Una campa?a a medio gas
El cansancio de las bases de los partidos ha desembocado en m¨ªtines medio vac¨ªos en Catalu?a
?Venga, un poco m¨¢s de marcha!
!Arriba las banderas!
La animadora de los actos de Democr¨¤cia i Llibertat ha tenido que arremangarse esta campa?a electoral. Los asistentes a los m¨ªtines no han escapado del ambiente de apat¨ªa generalizada que ha impregnado al independentismo y a buena parte de las formaciones catalanas. Se notaba el agotamiento. De los l¨ªderes. Pero tambi¨¦n de las bases. Las formaciones catalanas dieron todo lo que daban de si ya en las elecciones auton¨®micas del 27-S. La excepci¨®n ha sido la confluencia de izquierdas liderada por Podemos e Iniciativa que, en buena parte gracias a la omnipresencia de Ada Colau, ha aumentado las revoluciones las ¨²ltimas dos semanas. El resto han sido m¨ªtines de peque?o formato, casi de compromiso.
Democr¨¤cia i Llibertat, la marca de Converg¨¨ncia, se las ha visto y deseado para no defraudar. ¡°Ven¨ªamos de muy arriba¡±, explican fuentes del equipo de campa?a. ¡°Los m¨ªtines de septiembre, con Junts pel S¨ª, fueron apote¨®sicos, es muy complicado superar aquello¡±. Efectivamente, ning¨²n mitin se ha parecido, ni por asomo a los que en septiembre llenaban calles y plazas casi sin necesidad de tocar a rebato a la militancia. Tampoco el cartel sol¨ªa animar mucho a la gente. La excepci¨®n ha llegado solo en los m¨ªtines en los que ha participado Artur Mas, que ha entrado y salido vitoreado de las salas ¨Ctodas de tama?o entre peque?o y mediano- al grito de ¡°presidente, presidente¡±.
La falta de vigor convergente se vio en el mitin de Reus como en pocos sitios. El candidato por Tarragona, Ferran Bel, intent¨® animar las cosas fi¨¢ndolo todo a Artur Mas aunque esto acabara por diluir, y casi degradar, la figura de Francesc Homs el cabeza de cartel. ¡°entiendo que no os motive mucho votarme a mi, tambi¨¦n puedo llegar a entender que no os motive hacerlo por Francesc Homs, pero ten¨¦is que hacerlo por el hombre que lo ha dado todo por el proceso¡±, dijo en referencia a Artur Mas.
Esquerra Republicana no ha logrado en esta campa?a los llenos a los que acostumbra el partido desde que en 2011 Oriol Junqueras tom¨® las riendas. La mayor¨ªa de actos de los republicanos han sido en salas m¨¢s peque?as que en otros comicios, de menos de 500 personas, y a¨²n as¨ª hab¨ªa sillas libres. En Cornell¨¤, en el mitin de inicio, los organizadores tuvieron que tapar la parte alta del auditorio para que no pareciera tan vac¨ªo. En el cierre de campa?a de Girona tuvieron que retirar sillas. Solo en el acto central, ante m¨¢s de mil personas, el partido mostr¨® una capacidad de movilizaci¨®n importante. En ERC achacan la poca participaci¨®n al cansancio del electorado. Tambi¨¦n en los peque?os actos se nota. "En todo lo que organizamos viene un 30% de la gente que en otras elecciones. La gente est¨¢ cansada", explica un cargo local. ERC espera que la poca participaci¨®n en los m¨ªtines no se note en las urnas para alcanzar la victoria.
En cambio, la euforia se ha instalado en En Com¨² Podem desde que las encuestas la se?alan como probable ganadora. Conjurados en una eventual remontada, el mantra de las mareas de todo el Estado, los miembros de la lista han transmitido la sensaci¨®n de que acarician la victoria tanto en los m¨ªtines multitudinarios de L¡¯Hospitalet, Badalona y Nou Barris como en los de peque?o. Ada Colau, erigida como virtual l¨ªder de la izquierda en Catalu?a, ha catapultado a la candidatura y su alianza con Pablo Iglesias ha funcionado como un cohete. El d¨²o ha sido el mejor reclamo.
La mayor¨ªa de los actos electorales del PSC han contado con asistencias de entre 300 y 500 personas, a excepci¨®n de los dos m¨ªtines con Pedro S¨¢nchez en L'Hospitalet y Vall d'Hebron, mucho m¨¢s numerosos. El p¨²blico se caracterizaba por estar entrado en a?os, seguramente votantes fieles desde que hay democracia que agitaban las banderas de pl¨¢stico del PSC y las senyeras debidamente colocadas en los asientos de los polideportivos.
El entusiasmo no ha caracterizado al auditorio en la mayor¨ªa de los casos, aunque algunas arengas s¨ª lograron levantar el ¨¢nimo y los aplausos de la asistencia, como las de Miquel Iceta en el mitin final, donde se core¨® su nombre y el recurrente "?visca, visca, visca Catalunya socialista!". Al igual que Iceta, la presidenta andaluza, Susana D¨ªaz, tambi¨¦n consigui¨® levantar de sus asientos a las de mil personas que fueron a escucharla a Cornell¨¤.
Carme Chac¨®n, como todos los candidatos en campa?a, ha repetido m¨¢s del 90% de su argumentario en todos los actos, alternando catal¨¢n y castellano y sin aludir para nada a los or¨ªgenes andaluces de su familia. La exministra ha estado acompa?ada en seis ocasiones por el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, que en esta campa?a no ha bailado, pues las canciones elegidas para cerrar los actos tampoco acompa?aban.
La campa?a de Uni¨® Democr¨¤tica ha estado marcada por su falta de representaci¨®n en el Parlament. Por primera vez, el partido democristiano concurre en solitario y ve la necesidad de reivindicar sus valores fundacionales para diferenciarse de su exsocio de Gobierno, Converg¨¨ncia. El candidato, Josep Antoni Duran Lleida, no ha protagonizado grandes m¨ªtines, todos los actos se han preparado cuidadosamente para no transmitir la imagen de un auditorio desangelado. Duran ha recorrido una peluquer¨ªa, una granja, un centro social¡ e incluso una discoteca.
Informaci¨®n elaborada por Maiol Roger, Pere R¨ªos, ?ngels Pi?ol y Ana Gonz¨¢lez.
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