La comunicaci¨®n petulante

¡°Somos Tri¨¢ngulo de Amor Bizarro y tenemos much¨ªsima motivaci¨®n¡±, avanz¨® Isabel Cea, este jueves en la Ocho y Medio, antes de que estallara el primer guitarrazo. Eran las 23.20 de la noche y, despu¨¦s de las entregas de los j¨®venes Berlina y los revitalizados Automatics, al cuarteto gallego se le esperaba con honores de acontecimiento. Confirmad¨ªsimo: Rodrigo Caama?o y compa?¨ªa retienen su colecci¨®n de avales como grupo de culto y pedigr¨ª. Por eso mismo cuesta creer que sonaran tan rematadamente embarullados (que no es sin¨®nimo de densos). O que su post-punk orgulloso aporte generosos decibelios y muy poca concreci¨®n. TAB pueden manejar vocablos como ¡°criptocracia¡± o ¡°euromaquia¡± para sus t¨ªtulos, pero, paradojas de la comunicaci¨®n petulante, vigilan celosamente que sobre el escenario no se les entienda un triste art¨ªculo.

La de Madrid era la primera oportunidad en suelo ib¨¦rico (hubo un asalto previo en Edimburgo) para descubrir algunos contenidos de su inminente cuarto ¨¢lbum, Salve Discordia, que se har¨¢ realidad a finales de enero. El brillante t¨ªtulo parece una invitaci¨®n a formular objeciones, pero intuimos que en los cen¨¢culos m¨¢s sesudos seguir¨¢ reinando la unanimidad. Bienvenidas sean las cr¨ªticas de sombreros al aire, pero confiemos tambi¨¦n en pronunciamientos m¨¢s sesudos que las cr¨ªticas formuladas esta semana por Caama?o contra (gran hallazgo) Mal¨² o Melendi. O an¨¢lisis en clave sociol¨®gica un poquito m¨¢s elaborados que este de Cea: ¡°Nada de robar a los pobres y nada de joder a la juventud, como hacen nuestros dirigentes¡±.

El estreno de Desmadre Estigio abre a partir del minuto 40 la puerta a un espacio de concordia. Rodrigo suena ¨¢spero y persuasivo mientras el sonido comienza a redistribuirse por capas, no por moles amorfas. Pero esta afecci¨®n debe ser tambi¨¦n matizada: la banda cabalga atrapada a su monoton¨ªa r¨ªtmica, un factor agravado por el sonido manifiestamente hueco de la bater¨ªa. Queda holgado margen de mejora, por mucho que hubiera t¨ªmida invasi¨®n de escenario durante la definitiva De la Monarqu¨ªa a la Criptocracia.