El derecho a la vivienda: recuperando el tiempo perdido

Hace tres meses el Tribunal Constitucional recort¨® art¨ªculos clave de la ley 24/2015 contra la emergencia habitacional y la pobreza energ¨¦tica; es decir recort¨® derechos y libertades. En la cumbre del 29 de julio, celebrada en el Palau de la Generalitat, se ha consensuado el anteproyecto de ley que afronta problemas similares con t¨¦cnicas jur¨ªdicas m¨¢s dif¨ªciles de impugnar.

No olvidemos que la Ley ?mnibus del gobierno de Artur Mas recort¨® la Ley del Derecho a la Vivienda de Catalu?a del 2007, en conceptos como la expropiaci¨®n del uso de las viviendas vac¨ªas, que hoy se recupera.

La actual situaci¨®n de emergencia, con la nefasta herencia de la burbuja inmobiliaria y los abusos de las hipotecas, evidencia las d¨¦cadas de retraso que llevamos en relaci¨®n a los est¨¢ndares europeos, en cuanto a legislaci¨®n y a parque de alquiler p¨²blico.

Una emergencia que se va ampliando y que es dif¨ªcil de resolver desde los municipios que la sufren. La hist¨®rica falta de voluntad pol¨ªtica ha hecho que heredemos un exiguo parque de vivienda protegida para afrontar las muchas caras del problema: dificultades para pagar el alquiler en un momento de bajos salarios, unidades de convivencia que han perdido vivienda y ahorros; infravivienda, asentamientos y personas sin techo; familias que sufren pobreza energ¨¦tica y ocupaciones a precario utilizando instalaciones con riesgo.

Al retraso ha contribuido la falta de previsi¨®n y de exigencia en mantener la calificaci¨®n p¨²blica de la vivienda. El anterior mandato en Barcelona fue tan cortoplacista que redujo la producci¨®n de vivienda p¨²blica nueva al m¨ªnimo, cuando la mejor manera de intervenir es poseyendo pisos p¨²blicos: vivienda de alquiler asequible, por debajo del precio de mercado, y vivienda de alquiler social, con ayudas expl¨ªcitas. En Barcelona disponemos de 6.500 viviendas p¨²blicas que, unidas a las del tercer sector, suman 10.500, lo que representa s¨®lo el 1,5% de todo el parque. En las ¨²ltimas d¨¦cadas se han ido vendiendo la mayor¨ªa de las viviendas de promoci¨®n p¨²blica, unas 25.000. El Plan por el Derecho a la Vivienda en Barcelona (2016-2026) propone doblar la cantidad de vivienda asequible para intentar acercarnos a los est¨¢ndares europeos.

Un reto al que se suma la incorporaci¨®n de viviendas vac¨ªas, de grandes y peque?os propietarios; con unos pactando cesiones y compras, y si no, con sanciones; con los otros, sum¨¢ndolas a la bolsa de alquiler p¨²blico; la penalizaci¨®n de la competencia desleal de los apartamentos tur¨ªsticos ilegales; y el control de los precios del alquiler, tal como hacen ciudades europeas y norteamericanas, poniendo l¨ªmites a los incrementos y penalizando los precios abusivos.

El anteproyecto de ley es un paso necesario pero a¨²n insuficiente: ha de regular el incremento de los alquileres, ampliar su ¨¢mbito de intervenci¨®n, ser m¨¢s vers¨¢til para situaciones diversas y tener mayor dotaci¨®n econ¨®mica. Y en un futuro pr¨®ximo se han de actualizar los derechos y deberes de propietarios e inquilinos, dignificando el mercado de alquiler.

Josep Maria Montaner, regidor de Vivienda y del distrito de Sant Mart¨ª del Ayuntamiento de Barcelona.