Cuatro a?os de prisi¨®n para Miguel ?ngel Flores por la tragedia del Madrid Arena

Con el ¨¢nimo de ¡°conseguir un mayor beneficio econ¨®mico¡±, Miguel ?ngel Flores vendi¨® 16.492 entradas para la fiesta de Halloween que se celebr¨® el 1 de noviembre de 2012 en el Madrid Arena, en la Casa de Campo de la capital, un pabell¨®n que ten¨ªa un aforo m¨¢ximo de 10.620 personas; finalmente, llegaron a juntarse dentro del recinto, al menos, 16.605 personas. Esa fue la primera de una serie de imprudencias y acciones y omisiones con las que infringieron los ¡°deberes de cuidado¡± que acabaron en una avalancha de personas, en la que murieron aplastadas cinco j¨®venes de entre 17 y 20 a?os y otra treintena sufri¨® heridas.

Bajo esos argumentos, Flores, m¨¢ximo responsable de Diviertt, la promotora de la fiesta, ha sido condenado por las magistradas de Secci¨®n S¨¦ptima de la Audiencia Provincial de Madrid a cuatro a?os de prisi¨®n por cinco delitos de homicidio por imprudencia grave y otros 14 de lesiones. La sentencia, conocida hoy, considera que Flores y otros responsables directos de la organizaci¨®n y seguridad del evento ¡°no solo no evitaron riesgos, sino que los crearon y los permitieron¡±. Los crearon con un montaje que no atend¨ªa a las indicaciones aprobadas, por el cierre de vomitorios para proteger las instalaciones utilizadas por la organizaci¨®n y, finalmente, por la apertura de puertas de emergencia para facilitar el acceso a la gran cantidad de j¨®venes que se iba agolpando en la entrada a medida que se acercaba la actuaci¨®n estelar de la noche, del DJ Steve Aoki.

M¨¢s informaci¨®n

Las cinco v¨ªctimas del Madrid Arena

Diez claves de una noche de imprudencia temeraria

As¨ª, esa ¡°conducta gravemente imprudente¡± culmin¨® pasadas las tres y media de la madrugada en una aglomeraci¨®n de personas que intentaban salir de la pista del escenario central, agobiadas por la falta de espacio, pero chocaban con las que trataban de entrar. Un horrible suceso en el que murieron aplastadas esa misma noche Cristina Arce y Katia Esteban, mientras que Roc¨ªo O?a, Bel¨¦n Langdon y Teresa Alonso lo har¨ªan en los dos d¨ªas posteriores.

Pero si la avaricia desencaden¨® todo, los sonrojantes fallos de los encargados de seguridad en el pabell¨®n, de la organizaci¨®n del evento y la gesti¨®n que han quedado en evidencia durante el macrojuicio terminaron de dar forma a la tragedia. As¨ª, el resto de los acusados ¡ªresponsables de la promotora de la fiesta (Diviertt), de la empresa p¨²blica due?a del Madrid Arena (Madridec), de las subcontratadas para las labores de seguridad (Seguriber y Kontrol 34) y el servicio m¨¦dico, y de la Polic¨ªa Municipal¡ª han sufrido distinta suerte: aparte de Flores ¡ªque ya ha anunciado que recurrir¨¢ la sentencia al Tribunal Supremo¡ª, otros seis acusados han sido condenados y otros ocho han sido absueltos.

A tres a?os de c¨¢rcel ha sido condenado el que era responsable de Madridec, Francisco del Amo, y el director general de la firma Diviertt, Santiago Rojo. A Miguel ?ngel Morcillo, tambi¨¦n de Diviertt, y a Carlos Manzanares, de Kontrol 34, se les impone una pena de dos a?os, seis meses y un d¨ªa de prisi¨®n.

Multas y absoluciones

Las magistradas consideran tambi¨¦n que Juan Jos¨¦ Paris y Ra¨²l Monterde, coordinadores de la otra empresa que deb¨ªa cuidar de la seguridad (Seguriber), son responsables en menor grado y les impone una multa de 3.600 euros (10 euros diarios 12 meses). El resto de los acusados en este macrojuicio que arranc¨® el pasado 12 de enero han sido absueltos.

