Una deuda con la Rep¨²blica

La gente que vivimos en Nou Barris y queremos a sus plazas y calles sabemos que, para muchos, la plaza donde se cruzan la Via J¨²lia y el paseo Valldaura, la hasta ahora plaza Llucmajor, era desde hace mucho tiempo conocida popularmente como la plaza de la Rep¨²blica.

Cambiar el nombre a esta plaza no es una an¨¦cdota urbana ni un capricho pol¨ªtico. Ni mucho menos ning¨²n acto de revanchismo hist¨®rico. Esta decisi¨®n forma parte de las actuaciones que el Gobierno municipal de Barcelona en Com¨² est¨¢ llevando a cabo para poner en valor el pasado democr¨¢tico de Barcelona y contribuir a construir la imagen del pasado de la mano de la ciudadan¨ªa y las entidades que han luchado por reivindicar la memoria de la ciudad. De hecho, este cambio es tambi¨¦n un acto de justicia y de dignificaci¨®n.

En Barcelona, donde a¨²n perviven s¨ªmbolos fascistas, hasta ahora no exist¨ªa ning¨²n espacio expl¨ªcitamente dedicado a rendir homenaje a los valores republicanos, ideales necesarios para la construcci¨®n colectiva del que debe ser el bien com¨²n en una sociedad.

Pero, sobre todo, la plaza de la Rep¨²blica es una demanda ciudadana, de muchos vecinos y vecinas de Nou Barris, que viene de lejos. Ya en 2010 el pleno del Consejo del Distrito de Nou Barris aprob¨® el cambio de nombre de plaza Llucmajor por plaza de la Rep¨²blica, a demanda de la Taula de Nou Barris per la Rep¨²blica (formada entre otros por la Coordinadora de AAVV y entidades de Nou Barris, Asociaci¨®n Nou Barris por la Rep¨²blica, ICV-EUiA, PSC y ERC).

Esta reivindicaci¨®n se sustenta en el hecho de que fue en Nou Barris donde acogimos en 1990 la escultura de homenaje a la Rep¨²blica de Josep Viladomat, que originalmente estaba en la plaza del Cinco de Oros en paseo de Gr¨¤cia y Diagonal y que fue retirada por la dictadura franquista.

Estamos convencidos, junto a las vecinas y vecinos, que es en Nou Barris donde se tiene que quedar la estatua original. Debe quedarse por justicia urbana, para construir nuevas centralidades y para fortalecer el orgullo de barrio. Y lo har¨¢ en una plaza que lleve su nombre, el de la Rep¨²blica. Un cambio de denominaci¨®n que se aprobar¨¢ este mismo mi¨¦rcoles en el Plenario del Distrito y que inauguraremos popularmente el pr¨®ximo 14 de abril, coincidiendo con la celebraci¨®n del 85? aniversario de la proclamaci¨®n de la Rep¨²blica.

En el acuerdo tambi¨¦n contemplamos mantener el nombre de Llucmajor, concretamente en los jardines cercanos, como tuve el placer de expresarle personalmente al alcalde de Llucmajor.

La ciudad tiene la oportunidad de tener una deuda menos con la memoria y con Nou Barris, con la historia de miles de vecinos y vecinas que lucharon en defensa de los valores republicanos: los de libertad, igualdad y fraternidad.

Esta acci¨®n forma parte de una estrategia de ciudad para que el espacio p¨²blico de Barcelona se llene de elementos que recuerden las libertades democr¨¢ticas y donde no haya cabida para s¨ªmbolos franquistas. S¨ªmbolos de una etapa dram¨¢tica de nuestra historia que expresan, insultantes, hechos que son ant¨ªtesis de los valores de la democracia. Ante esto, la voluntad del Gobierno de Barcelona en Com¨² es clara: abrir el nomencl¨¢tor de nuestra ciudad a personas, entidades y asociaciones defensoras de las libertades democr¨¢ticas y nacionales, protagonistas de diferentes luchas populares y v¨ªctimas de la dictadura.

Janet Sanz es cuarta teniente de alcalde de Ecolog¨ªa, Urbanismo y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona y concejal del distrito de Nou Barris.