Unicef produce un documental sobre los campos de refugiados en Irak
El filme, conducido por Josep Cun¨ª, se emite el domingo en 8TV
?Unicef Catalunya est¨¢ en plena campa?a para recaudar fondos para los ni?os que sufren situaciones de emergencia. Y una de las emergencias m¨¢s dram¨¢ticas se vive con los desplazados por la guerra de Siria y de los territorios donde Estado Isl¨¢mico ha implantado el terror. Unicef le propuso al periodista Josep Cun¨ª que les ayudara. Y Cun¨ª acept¨® realizar un documental, que, desde su propia mirada, diera a conocer una tarea tan monumental como desconocida: acoger este enorme ¨¦xodo. El filme, producido por Unicef, se titula Els innocents de les guerres. Fueron, explica el periodista, cinco d¨ªas en Irak el pasado mes de octubre y visitaron cuatro campos. Instalaciones como las de Debaga, pensadas para 5.000 refugiados y que ha recibido m¨¢s de 35.000.
?Algunos campos que se abrieron provisionalmente para dar una salida a un problema humanitario se est¨¢n convirtiendo en ciudades-chabolas donde Unicef procura a sus habitantes el cobijo, la comida y la escuela a los menores. ¡°Adem¨¢s del drama personal lo m¨¢s terrible es que no parece que haya soluci¨®n. Los sirios no saben a ciencia cierta de qu¨¦ guerra huyen. Es una situaci¨®n que corre el peligro de enquistarse. Ya lo est¨¢¡±. En algunas de esas chabolas se ven parab¨®licas, y el f¨²tbol, con chavales que llevan la camiseta del Madrid o del Bar?a, tambi¨¦n ha llegado a estos lugares. ¡°Eso s¨ª, juegan a f¨²tbol descalzos y con piedras¡±.
En Irak, seg¨²n datos de Unicef, 4,7 millones de ni?os necesitan asistencia humanitaria urgente. Una atenci¨®n que reciben los que est¨¢n en estos campos, pero de la que carecen otras familias que prefieren refugiarse en edificios abandonados a medio construir. Eso pasa en Irbil, la capital del Kurdist¨¢n iraqu¨ª, y se ve en el documental. Aunque parezca impensable, en un determinado momento, ¡°hubo una burbuja inmobiliaria, pero la evoluci¨®n de la guerra y el terrorismo isl¨¢mico lo par¨® nuevamente todo y solo queda el esqueleto de varios edificios que iban a ser la nueva Irbil¡±. En esta osamenta de cemento, sin habitaciones, viven las familias que, dicen tienen el permiso del propietario a cambio de vigilarle la propiedad. ¡°Vigilar qu¨¦¡±, se pregunta Cun¨ª, ¡°si no hay nada. He llegado a pensar que alguno de esos propietarios les han cobrado un ?para dejarles estar entre ruinas¡±. La gente de Unicef los visita y controla, pero no puede obligarlos a entrar en un campo. Una entrada que, por motivos de seguridad, al propio Cun¨ª le parece la entrada a un campo de concentraci¨®n. Los hombres de las familias son separados y encerrados hasta que se verifica su verdadera identidad para evitar la infiltraci¨®n de terroristas.
Los ni?os juegan al f¨²tbol, pero descalzos y con piedras
Los grandes protagonistas del documental son los ni?os, jugando, en la escuela, con sus padres. ¡°Est¨¢n atendidos, pero arrastran el trauma de la guerra. Hay violencia en sus juegos. Juegan a la guerra!. Un d¨ªa hice la foto de un ni?o que nos estuvo siguiendo hora y media y en todo este tiempo fue imposible verle sonre¨ªr¡±.
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