Cuando la m¨²sica cl¨¢sica sale de un bote de lat¨®n

¡°Prefiero que te equivoques ahora que luego en el concierto¡±. Fabio Ch¨¢vez, director de la orquesta de Cateura, corrige a uno de los chavales durante el ensayo previo al concierto que dieron ayer en el Teatro Real. Ensayan una y otra vez Tambores de Guerra, de Manuel Carrasco, en una peque?a sala de un hotel del centro de la capital, una de las canciones que tocaron junto al m¨²sico onubense. Los chicos visten de manera casual y descoordinada, propia de su edad. Algunos bostezan entre parada y parada. Pero pocos se desconcentran o hacen chascarrillos. Por la noche actuaron para 1.700 personas con instrumentos construidos con desechos reciclados. M¨²sica celestial que surge de la basura.

La m¨²sica, una de las formas de arte m¨¢s pura, germin¨® hace diez a?os entre los desechos y la basura del vertedero de Asunci¨®n, capital de Paraguay. Concretamente en el gigantesco basurero de Cateura, en el barrio de Ba?ado Sur, uno de los m¨¢s pobres de la ciudad. La Orquesta de Instrumentos Reciclados de este suburbio est¨¢ formada por 22 m¨²sicos de entre 10 y 23 a?os. El conjunto se instruye en una escuela que cuenta con 30 profesores y 300 ni?os en riesgo de exclusi¨®n social. El centro fue levantado por Favio Ch¨¢vez, m¨²sico y t¨¦cnico medioambiental paraguayo.

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Una oportunidad entre la basura

Instrumentos reciclados, el milagro de Cateura

Ch¨¢vez acudi¨® al vertedero para tratar de poner en marcha un sistema de reciclaje y servicio de selecci¨®n selectiva. Pero fracas¨®. Pero como m¨²sico, revirti¨® la situaci¨®n, y comenz¨® a dar clases a los ni?os del barrio. La idea de fusionar su conocimiento musical con su formaci¨®n medioambiental germin¨® pronto. Con el trabajo de un lutier comenzaron a construir instrumentos para fomentar el reciclaje. La escuela empez¨® a coger vuelo y hoy cuenta con una orquesta de 70 m¨²sicos que han actuado en m¨¢s de 20 pa¨ªses. Entre sus hitos, telonear a la banda estadounidense Metallica durante una gira por Latinoam¨¦rica o grabar un tema, todav¨ªa in¨¦dito, con el m¨ªtico Stevie Wonder.

El director de la orquesta es cr¨ªtico con la administraci¨®n de su pa¨ªs: ¡°Con estos ni?os hacemos el trabajo que ten¨ªan que hacer ellos. Y no tenemos ning¨²n tipo de apoyo¡±. El proyecto se financia mediante conciertos y cada a?o recaudan entre 100.000 y 150.000 euros que son repartidos en diferentes proyectos sociales y la propia escuela. ¡°Todas las realidades fueron alguna vez un sue?o¡±, concluye Ch¨¢vez. Ecoembes, organizaci¨®n medioambiental sin ¨¢nimo de lucro ha sido la encargada, con EL PA?S como colaborador, de traer al conjunto a Espa?a.

Juan Jos¨¦ Mart¨ªnez, con 23 a?os, es el mayor de los m¨²sicos que actuaron en el Real. Lleva cinco en el proyecto y entr¨® en la escuela a trav¨¦s de un amigo. Mart¨ªnez toca la trompeta y la guitarra el¨¦ctrica. Sujeta entre sus manos el llamativo instrumento de viento formado por tuber¨ªas. ¡°Tiene un sonido m¨¢s opaco, menos brillante que una trompeta de metal¡±, se?ala. Porque en la escuela tambi¨¦n tienen instrumentos normales donados por m¨²sicos y asociaciones de todo el mundo.

Este joven recuerda cuando fueron teloneros de la banda estadounidense Metallica durante la gira By Request que les llev¨® por siete pa¨ªses de Latinoam¨¦rica: ¡°Tocamos frente a 80.000 personas. Fue incre¨ªble¡±.