El 80% de las reclamaciones dentales en 2015 fueron contra franquicias ¡®low cost¡¯
Los odont¨®logos catalanes llevan a?os denunciando los peligros de la liberalizaci¨®n del mercado
Los esc¨¢ndalos delictivos que han salpicado en las ¨²ltimas semanas a las cadenas dentales Funnydent y Vitaldent ¡ªel gerente de la primera ingres¨® en prisi¨®n acusado de estafa y el de la segunda por blanqueo¡ª han dejado un reguero de pacientes afectados, con los tratamientos pagados y a medio hacer. Sin embargo, la ca¨ªda de estas cadenas low cost no ha sorprendido a los odont¨®logos, que llevan a?os denunciando los peligros de la liberalizaci¨®n del mercado en el sector y la ¡°negligente¡± actitud de la Administraci¨®n al no poner coto a la burbuja de las franquicias. En Catalu?a, el Colegio de Odont¨®logos y Estomat¨®logos (COEC) registr¨® 500 reclamaciones de pacientes en 2015, el 80% contra este tipo de cadenas.
Los odont¨®logos lo ve¨ªan venir y alertan de que ¡°¨¦stas no ser¨¢n las ¨²ltimas firmas que caigan¡±. El COEC, que es el organismo que centraliza la mayor parte de las quejas, ha detectado en Catalu?a un incremento anual del 20% en reclamaciones de pacientes. ¡°La mayor¨ªa son por desacuerdos econ¨®micos. Les han hecho un tratamiento, no les ha ido bien y piden que les devuelvan el dinero¡±, se?ala el presidente del COEC, Antoni G¨®mez. Sin embargo, frente al incremento de quejas que registr¨® el COEC, el Departamento de Salud, encargado de expedir las autorizaciones de actividad a las cl¨ªnicas dentales, sostiene que ¡°las denuncias de particulares han descendido¡± en los dos ¨²ltimos a?os, aunque no facilita su cifra exacta. Y la Agencia Catalana del Consumo asegura haber recibido unas 300 reclamaciones entre 2012 y 2016.
Estas cadenas dentales emplean los bajos precios de gancho para captar clientes ¡ª200 euros por un implante¡ª y, una vez dentro del circuito, los dependientes aconsejan tratamientos complementarios, a veces innecesarios, que inflan el precio final, seg¨²n los dentistas. ¡°No son casos excepcionales. Ya ten¨ªamos antecedentes como los de Oraldent o Dentaline. La salud no puede ser low cost y no puede prevalecer el modelo empresarial sobre el sanitario¡±, apunta G¨®mez.
El doctor Javier Mareque, presidente de la Sociedad Catalana de Cirug¨ªa Maxilofacial y Oral de la Academia de Ciencias M¨¦dicas, es tajante: ¡°La mitad de mi trabajo es rehacer los tratamientos que han hecho estos mal¡±. A Josefa Garc¨ªa, de 63 a?os, el cierre de Funnydent la pill¨® compuesta y sin dientes, reci¨¦n salida de una operaci¨®n para sacarle la dentadura. La cl¨ªnica le sac¨® 5.000 euros y todos los dientes, cosi¨® sus enc¨ªas y la abandon¨® a su suerte, esperando una dentadura postiza que nunca lleg¨®. ¡°Esto no es vida. Desde Navidad que no puedo comer nada s¨®lido. He tenido que acudir a otro dentista¡±, protesta.
Los profesionales lamentan que ¡°cualquiera pueda abrir una cl¨ªnica dental¡±. No hace falta ser odont¨®logo para poner en marcha un negocio de salud oral. Adem¨¢s, pese a que la legislaci¨®n obliga a tener una autorizaci¨®n del Departamento de Salud, el COEC asegura que muchas cl¨ªnicas abren sus puertas sin tener el certificado. Es el caso de Funnydent, que comenz¨® a funcionar sin el permiso y no fue hasta que el COEC se enter¨® y lo puso en conocimiento de Salud, que la empresa no solicit¨® la autorizaci¨®n. La operaci¨®n policial que destap¨® la trama delictiva pill¨® a la empresa en plena tramitaci¨®n de la licencia.
Para combatir los centros no autorizados, Salud asegura que vigila los negocios ¡°contrastando denuncias y quejas ciudadanas, valorando incidentes no deseables de los que es conocedor, coordinando actuaciones con los diferentes colegios profesionales y a trav¨¦s de la b¨²squeda activa de publicidad de los centros sanitarios¡±. Sin embargo, los odont¨®logos aseguran que la actitud de los gobiernos ha sido ¡°negligente¡± y ¡°ahora se les ha ido de las manos¡±. ¡°Es necesario regular el sector. La Administraci¨®n tiene que intervenir para asegurar la calidad y la salud oral de los pacientes¡±, apunta Mareque. El consejero Com¨ªn reconoci¨® el viernes que ¡°con los mecanismos vigentes, esto no se pod¨ªa evitar¡±. Salud y el COEC trabajan en un protocolo para vincular la licencia municipal de actividad a la autorizaci¨®n sanitaria, de forma que no se expida la primera sin disponer del permiso de Salud.
Los expertos recuerdan que estos casos ¡°son los primeros de muchos que tienen que salir¡±. El modelo de las cl¨ªnicas de falso low cost, sostiene Mareque, ¡°ha roto el lazo m¨¦dico-paciente porque se trata a los pacientes como clientes¡±. Adem¨¢s de la dudosa calidad de algunos productos, en un mismo tratamiento, los pacientes pasan por muchas manos diferentes porque en estas cl¨ªnicas hay una rotaci¨®n de profesionales muy elevada. Los odont¨®logos no conocen al paciente y no han seguido su caso, por lo que son m¨¢s vulnerables a la hora de tomar decisiones en caso de surgir problemas. ¡°Este modelo de negocio est¨¢ jugando con la salud oral de la gente¡±, sentencia G¨®mez.
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