Dec¨ªamos ayer

Dec¨ªamos ayer. Con esa frase victoriosa se reincorporaba a sus clases en la Universidad de Salamanca Fray Luis de Le¨®n, despu¨¦s de sufrir c¨¢rcel, v¨ªctima de la Inquisici¨®n, por un qu¨ªtame all¨¢ esas pajas b¨ªblicas y heterodoxas. Dec¨ªamos ayer, tambi¨¦n Unamuno volv¨ªa a Salamanca tras el exilio forzado por la dictadura de Primo de Rivera. A Unamuno le dol¨ªa tanto Espa?a que muri¨® de un infarto la nochevieja del 36, dejando el memorable vencer¨¦is, pero no convencer¨¦is, para uso, o m¨¢s bien desuso, de las generaciones posteriores. Dec¨ªamos ayer, tal es el sentimiento que aparece despu¨¦s de la derrota del Espanyol contra el Betis.

El equipo de Galca sufre, deslavazado, descompuesto por una gastroenteritis que provoca diarrea hasta en los est¨®magos de los aficionados, que llegan al estadio ya cargados de rollos de papel higi¨¦nico, para contrarrestar el rollo que les va a endilgar el equipo con sus pelotazos al espacio, es decir, a la nada. S¨ª, de la nada surgi¨® el Universo tras mucho insistir, pero eso s¨®lo est¨¢ al alcance de un Dios omnipotente, omnisciente, cabreado y cabez¨®n, es decir, Jos¨¦ Antonio Camacho.

?Sabe mister Chen Yansheng qui¨¦n es Camacho? Si no lo sabe, debe intuirlo, pues no est¨¢ tan lejos Camacho del Mono Rojo de Fuego, tal es el a?o 2016 seg¨²n el hor¨®scopo chino. Los caminos del mister, otrora Se?or, son inescrutables, infinitos y, en Catalunya, caros, pues son de peaje obligatorio. Todo parece indicar que para Yansheng el Espanyol es otro juguete electr¨®nico m¨¢s. A nosotros nos parece bien, siempre que nos divirtamos todos y salga barato.

Los chinos, salvo excepciones, como los catalanes, salvo excepciones, como los espa?oles, salvo excepciones, son gente honrada y trabajadora, valga la redundancia. ?Alguien ha visto a un chino en un gimnasio? Por supuesto que no, est¨¢n trabajando a todas horas todos los d¨ªas del a?o. ?Alguien ha visto alguna vez a un chino en un bar (como cliente, se sobreentiende)? Jam¨¢s. Pronto habr¨¢ una presidencia de la Generalitat china, no saben c¨®mo lo estamos deseando, pero esta vez para quedarse, no como le pas¨® a Montilla, que siendo extranjero dur¨® en el cargo lo que dura una sardana on the rocks. Periquitos, el que no est¨¦ colocado que se coloque, y al loro, vienen curvas emocionantes como las de Sof¨ªa Loren. ?Sof¨ªa Loren hemos dicho? La nostalgia, que no la memoria, es un error perjudicial para la salud. Sin nostalgia y con la memoria enhiesta digamos, para continuar, dec¨ªamos ayer¡­