. El turismo, que era de color azul, se situ¨® delante del cami¨®n de transportes y le oblig¨® a detenerse en el arc¨¦n. Del coche se bajaron tres hombres que llevaban chalecos de la Guardia Civil y que mostraron incluso placas oficiales falsificadas. Seg¨²n algunas fuentes, llevaban pasamonta?as para cubrirse parcialmente la cara. Adem¨¢s, iban muy caracterizados para no ser reconocidos. Cuando los hombres se acercaron al cami¨®n, ordenaron al conductor que se bajara de inmediato para hacer una revisi¨®n.

Justo cuando el ch¨®fer descend¨ªa, uno de ellos le puso una mano en la cara para taparle la visi¨®n y le inmoviliz¨®, mientras otros le reten¨ªan. Lo hicieron con mucha rapidez. No quer¨ªan levantar ninguna sospecha entre el resto de conductores.

Uno de los asaltantes se subi¨® al cami¨®n y se lo llev¨® mientras los dos met¨ªan a la v¨ªctima en el turismo. Nada m¨¢s entrar le pusieron un pasamonta?as para que no viera y le dijeron que no se moviera. Seg¨²n sus primeros testimonios, el coche estuvo dando vueltas por las carreteras de la regi¨®n y sin llevar un rumbo fijo o predeterminado.

La noche se echaba encima y nadie le dec¨ªa nada de lo que estaba ocurriendo. En un determinado momento, los captores recibieron una llamada. Se pararon y lo abandonaron en medio del campo, completamente desorientado y sin decirle nada. Ya era noche cerrada. El veh¨ªculo arranc¨® a toda velocidad.

El conductor, de unos 35 a?os, comenz¨® a andar hacia unas luces que vio a lo lejos. Lo hizo campo a trav¨¦s. Lleg¨® a una gasolinera Repsol situada en la calle del Arroyo del Soto, en el pol¨ªgono industrial La Laguna, en Legan¨¦s. Entr¨® con la cara desencajada y con las manos todav¨ªa atadas a la espalda. Seg¨²n algunos testigos, estaba ¡°muy nervioso y casi no acertaba a pronunciar palabra¡±. Pidi¨® con voz vacilante que llamaran a la polic¨ªa, que le acaban de secuestrar unas personas que se hab¨ªan hecho pasar por guardias civiles. ¡°Se le ve¨ªa muy cansado, casi agotado, despu¨¦s de todo lo que tuvo que andar, y con un fuerte estado de ansiedad¡±, recuerdan algunos testigos.

Se pararon y? abandonaron al conductor en medio del campo,

El hombre ten¨ªa las manos hinchadas, muy coloradas, ¡°como si le fueran a estallar y con los dedos como morcillas¡±. Mientras llegaba la polic¨ªa, las personas que estaban en la gasolinera le cortaron las bridas y le liberaron. ¡°Los polic¨ªas deb¨ªan de estar cerca porque tardaron muy poco. Primero llegaron agentes municipales y luego los de la judicial. Se lo llevaron a comisar¨ªa, mientras el hombre intentaba rehacerse¡±, recordaba un cliente.

El camionero dio una somera descripci¨®n de sus atacantes y los agentes de la comisar¨ªa de Legan¨¦s encargados de la investigaci¨®n facilitaron todos los datos del cami¨®n sustra¨ªdo a la emisora del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa, a la Guardia Civil y a las polic¨ªas municipales de la zona. Se trata de un Renault Premium rojo con un remolque gris. Tambi¨¦n facilitaron las matr¨ªculas. Pero el tiempo que hab¨ªa transcurrido desde el asalto hasta su liberaci¨®n hace pensar a los investigadores que el cami¨®n ya estaba en un lugar seguro cuando le soltaron.

Hasta el momento no se ha localizado el cami¨®n sustra¨ªdo ni la mercanc¨ªa que llevaba. Tampoco se ha realizado ninguna detenci¨®n por el robo. Los autores pueden ser acusados de los delitos de robo con violencia e intimidaci¨®n, usurpaci¨®n de funciones p¨²blicas y detenci¨®n ilegal, entre otros delitos.