Las absoluciones alcanzan a los doctores Sim¨®n Vi?als y a su hijo Carlos. ¡°Pese a entender acreditada su negligente actuaci¨®n cuando las v¨ªctimas fueron llevadas al botiqu¨ªn para que las asistieran¡±, dice el fallo, no est¨¢ probado que si hubieran actuado correctamente podr¨ªan haberlas salvado, dado el tiempo que las v¨ªctimas estuvieron atrapadas en el vomitorio.

La actuaci¨®n de Sim¨®n Vi?als, exconcejal de Madrid por el PP y fundador del Samur, de 77 a?os en el momento de la tragedia, en una ¡°supuesta enfermer¨ªa¡± que carec¨ªa de materiales b¨¢sicos, y con un equipo de solo siete personas (incluido ¨¦l y un auxiliar de enfermer¨ªa de 81 a?os), ha sido muy pol¨¦mica. El propio Vi?als admiti¨® haber previsto una asistencia mucho menor, para unas 6.000 personas, y en el caos que sigui¨® a la avalancha, el relato de varios testigos ha puesto en duda la capacidad y preparaci¨®n de Vi?als para atender a las v¨ªctimas.

De hecho, esta absoluci¨®n ¡°es lo m¨¢s duro; a las familias les va a doler¡±, ha dicho a Efe Gerardo Viada, abogado de la familia de una de las v¨ªctimas, Katia Esteban. Viada a?adi¨® que, por lo dem¨¢s, han sido ¡°las condenas esperadas¡±.

En ese sentido, el fiscal jefe de Madrid, Jos¨¦ Javier Polo Rodr¨ªguez, se ha declarado satisfecho con la sentencia. ¡°Hemos conseguido una condena penal y una civil que se acerca mucho a la aspiraci¨®n de justicia que ten¨ªa el ministerio fiscal¡±. Y ha insistido en la parte civil: ¡°Todas las entidades que se ped¨ªan como responsables civiles han sido condenadas [entre ellas, el Ayuntamiento de Madrid] y tambi¨¦n las compa?¨ªas de seguros como responsables de seguros¡±.

Las familias de las v¨ªctimas recibir¨¢n indemnizaciones en torno a los 350.000 euros por cada una de las fallecidas y los lesionados tambi¨¦n cobrar¨¢n en proporci¨®n a las lesiones y secuelas que padecieron. La madre de Cristina Arce, Isabel de la Fuente, critic¨® la sentencia. Dijo que le parec¨ªa ¡°un insulto y una falta de respeto a las v¨ªctimas¡±, y asegur¨® que se reunir¨¢ con sus abogados para saber c¨®mo proceder. ¡°El Ayuntamiento se comporta igual que el anterior. En el tema de la licencia [del Madrid Arena] ha pasado. [El edificio] estar¨¢ m¨¢s controlado, pero estructuralmente no cumple la normativa¡±.

Cuatro a?os despu¨¦s

Termina con este fallo, casi cuatro a?os despu¨¦s de la tragedia, un juicio que arranc¨® el pasado 12 de enero y durante el cual se han entremezclado los relatos escalofriantes de los j¨®venes que se vieron atrapados en la avalancha ¡ªincluido el de una muchacha que escuch¨®, medio ahogada entre una mara?a de piernas, las ¨²ltimas palabras de sus amigas¡ª con las acusaciones cruzadas, procedentes del hiperpoblado banquillo de los acusados, que trataban de cargarse las culpas entre s¨ª: los abogados de Flores a los due?os municipales del edificio; estos a la empresa Kontrol 34; qui¨¦n asegur¨® a su vez que aquella noche solo aport¨® personal, pero que la seguridad depend¨ªa ¨²nicamente de Seguriber; los letrados de los sanitarios, por su parte, llegaron a se?alar al Samur y a la Delegaci¨®n del Gobierno en Madrid por dar el visto bueno a la apertura de puertas del pabell¨®n.

Ning¨²n responsable pol¨ªtico del Ayuntamiento se ha visto obligado a sentarse en el banquillo de los acusados. La tragedia, cuya gesti¨®n supuso un enorme coste de imagen a Ana Botella (PP), por entonces alcaldesa de Madrid,? le cost¨® el puesto a Pedro Calvo, que dimiti¨® de su cargo de delegado de Econom¨ªa y portavoz municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de la capital tras ser imputado por el juez que empez¨® a investigar el incidente; aunque, finalmente, no fue acusado de nada.