El colectivo LGTB de la regi¨®n sufri¨® 239 ataques durante 2016
El principal problema al que se enfrenta la polic¨ªa es que las v¨ªctimas no denuncian
La regi¨®n madrile?a ha cerrado el a?o con 239 ataques al colectivo de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (LGTBI), seg¨²n los datos que maneja el Observatorio Madrile?o contra la LGTBfobia. Esto supone que se produce una agresi¨®n contra este colectivo cada d¨ªa y medio, lo que representa una cifra muy alta. El principal problema es que las v¨ªctimas de esta homofobia no suelen acudir a la comisar¨ªa a denunciar estos hechos, por temor a revelar su identidad sexual. Esto dificulta que la polic¨ªa pueda hacer un mapa de zonas m¨¢s peligrosas y trazar un perfil de los atacantes (edad, nacionalidad e ideolog¨ªas, entre otras).
El Observatorio Madrile?o contra la LGTBfobia comenz¨® a recopilar los datos de los ataques al colectivo cuando comenz¨® el a?o pasado, a ra¨ªz de una iniciativa de la asociaci¨®n Arc¨®poli, a la que se sumaron otros colectivos en defensa de este colectivo. Al ser tan reciente su creaci¨®n, no existe una base hist¨®rica que permita comprobar si estos ataques han crecido o, algo m¨¢s improbable, se mantienen. En 2014, los datos del Ministerio del Interior arrojaban que en la regi¨®n se registraron 12 denuncias por estos delitos. El a?o siguiente subieron hasta la treintena, lo que supone que las agresiones en 2016 se han multiplicado por ocho, si se comparan los datos del Ministerio y el Observatorio.
Algunos mandos policiales no creen en ese incremento de ocho veces. La realidad es que las campa?as de sensibilizaci¨®n y de que las v¨ªctimas denuncien est¨¢n teniendo sus primeros resultados. ¡°Ocurre lo mismo que con la violencia machista. Necesitamos saber lo que realmente ocurre para poner los medios y atajar este problema¡±, reconocen los mandos que ya empiezan a hablar de un ¡°fen¨®meno visible¡±.
Los datos de 2016 son hasta la fecha provisionales. Eso s¨ª, el vocal de Delitos de Arc¨®poli, Rub¨¦n L¨®pez, cree que no sufrir¨¢n ning¨²n incremento, ya que no han recibido ninguna denuncia del periodo navide?o. El mapa de los delitos hom¨®fobos destaca que la gran mayor¨ªa de las agresiones (181, tres de cada cuatro) se registran en la capital. Es en esta ciudad donde se hace m¨¢s visible este colectivo, mientras que en localidades m¨¢s peque?as los gais y lesbianas suelen pasar mucho m¨¢s inadvertidos. Sobre todo, para preservar su seguridad.
Los barrios lim¨ªtrofes a Chueca son, con diferencia, los que m¨¢s agresiones registran. El motivo suele ser que los hom¨®fobos aprovechan que los gais no ocultan su identidad sexual. Cuando se alejan de su barrio de referencia, en el que est¨¢n m¨¢s protegidos, son atacados. Muchos de estos atentados se producen no solo con insultos, sino que terminan en golpes y lesiones que muchas veces requieren el traslado a centros hospitalarios. En el propio Chueca, tambi¨¦n se han producido agresiones. Otros distritos en los que el Observatorio ha recibido denuncias son Moncloa, Salamanca, Retiro y Tetu¨¢n.
Dos tel¨¦fonos en b¨²squeda de ayuda
La asociaci¨®n de defensa del colectivo de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales Arc¨®poli tiene desde el pasado a?o un tel¨¦fono (618 547 166) que es atendido las 24 horas y que ayuda a las v¨ªctimas de delitos de odio. Los integrantes de esta asociaci¨®n las acompa?an a los centros sanitarios y a la comisar¨ªa.
La Comunidad de Madrid tambi¨¦n dispone de otro n¨²mero de tel¨¦fono (917 010 788) para las personas que sufran ataques hom¨®fobos. Este servicio est¨¢ formado por psic¨®logos, trabajadores sociales y abogados.
En caso de sufrir una agresi¨®n, lo primero es llamar a la polic¨ªa. Despu¨¦s, es preciso conseguir un parte de lesiones y recabar todas las pruebas del delito, como nombres de testigos, adem¨¢s de acudir a la comisar¨ªa para denunciar los hechos.
La Delegaci¨®n del Gobierno en Madrid?y la Jefatura Superior de Polic¨ªa han dado un car¨¢cter prioritario a este tipo de delitos. En especial, tras la reforma del C¨®digo Penal que ha recogido a trav¨¦s del art¨ªculo 510, que recoge penas de prisi¨®n de seis meses a dos a?os y multa de seis a 12 meses. En caso de que se produzcan lesiones, las condenas pueden llegar a ser mucho m¨¢s altas, en funci¨®n de la gravedad de las heridas y el tiempo que tarden en sanar. La incidencia en las poblaciones controladas por la Guardia Civil (todos los municipios, salvo los grandes de la periferia de Madrid) resulta mucho menor.
Uno de los problemas a los que se enfrentan los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado es la falta de denuncia por parte de las v¨ªctimas. Seg¨²n los datos que maneja el Observatorio Madrile?o tan solo 58 v¨ªctimas o casos de homofobia (un 24%) han terminado con una denuncia en comisar¨ªa o ante los juzgados de guardia. El mayor porcentaje se ha dado en el segundo semestre del a?o.
Finales de a?o
Si en los seis primeros meses de 2016, solo 17 casos terminaron en un procedimiento penal o en un atestado policial, la cifra ha subido hasta los 41 en los seis siguientes. ¡°El gran incremento se debe a que Polic¨ªa Municipal de Madrid ahora tambi¨¦n se especializa en el tema y que adem¨¢s se han denunciado muchas amenazas de muerte por internet¡±, reconoce Rub¨¦n L¨®pez.
En la Jefatura Superior de Polic¨ªa, el encargado de coordinar estos delitos es el comisario Jos¨¦ Ram¨®n Murillo, que siempre ha repetido que muchas veces las v¨ªctimas no saben siquiera que est¨¢n sufriendo un delito de odio, por lo que no acuden a comisar¨ªa: ¡°Adem¨¢s, estas personas prefieren mantener su intimidad o que se conozca su vulnerabilidad antes que denunciar¡±, a?ade. Las investigaciones las suelen realizar o las comisar¨ªas locales o los agentes del Grupo XXX de la Brigada Provincial de Informaci¨®n, con sede en Moratalaz.
Los varones, agresores y v¨ªctimas mayoritarias
El Observatorio Madrile?o contra la LGTBfobia ha descrito un perfil del agresor contra el colectivo de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (LGTBi). En su mayor¨ªa, corresponden a un var¨®n, que tiene menos de 35 a?os, de orientaci¨®n heterosexual. En general, no integran ninguna banda en particular. Solo en alg¨²n ataque, las v¨ªctimas han reconocido una vestimenta neonazi.
Los insultos, sobre todo al grito de ¡°maric¨®n¡±, las agresiones f¨ªsicas, las amenazas y el acoso son las agresiones m¨¢s frecuentes. En m¨¢s de una ocasi¨®n, se dan varias a la vez, en especial, cuando se mezclan los insultos y los golpes.
Las v¨ªctimas suelen ser personas j¨®venes, en su mayor¨ªa hombres (tres de cada cuatro) que van con sus parejas de la mano o que se est¨¢n dando un beso en un lugar p¨²blico (calle, plaza metro, autob¨²s o local).
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