El juez procesa a Granados por el chivatazo que le dio un guardia civil

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha acordado el procesamiento de Francisco Granados, del guardia civil Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez Talamino y del exasesor de la Comunidad de Madrid Jos¨¦ Luis Caro por el soplo que alert¨® al exconsejero madrile?o de que la UCO estaba investigando a su socio David Marjaliza.

En un auto de transformaci¨®n en procedimiento abreviado, el titular del Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 6 de la Audiencia Nacional cierra la investigaci¨®n de la "pieza 1 Talamino" de P¨²nica relativa a ese chivatazo -la causa consta de 14 piezas- y propone juzgar a los dos agentes por el delito de revelaci¨®n de secretos y a Granados por aprovechamiento de revelaci¨®n de secreto. Ahora, el magistrado da traslado a las partes para que en el plazo de diez d¨ªas formulen sus escritos de defensa y acusaci¨®n o bien soliciten el sobreseimiento de la causa.

Seg¨²n el auto, ha quedado acreditado que Talamino "ha faltado al deber de sigilo y discreci¨®n que le imponen los deberes de su cargo y que con su actuaci¨®n y el indispensable apoyo de Caro Vinagre ha causado un grave da?o para la causa p¨²blica, al poner en conocimiento y a trav¨¦s de ese cooperador necesario, de uno de los principales investigados, Granados, determinadas medidas policiales que provocaron una reacci¨®n inmediata por aquellos".

Dichas medidas, continua el escrito, "pusieron en serio riesgo la investigaci¨®n, obligando a retirar determinadas medidas operativas y reduciendo la eficacia de otras". "El implicado que lo revela lo conoce por raz¨®n de su oficio (policial), el segundo como cooperador necesario en delito especial de otro y la insistencia en diversos episodios - descartando que sea una indiscreta revelaci¨®n puntual productor del alcohol- evidencia el ¨¢nimo de desvelar lo prohibido en el prop¨®sito de ayudar a los afectados por la investigaci¨®n -los vigilados- para que adoptasen medidas que contrarrestasen la investigaci¨®n penal", a?ade.

En cuanto a Granados, explica que "no solo se entera por obra de Talamino de que puede estar siendo investigado en un asunto delictivo, como en el caso actual, sino que adem¨¢s insiste en recabar m¨¢s informaci¨®n a trav¨¦s de Caro".

Velasco relata en el auto c¨®mo Talamino particip¨® en la instalaci¨®n por orden de la UCO de una c¨¢mara oculta en la puerta del despacho de Marjaliza para vigilar la entrada de "pol¨ªticos, empresarios, funcionarios y colaboradores" que celebraban all¨ª "reuniones de trascendencia para la investigaci¨®n".

Al d¨ªa siguiente de instalarla, el 6 de septiembre de 2014, se detect¨® un llamada entre Granados y Caro Vinagre, en la que ¨¦ste le comentaba que la noche anterior un guardia civil le dio una informaci¨®n que "le son¨® a advertencia" y mencion¨® a la UCO.

M¨¢s tarde, el exconsejero madrile?o avis¨® a Marjaliza de que uno de la UCO hab¨ªa contado que "estaban haciendo cosas en la puerta" de su oficina, por lo que ¨¦ste llam¨® a su secretaria para avisarle.

Esta secuencia de llamadas, indica el juez, supuso que nuevos objetivos de la operaci¨®n conocieran "la existencia de una posible investigaci¨®n" lo que puso "en serio peligro el ¨¦xito de las pesquisas" y de hecho la c¨¢mara oculta tuvo que ser retirada.

Granados adem¨¢s hizo b¨²squedas en internet para comprobar a qu¨¦ se dedica la UCO y "una simple consulta telem¨¢tica permite ver que dicho grupo se dedica a la investigaci¨®n de casos de corrupci¨®n", apunta Velasco.

"La reacci¨®n de Granados se deduce", dice el juez, de esta afirmaci¨®n en una de sus conversaciones telef¨®nicas: "Y eso tiene una pinta mal¨ªsima, me he met¨ªo yo (se entiende por el contexto que en internet), y eso tiene una pintaaa".

A ra¨ªz de ese soplo, los objetivos de la investigaci¨®n, especialmente Marjaliza, su secretaria, Granados, "y en menor medida" el por entonces alcalde de Valedemoro Jos¨¦ Carlos Boza Lechuga, "comenzaron a adoptar unas medidas de seguridad adicionales, que obligaron a disminuir su frecuencia de llamadas y el contenido de las mismas", explica Velasco, quien sin embargo solo considera a Granados beneficiario de la revelaci¨®n de ese secreto.