Concierto ins¨®lito con Gershwin y Bernstein

Mientras en Europa la m¨²sica de vanguardia, afectada de hiperintelectualismo, se convert¨ªa cada vez m¨¢s en una religi¨®n que ten¨ªa m¨¢s sectas y sacerdotes que creyentes ¡ªy a¨²n hoy estamos pagando el alto precio de ese desaguisado¡ª en Am¨¦rica, dos compositores, Gershwin y Bernstein, intentaban por v¨ªas distintas que no se rompiera la relaci¨®n entre m¨²sica culta y popular.

Hoy los dos tienen obras colocadas tanto en el gran repertorio orquestal como en las listas de los est¨¢ndares m¨¢s populares. Que los dos copen un programa ¡°de cl¨¢sica¡± ya empieza a llamar la atenci¨®n, aunque est¨¢ dentro de los l¨ªmites de lo normal. Que el programa lo asuma una orquesta, la de la Radio de Colonia, que figura, seg¨²n reza en el programa de mano, que es la ¨²nica orquesta europea especializada en m¨²sica esc¨¦nica e incidental ¡ªincluyendo en el t¨¦rmino musicales, operetas, bandas sonoras y obras inspiradas en el jazz¡ª ya empieza a ser sorprendente. Finalmente, que este concierto forme parte de la temporada de conciertos Ibercamera que se caracteriza por su calidad pero no por su af¨¢n experimental, ya raya lo ins¨®lito. Y esto fue lo que ocurri¨®.

Liderada por Wayne Marshall en la doble condici¨®n de pianista y director, el conjunto alem¨¢n asumi¨® con solvencia un programa integrado en su primera parte por obras de Gershwin con la Obertura del musical Of thee I sing seguida por la c¨¦lebre Rhapsody in Blue, que qued¨® solo regular. La primera parte termin¨® con una pieza, Gershwin in Hollywood, formada por arreglos de Robert Russel Bennett sobre conocidas canciones del autor. La segunda, m¨¢s enjundiosa, estuvo ocupada en solitario por Bernstein con las Danzas Sinf¨®nicas de West Side Story que, bien dirigidas y bien interpretadas, fueron con mucho lo mejor de la noche.