Embrujados por Lang Lang

Nada ni nadie pudo romper la concentraci¨®n de Lang Lang en su deb¨²t, el jueves, en el Festival Castell de Peralada (Girona). Ni el calor sofocante, ni los mosquitos y los grillos, ni el crotorar de las cig¨¹e?as, ni las toses y el ruido de abanicos, m¨®viles y c¨¢maras le hicieron perder la calma. Sonriente, relajado y feliz, el famoso pianista chino conquist¨® al p¨²blico en la fascinante y at¨ªpica inauguracion de la 30? edici¨®n del festival ampurdan¨¦s. Fascinante por el virtuosismo y el lirismo de Lang Lang; at¨ªpica porque nunca antes un pianista cl¨¢sico hab¨ªa ofrecido un recital en solitario en el enorme auditorio de los jardines del castillo. La sofisticada amplificaci¨®n jug¨® un papel clave en su arrollador ¨¦xito.

Encerraba muchos riesgos la elecci¨®n de un pianista para inagurar un festival que tiene en la ¨®pera y el culto a las voces su se?a de identidad. La opci¨®n m¨¢s l¨®gica era contratar una gran estrella de la ¨®pera, y de hecho llevan tiempo intentanto seducir a la soprano rusa Anna Netrebko; no pudo ser y, en lugar de una diva de la l¨ªrica, apostaron por el divo del piano m¨¢s medi¨¢tico del mundo. Y al final acertaron.

El ambiente inaugural era el de siempre en Peralada, con un p¨²blico variopinto que llen¨® el auditorio- el aforo es de 1.800 localidades- y en el palco rostros conocidos del mundo cultural, empresarial, social y pol¨ªtico; Carme Forcadell, presidenta del Parlament de Catalunya, dos consellers, Jordi Baiget (Empresa) y Santi Vila (Cultura) y Jos¨¦ Montilla, expresident de la Generalitat, encabezaban la representaci¨®n institucional: y entre los invitados no falt¨® Chen Yanseng, presidente del RCD Espanyol.

El mayor temor ten¨ªa mucho que ver con la ac¨²stica de un recinto al aire libre, opci¨®n siempre temeraria para un instrumentista en solitario. Se impon¨ªa, pues, alg¨²n tipo de amplificaci¨®n, y acertaron al escoger un sofisticado sistema t¨¦cnico que, a trav¨¦s de dos pantallas, proyect¨® el sonido del piano en el recinto sin distorsionar la calidad y naturalidad del sonido. Dos grandes pantallas, situadas, a cada lado del escenario, dieron protagonismo a los ¨¢giles dedos del solista.

El resto fue cosa de Lang Lang, que derroch¨® naturalidad, simpat¨ªa y talento. Y, como el arte no est¨¢ re?ido con el negocio, present¨® en Peralada el mismo programa que ha grabado en su ¨²ltimo y sensacional disco: Las estaciones, de Chaikovski, y los cuatro Scherzi de Chopin, obras que pasea en sus giras.

Desconocida por el gran p¨²blico, pero muy apreciadas por los forofos del compositor ruso, la colecci¨®n de 12 deliciosas miniaturas de Chaikovski evoca las atm¨®sferas de los meses del a?o con sutiles y delicados recursos pian¨ªsticos. Lang Lang hizo maravillas, con una articulaci¨®n, una claridad de planos y un abanico de colores prodigiosos. Entre los momentos ¨²nicos, una Barcarola (Junio) que llen¨® de magia sonora la noche ampurdanesa.

La temperatura pian¨ªstica se dispar¨® con Chopin. El control de los contrastes din¨¢micos y la transparencia del sonido se aliaron en un discurso po¨¦tico y musical de gran virtuosismo que embruj¨® al p¨²blico; en algunos momentos, se pudo disfrutar una atm¨®sfera de silencio y recogimiento poco habitual en un escenario al aire libre.

Dos piezas con encanto de Manuel Ponce y Ernesto Lecuona y una trepidante Marcha turca, de Mozart, en la que parec¨ªan volar los dedos y el cuerpo de Lang Lang, pusieron punto final a una velada que acab¨® con el p¨²blico en pie.

Lang Lang, piano.

Obras de Chaikovski y Chopin.

Festival de Peralada. Auditori Parc del Castell.

Peralada, 7 de julio.