Arte de inhumana belleza

El Arte de la Fuga, lacima del arte (?o quiz¨¢ de la ciencia?, ?o quiz¨¢ de la t¨¦cnica?) del contrapunto expresado a trav¨¦s de la m¨¢s severa de sus formas, la fuga, es una obra de una belleza inhumana. Su belleza es la de los movimientos complejos, la de los planetas orbitando, la de un reloj mec¨¢nico funcionando, un reloj eterno, c¨®smico, que marca horas y d¨ªas determinados por otros soles.

La m¨²sica del Arte de la Fuga, el testamento musical que Bach no pudo terminar, no contiene emociones, pasiones ni sentimientos o no los contiene de la forma en que los contendr¨¢ cuando el romanticismo se apodere de la m¨²sica para convertirla en la voz del alma. La belleza del Arte de la Fuga es la belleza fr¨ªa de la inteligencia llevada al l¨ªmite de la abstracci¨®n.

Tan abstracta es la obra que Bach ni dej¨® indicado que instrumento o instrumentos la deber¨ªan interpretar y hoy circulan por los escenarios versiones para teclado, para cuarteto de cuerda y para conjuntos de c¨¢mara de timbres heterog¨¦neos que son los que permiten seguir m¨¢s f¨¢cilmente los intrincados caminos de cada voz en el contrapunto.

Tocar el Arte de la Fuga, en teclado (la obra dura unos ochenta minutos) es empresa ardua y hacerlo de memoria como lo hizo Evgueni Koroliov en el Palau, ya es tit¨¢nica. Tocar la pieza, adem¨¢s de dif¨ªcil, es ingrato pues nadie se emociona con tu tocar y no pocos (como as¨ª ocurri¨® en el Palau) agotados, acabar¨¢n durmi¨¦ndose m¨¢s o menos ostensiblemente. El aplauso final, nutrido, premiar¨¢ la inteligencia, la seriedad, el rigor, pero no tendr¨¢ el arrebato apasionado que recibe un pianista despu¨¦s de tocar sonatas de Beethoven o Nocturnos de Chopin.

Koroliov, pianista muy serio, que ya convenci¨® a finales de 2013 cuando vino al Palau a tocar otra obra mayor de Bach, las Variaciones Goldberg , a¨²n estuvo mejor en su interpretaci¨®n del Arte de la Fuga y cosech¨® todo el ¨¦xito que la interpretaci¨®n una pieza de tanta severidad puede llegar a obtener en nuestros fr¨ªvolos d¨ªas.