Los mayoristas chinos de la calle Trafalgar emigran a Badalona
Los comerciantes, tras casi tres d¨¦cadas en la zona, se trasladan por la ca¨ªda de las ventas
La calle Trafalgar de Barcelona ha sido testigo de las mejores y peores momentos del comercio de la ciudad. A principios de los a?os 80, los mayoristas de ropa vend¨ªan a mercer¨ªas, paradistas de mercadillos, tiendas de ropa... La vida era feliz en la Barcelona preol¨ªmpica. Meses despu¨¦s de que Cobi se despidiera de la ciudad, surcando los cielos a bordo de su barco de luz, aterriz¨® una dura competencia en forma de locales regentados por empresarios chinos en la calle que sirve de frontera entre L¡¯Eixample y Ciutat Vella. Las tiendas chinas desplazaron a las locales y pronto fueron mayor¨ªa. Desde hace tres a?os, sin embargo, est¨¢n abandonando el enclave y emigrando a un pol¨ªgono de Badalona.
Lixiantex es una peque?a tienda regentada por un empresario chino que vende ropa de beb¨¦ y primera infancia. El propietario clava sus ojos en la diminuta pantalla del ordenador del mostrador. Atiende, sin dejar de mirar el monitor, a un grupo de tenderas gitanas que han comenzado a negociar. Empieza el regateo. En la pantalla, una especie de producci¨®n asi¨¢tica de aventuras. ¡°Nosotros los chinos venimos aqu¨ª para trabajar y vender lo m¨¢ximo posible¡±, sonr¨ªe. ¡°Desde hace tres a?os, nos estamos marchando todos a Badalona. Siempre hacemos lo mismo: primero mantenemos una tienda en Trafalgar y abrimos una nave en Badalona, vemos que all¨ª se vende mucho m¨¢s y cerramos la de aqu¨ª¡±, informa. El empresario es discreto y no dice cu¨¢ndo pondr¨¢ fin a su aventura en Trafalgar y emigrar¨¢ rumbo al Chinatownindustrial del pol¨ªgono Badalona Sur. El lugar donde se concentran los mayoristas asi¨¢ticos que abastecen a media Catalu?a. En Lixiantex contin¨²a el regateo.
Un matrimonio joven dirige la tienda de ropa Oy. El local est¨¢ repleto de bolsas con pantalones y camisetas. Sonr¨ªen siempre. ¡°En Badalona, las naves son mucho m¨¢s grandes que aqu¨ª. No es m¨¢s barato, pero no hay problemas para que los clientes aparquen¡±. Tambi¨¦n ha tirado la toalla y espera, por el bien del negocio, poder encontrar un hueco en Badalona.
Decenas de comercios han quedado vac¨ªos, sobre todo en el tramo entre la calle M¨¦ndez N¨²?ez y Arc de Triomf. En algunos locales, hay carteles que indican la nueva ubicaci¨®n del negocio. Entre graf¨ªas escritas en mandar¨ªn aparece la nueva ubicaci¨®n: Badalona.
Angelines carga una furgoneta. ¡°Es imposible comprar aqu¨ª¡±, lamenta. Toda su familia se dedica a la venta en mercadillos. ¡°Tenemos que venir varios, uno se queda en el coche para que no te denuncien mientras que en Badalona no hay problema de aparcamiento¡±, advierte. Una de las dependientas de Venta al Mayor Eduard lamenta el ¨¦xodo de los empresarios chinos. ¡°En Badalona est¨¢n solo ellos, incluso alquilan naves entre varios¡±.
El vigilante del parking Trafalgar trabaja desde principios de los a?os 80 en el aparcamiento subterr¨¢neo. ¡°Antes era un no parar de gente comprando, no hab¨ªa sitio para aparcar. Luego se instalaron los chinos y cambi¨® todo. Ahora, se van¡±.
Donde antes hab¨ªa un comercio de lencer¨ªa presuntamente sexy y picantona ahora hay un supermercado non stop regentado por un matrimonio paquistan¨ª. ¡°Llevamos un mes y estamos contentos¡±, asegura el joven que dirige el supermercado. Su esposa le acompa?a, da el biber¨®n a un beb¨¦ mientras corrige su velo. El propietario sonr¨ªe al recordar lo que antes vend¨ªa el local. En el escaparate, deste?ida por el sol, sobrevive una pegatina gigante en la que aparecen se?oritas asi¨¢ticas con lencer¨ªa.
Otro negocio que lleva un a?o abierto es Vespa Soul. Una tienda de alquiler de bicicletas y motos. Diego, el propietario, est¨¢ contento con la ubicaci¨®n. ¡°Aqu¨ª, un local de unos 200 metros cuesta 1.500 euros mensuales y en cambio, en ronda Sant Pere, puede duplicarse el precio¡±. Asegura que ya no tiene sentido que los comercios de la zona se dediquen a la venta al por mayor cuando existen pol¨ªgonos industriales. Para Diego, la calle est¨¢ en un lugar estrat¨¦gico entre plaza Catalu?a y Arc de Triomf, y tiene todo lo necesario para convertirse en un polo de atracci¨®n tur¨ªstica.
Raimundo se autodenomina uno de los ¡°abuelos¡± del lugar. Su tienda es 10xDiez. ¡°Que se vayan los chinos es una nueva ruina. La gente compra cuando tienen variedad para ver, mirar y tocar, si quedamos tres no vendr¨¢ nadie¡±, lamenta.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.