Los polic¨ªas salen en defensa del agente que atropell¨® a una anciana

¡°Afligido, apenado y desolado¡±, ese es el estado de ¨¢nimo que describen los compa?eros del agente de la Polic¨ªa Local de Lugo, que arroll¨® el lunes a una octogenaria, en la r¨²a do Freixo una calle casi ciega que une la r¨²a Pontevedra con Cami?o Real, y que provoc¨® la muerte de la anciana que fue enterrada ayer.

El accidente se produc¨ªa el lunes sobre las dos de la tarde, pero hasta el martes no se inform¨® por parte del concello de Lugo a trav¨¦s de un comunicado y ayer con la comparecencia del portavoz municipal, Miguel Fern¨¢ndez, que confirmaba que el polic¨ªa se encuentra de ¡°baja laboral¡±. Incluso apunt¨® que en su desconsuelo lleg¨® a decir que hubiera sido mejor haber sido ¨¦l la v¨ªctima.

Y es que el infortunio y la casualidad hicieron el resto. Luego de un atestado en el lugar, una vez finalizado regresaban al cuartelillo, y dando marcha atr¨¢s arrollaban a la anciana. ¡°?l estaba en el coche, mir¨® en los espejos para salir. Hay unas diligencias en marcha, en este caso son los compa?eros de la Guardia Civil (de tr¨¢fico) los que llevan el atestado para ser la cosa m¨¢s neutral¡±, ha detallado Jos¨¦ Reboredo, el representante de Comisiones Obreras en la polic¨ªa local.

Es el juzgado n¨²mero dos de Lugo, que lleva Sandra Pi?eiro, el que instruye el siniestro. La guardia civil que ha abierto diligencias por un presunto homicidio por imprudencia ya ha trasladado un adelanto del atestado, a falta de que se remita el informe t¨¦cnico donde se incluir¨¢ la declaraci¨®n de una testigo que ser¨¢ ¡°clave¡± en la resoluci¨®n del caso.

Fuentes de la investigaci¨®n apuntan a una ¡°fatalidad¡± y deslizan que probablemente la causa se dirima por la v¨ªa civil. Estas mismas fuentes consideran que si el juez determina que la imprudencia es leve ¡°los hechos no son delito y quedar¨ªa abierta la reclamaci¨®n v¨ªa civil, respondiendo en este caso el seguro correspondiente de las indemnizaciones que se fijen por acuerdo previo o bien en juicio¡±.

¡°No vio a la se?ora para nada. Un mal momento, es un accidente que le puede pasar a cualquiera¡±, proclama Reboredo que describe a su compa?ero, responsable del accidente, como un agente que ¡°lleva 26 a?os en el cuerpo, es una persona seria, extravertida y constante en el trabajo¡±. ¡°No se lo merece¡±, dice resignado.

Desde la secci¨®n sindical de Comisiones Obreras en el concello de Lugo se ha trasladado todo el respaldo para el polic¨ªa, criticando la gesti¨®n de comunicaci¨®n que hizo el ayuntamiento, que hasta treinta horas despu¨¦s no inform¨® del accidente.

La desgracia se ha cebado con esta familia, la de Carmen Lugilde, a quien hac¨ªa un par de meses le fallec¨ªa una hija de c¨¢ncer. Ayer era enterrada la v¨ªctima del atropello. Al funeral asisti¨® el jefe de la polic¨ªa local, en la parroquia de San Antonio, muy cerca de donde se produjo el mortal siniestro. Son dos familias las que ahora lloran la muerte de Carmen, que padec¨ªa de ¡°movilidad reducida¡±. Aunque no est¨¢ nada cerrado, otra hip¨®tesis que todav¨ªa no se ha descartado aunque resulte dif¨ªcil de asumir es que la mujer yaciera ya en el suelo, sobre el paso de peatones, cuando arranc¨® marcha atr¨¢s el furg¨®n de atestados.

¡°Est¨¢ afectado porqu¨¦ para cualquiera es un plato de mal gusto lo que pas¨® y m¨¢s para un agente que se encontraba de servicio. Solo fue un fat¨ªdico accidente, un mal momento¡±, repasa Reboredo de Comisiones Obreras que no para de repetir que ¡°no se lo merece¡±, esa angustia que marca desde el lunes de d¨ªa a d¨ªa del responsable del siniestro.