Entre ciervos y croquetas

1. La Tercera Taberna. Cada noche, salgo del teatro de La Comedia por la puerta de artistas. Apenas avanzo tres metros y all¨ª est¨¢n Moni y Maite, que me reciben con un beso y un abrazo y, antes de que lo pida, ya me han servido el vino blanco con una tapa maravillosa. Es un fant¨¢stico lugar de reuni¨®n con mis compa?eros, con la gente que viene a verte al teatro. La comida es incre¨ªble. Las croquetas de pimiento rojo te cambiar¨¢n la vida. (N¨²?ez de Arce, 3)

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2. Librer¨ªa ?thaca. Ese olor a libros que se respira. Encuentras libros raros, ediciones muy antiguas, ejemplares dif¨ªciles de encontrar, como una recopilaci¨®n de ep¨ªstolas de Juan Ram¨®n Jim¨¦nez. Y, adem¨¢s, el due?o siempre me regala un caramelo.(Hermosilla 132)

3. Restaurante Ciao. Nunca hubiera imaginado que el mejor restaurante italiano de Madrid se camuflara en un centro comercial. Su decoraci¨®n es fant¨¢stica. Nunca miro la carta. Salvatore, el due?o, elige por m¨ª, y siempre acierta. (Centro comercial El Coronado. Calle Andr¨¦s Segovia s/n. Las Rozas)

4. Teatro del Barrio. Es de esas salas en las que no tienes que mirar la programaci¨®n. Vayas cuando vayas, ser¨¢ interesante. El minuto del payaso, de Luis Bermejo, es la ¨²ltima maravilla que he visto. Siempre hay actividades instructivas y edificantes... ?Y noche de swing!. Admiro la filosof¨ªa de ese lugar. (Zurita, 20)

5. La Pedriza. Suelo ir los lunes, que es mi d¨ªa libre, lo cual es un privilegio porque apenas hay nadie. El oto?o y el invierno son mis estaciones favoritas y me hace ilusi¨®n ponerme el forro polar. Pinos, alisios, arces, casta?os, avellanos, servales... El d¨ªa que se me cruzaron cuatro ciervos en el camino, fui feliz. (Manzanares el Real)

6. La Corseter¨ªa Nuevo Teatro Fronterizo. El centro de investigaci¨®n teatral m¨¢s arriesgado de Madrid. Al mando, mi adorado maestro Jos¨¦ Sanchis Sinisterra. Los talleres de escritura hacen emerger al autor que todos llevamos dentro.Teatro humanista, teatro cient¨ªfico, teatro apasionado. All¨ª siempre huele a caf¨¦. (Calle de la Cabeza, 8)

7. El Junco. A pesar de que no soy una gran frecuentadora de Malasa?a y alrededores (no me manejo muy bien en zonas de mucho trasiego), me encanta ir a las sesiones de jazz de este lugar. Lo recuerdo tambi¨¦n como un sitio ideal para besarse.(Plaza de Santa B¨¢rbara, 10)

8. Bar del Teatro Espa?ol. Quedar media horita antes de la funci¨®n para tomar un t¨¦ en una de esas mesas de m¨¢rmol. Los recuerdos de Lorca o Margarita Xirgu flotan en la estancia. Despu¨¦s de la funci¨®n en el teatro, vuelves a tomar algo, comentas las sensaciones de lo que viste y siempre te cruzas con alg¨²n compa?ero al que s¨ª te apetece saludar. El Teatro Espa?ol es mi teatro favorito y su ambig¨² es una cita ineludible. (Pr¨ªncipe 25)

9. CaixaForum Madrid. Me gusta ir sola a las exposiciones. La sensaci¨®n de dejar a un lado el colorido jard¨ªn vertical de la calle y subir esas hermosas y enormes escaleras. La exposici¨®n sobre Georges M¨¦li¨¨s se me qued¨® en la retina para siempre. (Paseo del Prado, 36)

10. Museo del Prado. Cualquier ma?ana entre semana, si es posible. Las pinturas negras de Goya no dejan de impactarme cada vez que las vuelvo a visitar... Y Las Meninas... Aunque s¨®lo fuera por Las Meninas.