Dos asesores de la Comunidad afirman que el caso de los esp¨ªas es un ¡°montaje¡± del PP

El exasesor de Seguridad de Francisco Granados, Marcos Pe?a, ha se?alado este viernes en la Comisi¨®n de Corrupci¨®n de la Asamblea que el caso de los esp¨ªas se mont¨® "desde dentro [DEL PP]" del Gobierno regional para tapar seguimientos que ya se hac¨ªan y que ten¨ªan una finalidad "pol¨ªtica". Tambi¨¦n compareci¨® el exdirector de la agencia de detectives M¨¦todo 3, Francisco Marco, que relat¨® c¨®mo el expresidente Ignacio Gonz¨¢lez le pidi¨® que averiguara qui¨¦n se encontraba detr¨¢s de un dossier que le desprestigiaba. Asegur¨® que no acept¨® el encargo.

El exasesor de Seguridad de la Consejer¨ªa de Presidencia, Justicia e Interior en la ¨¦poca de Francisco Granados, Marcos Pe?a D¨ªaz, asegur¨® que fue Esperanza Aguirre, entonces presidenta, quien le contrat¨® en 2008 para formar parte de la Direcci¨®n General de Seguridad (DGS), ideada en 2006 y de la que parte la supuesta trama de los esp¨ªas. Alfredo Prada, entonces consejero de Presidencia, puso al frente de ella al inspector de la Polic¨ªa Nacional Sergio Gam¨®n, af¨ªn a Gonz¨¢lez y a Aguirre.

Pe?a asegur¨® que nada m¨¢s llegar a la DGS se dio cuenta de que all¨ª mandaba Gam¨®n en lugar del consejero. Gam¨®n contaba con seis asesores: tres guardias civiles, ahora imputados en el caso, y tres polic¨ªas nacionales. Estos ¨²ltimos eran "hombres de confianza de Gam¨®n" y, seg¨²n ¨¦l, de Gonz¨¢lez. Los tres guardias civiles eran leales a Granados. El presunto espionaje surgi¨® en plena batalla por el poder dentro del PP. Por un lado, a escala nacional: tras la segunda derrota de Mariano Rajoy en las elecciones generales, Alfredo Prada, consejero de Justicia hasta 2008, y Manuel Cobo, vicealcalde de Madrid y mano derecha de Gallard¨®n, se pusieron al lado de Rajoy en su disputa con Aguirre. Por otro, en la escala regional: Granados y Gonz¨¢lez compet¨ªan por el control del partido. "Me dijeron que exist¨ªa un enfrentamiento entre tres guardias civiles y Gam¨®n; deb¨ªa recolocarlos porque estaban muy estresados", relat¨® Marcos Pe?a. Poco despu¨¦s le comunicaron que no iba a tener relaci¨®n con ellos. Los tres est¨¢n imputados, junto a un empleado auton¨®mico, el propio Gam¨®n y Miguel Casta?o, segundo de Gam¨®n en la DGS.

"La culpa del bedel"

En esa acusaci¨®n fueron claves los partes de los seguimientos realizados con anotaciones manuscritas. "Es una barbaridad", dijo Pe?a, "que se atribuyan a Jos¨¦ Manuel Pinto [empleado auton¨®mico imputado]. Es como si dices que la culpa de la supuesta estafa de Bankia es del bedel". Pe?a se describi¨® como una v¨ªctima, igual que los guardias civiles, por haberse negado a participar en el espionaje. Al parecer esto ocurri¨® cuando Gam¨®n les pidi¨® que espiaran a Granados, seg¨²n declararon en la anterior sesi¨®n de la comisi¨®n los dos agentes imputados.

La comisi¨®n cit¨® tambi¨¦n ayer a Miguel Casta?o, exsubdirector de Seguridad de la Comunidad al que se le acus¨® de haber manipulado los partes de seguimiento, aunque el juez no encontr¨® relaci¨®n entre la letra de los partes y su escritura.

Casta?o culp¨® a dos de los guardias civiles imputados, Jos¨¦ Oreja y Antonio Coronado, de haberle implicado en el caso. "Ha sido una estrategia de la defensa", dijo. Tambi¨¦n neg¨® haber participado en la desaparici¨®n de un ordenador del Campus de la Justicia [que presuntamente conten¨ªa informaci¨®n sensible], motivo por el que su jefe Gam¨®n fue destituido, al ser considerado responsable. El exjefe superior de polic¨ªa Enrique Bar¨®n lo sustituy¨®.

Por su parte, el exdirector general de la agencia de detectives M¨¦todo 3, Francisco Marco, neg¨® que su empresa llevara a cabo ning¨²n informe encargado por Gonz¨¢lez. Relat¨® que se reuni¨® con el expresidente regional porque este estaba interesado en conocer la autor¨ªa de un dossier, de 69 p¨¢ginas, con informaci¨®n sobre ¨¦l y que se hab¨ªa hecho p¨²blico. "Me dieron una lista de posibles enemigos de Nacho [en referencia a Gonz¨¢lez]", asegur¨®. Pero sostuvo que no acept¨® el encargo. "No hice ning¨²n trabajo para el se?or Gonz¨¢lez ni le he vuelto a ver", puntualiz¨® Marco.