Mucho m¨¢s que fotograf¨ªas pintadas
La Fundaci¨®n Su?ol reivindica la obra de Dario Villalba organizando su primera muestra individual en Barcelona
Fue uno de los primeros en utilizar la fotograf¨ªa sobre soporte pict¨®rico all¨¢ por la d¨¦cada de 1970 y casi medio siglo m¨¢s tarde sus im¨¢genes emulsionadas, intervenidas y transformadas, conservan la misma vigencia de entonces. Se trata de Dario Villalba (San Sebasti¨¢n, 1939), uno de los artistas mejor representados en la colecci¨®n de la Fundaci¨®n Su?ol, que le dedica un amplia exposici¨®n, Resplandor seco, abierta hasta el 11 de marzo. Aunque parezca incre¨ªble es la primera presentaci¨®n individual en Catalu?a de un artista internacionalmente reconocido, como demuestra la reciente adquisici¨®n por parte de la prestigiosa la colecci¨®n Pinault de dos obras hist¨®ricas: el encapsulado Delincuente de 1973 y Corte de pelo II de 1996.
Fueron los encapsulados, retratos fotogr¨¢ficos intervenidos y encerrados en una burbuja de metacrilato cuya silueta sigue la forma bidimensional de su interior, que le encumbraron en la Bienal de Venecia de 1970 y curiosamente le valieron el Premio Internacional de Pintura de la XII Bienal de Sao Paulo en 1973. As¨ª que Jonas, un encapsulado de 1974 y su contrapunto de 1993, ambos realizados a partir de la misma foto, presiden idealmente el recorrido expositivo dise?ado por el propio artista con la complicidad del director de la Fundaci¨®n Su?ol, Sergi Aguilar, sin seguir un desarrollo cronol¨®gico, sino atendiendo la tem¨¢tica y el di¨¢logo entre las m¨¢s de 30 obras. ¡°En los a?os del boom de la fotograf¨ªa a trav¨¦s de la prensa, la publicitad y la proliferaci¨®n de las c¨¢maras dom¨¦sticas, Villalba detuvo la simple circulaci¨®n de im¨¢genes introduci¨¦ndolas en la pintura como una brecha¡±, asegura Aguilar.
Sin techos y j¨®venes marginales protagonizan un mundo en blanco y negro, lleno de sombras y matices. ¡°Villalba eleva sus personajes a la categor¨ªa de iconos sin caer nunca en la frialdad del arte pop, por lo que el propio Andy Warhol defini¨® su lenguaje pop soul, pop del alma¡±, indica Aguilar. Fue la respuesta de Villalba al pop americano, ya que estaba convencido de que no pod¨ªa darse arte pop en la Espa?a franquista, ajena al consumismo y la evoluci¨®n que experimentaba el resto del mundo. ¡°Estas opiniones le granjearon diversas cr¨ªticas y una relaci¨®n tensa con las vanguardias, que le llev¨® a sentirse exiliado en su propio pa¨ªs¡±, contin¨²a Aguilar, que desde la apertura de la fundaci¨®n en 2007 estableci¨® como uno de sus objetivos primordiales la revisi¨®n y puesta en valor de las m¨¢s de 1.200 obras del fondo reunido por el coleccionista Josep Su?ol.
Una pared est¨¢ enteramente recubierta de los que Villalba denomina Documentos b¨¢sicos, im¨¢genes y retratos, tambi¨¦n en color, captados durante sus viajes, sobretodo a Londres y Nueva York, que le sirven como archivo inagotable de rostros y fuentes de inspiraci¨®n. Son las fotos que Villalba ampl¨ªa, despedaza, dibuja, pinta y recorta, impresas casi siempre sobre tela, pero tambi¨¦n sobre cart¨®n y otros materiales. Premio Nacional de Artes Pl¨¢sticas en 1983, en sus obras m¨¢s recientes Villalba desplaza el foco hacia las formas abstractas de pieles y pictofotograf¨ªas de escenas acu¨¢ticas, tierra y cascotes, mientras no deja de recomponer y revitalizar las im¨¢genes de un pasado que contin¨²a absolutamente vigente.
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