La paqueter¨ªa de env¨ªos a Ecuador realiz¨® ofertas masivas a sus clientes antes de cerrar

Nancy Tenezaca, de 44 a?os y 15 de ellos en Madrid, porta varias facturas con las que demuestra haber pagado 430 euros por dos env¨ªos en octubre a Ecuador que nunca llegaron. Supone que sus bienes permanecen retenidos en uno de los 43 contenedores que est¨¢n confiscados en el puerto de Guayaquil. Se quej¨® a la empresa en varias ocasiones. El 5 de febrero, OGC la calm¨® firm¨¢ndole un compromiso de entrega de lo enviado en un m¨¢ximo de 60 d¨ªas y regal¨¢ndole un env¨ªo de 30 kilos (el m¨ªnimo permitido) gratis.

Algo similar le ocurri¨® a Cladis Romero, de 53 a?os, 20 en Espa?a. La compa?¨ªa que desde el lunes no le coge el tel¨¦fono la estuvo llamando desde enero varias veces al d¨ªa para que realizara nuevos env¨ªos. No es el ¨²nico caso, Eduardo Angulo, un desempleado de 61 a?os (20 en Madrid) dice que "pic¨®". "Me llamaban ma?ana, tarde y noche, al menos 10 veces al d¨ªa". Eduardo hizo dos env¨ªos de ropa y zapatos para sus hijos y sus nietos porque ¡°all¨ª [en Ecuador] son caros". Nunca llegaron a su destino.

La impresi¨®n de Darwin Castro, de 40 a?os (18 en Madrid) es que el cierre de OGC no fue casual. "Estaba premeditado" porque tienen constancia, por trabajadores, de que "se han llevado los ordenadores y han destruido documentos", insisti¨® este mi¨¦rcoles en la rueda de prensa en la que particip¨® en la Embajada de Ecuador en Espa?a. Darwin es uno de los seis representantes elegidos por los afectados por la clausura de OGC. Seg¨²n los c¨¢lculos de la plataforma que han creado, los damnificados por un cierre que consideran de "estafa" superar¨ªan los 8.000 compatriotas.?La Asociaci¨®n Hispano-Ecuatoriana Rumi?ahui estima que son 2.000, mientras que la Embajada de Ecuador en Madrid no dispone de cifras ni prev¨¦ hacer una relaci¨®n por el momento.?

Los damnificados quieren recuperar sus bienes y su dinero. Para eso han hecho un llamamiento a otros ecuatorianos afectados en Espa?a y Europa. Les piden unirse a la plataforma y reclamar sus pertenencias de forma conjunta. Contar¨¢n para ello con la ayuda de la Embajada de Ecuador. Su titular, Miguel Calahorrano, ha estado reunido este mi¨¦rcoles con medio centenar de afectados. Tras ese encuentro, anunci¨® en una rueda de prensa que les prestar¨¢ ayuda, pero no precis¨® en qu¨¦ va a consistir. Calahorrano s¨ª explic¨® que su delegaci¨®n no se personar¨¢ en la causa de forma particular.

Apoyo de la embajada

El embajador ha instado a los damnificados a organizarse para luchar en mejores condiciones. "Sabemos de lo que hablamos. No es la primera vez que ocurre algo as¨ª. En 2011 ya pas¨® algo similar con Vicza (otra empresa de paqueter¨ªa que, como OGC, solo realizaba env¨ªos a Ecuador)". Calahorrano ha asegurado que las personas que han perdido sus bienes tendr¨¢n el apoyo de la delegaci¨®n ecuatoriana, aunque no ha precisado s¨ª pondr¨¢ a su disposici¨®n un equipo jur¨ªdico. "Tenemos que estudiar el caso", ha resaltado.

"Es lamentable que haya empresas que, a sabiendas de que nuestra comunidad es trabajadora y que sufre una serie de adversidades para abrirse camino, no tengan en cuenta el significado del esfuerzo que hacen", ha subrayado el representante del Gobierno ecuatoriano en Espa?a. Calahorrano ha indicado que deben ser las autoridades espa?olas las que lleven el caso al hilo de las denuncias presentadas, ya que la empresa fue constituida en Espa?a, aunque sus propietarios y la mayor¨ªa de los trabajadores son ecuatorianos. La delegaci¨®n, sin embargo, no tiene potestad para llamarles a declarar. "Ya ten¨ªamos se?alamientos (constancia) de lo que hac¨ªa esta empresa hace tiempo. Parece que hab¨ªa irregularidades", ha explicado el embajador. Al no tenerlas documentadas no pudieron hacer nada al respecto. Calahorrano ha pedido a sus compatriotas que, antes de contratar un servicio de env¨ªos, estudien bien la compa?¨ªa con la que lo hacen.

Para Mar¨ªa Piedra (52 a?os, 23 en Espa?a), otra de las afectadas, se trata de una situaci¨®n injusta: "Mis compatriotas se esfuerzan cada d¨ªa para tener algo con lo que volver a Ecuador". Ha pedido que el presidente del pa¨ªs, Rafael Correa, de instrucciones para que el problema se solucione y no suceda como con la empresa de paqueter¨ªa Vicza, que en 2011 cerr¨® tambi¨¦n inesperadamente y sus miles de afectados a¨²n no han recuperado sus pertenencias. Ba?ada en l¨¢grimas, Marlene Rivera (32 a?os, 16 en Espa?a) explica que ha enviado electrodom¨¦sticos a su pa¨ªs por valor de 5.000 euros. "He trabajado de d¨ªa y de noche sin poder disfrutar de mis hijas, que est¨¢n all¨ª. Me he quitado de muchas cosas para hacer estos env¨ªos. Hab¨ªa pensado volver este a?o y ahora no va a poder ser".

Posible delito econ¨®mico

Fuentes de la embajada sostienen que el caso de OGC tiene muchas similitudes con el de Vicza, una empresa que efectuaba env¨ªos a Ecuador certificando que los bienes eran usados y por tanto no est¨¢n sujetos al pago de impuestos en el pa¨ªs latinoamericano. Estas han precisado que si se puede demostrar que la compa?¨ªa ha procedido as¨ª, se habr¨ªa incurrido en un delito econ¨®mico en Ecuador, ya que se habr¨ªa mandado como menaje del hogar (que est¨¢ exento de impuestos) objetos que no lo son. Este delito se sumar¨ªa a los que se hayan podido cometer en Espa?a, que es donde tiene su sede central la empresa. Los contratos que realizaba OGC a sus clientes precisaban que todas las pertenencias deb¨ªan ser "categorizadas como usadas, salvo que el cliente diga lo contrario". Ahora se intenta esclarecer si OGC ten¨ªa una empresa filial en Ecuador, ya que su compromiso era entregar personalmente en los domicilios de sus usuarios los paquetes contratados en Europa.

El domingo se volver¨¢ a reunir la plataforma de afectados por el cierre inesperado de la empresa de paqueter¨ªa OGC, que realizaba env¨ªos a Ecuador de forma exclusiva y que operaba en Espa?a, donde ten¨ªa cinco oficinas, y diferentes pa¨ªses de Europa. El embajador les ha ofrecido una sala del consulado, donde estar¨ªa presente alg¨²n miembro de la delegaci¨®n ecuatoriana en Espa?a. Los damnificados, sin embargo, prefieren reunirse antes sin autoridades para ponerse de acuerdo en diferentes cuestiones, aunque han agradecido con ¨¦nfasis el apoyo que les brinda la embajada de su pa¨ªs.