En busca del p¨¢jaro desconocido
Un ornit¨®logo catal¨¢n tratar¨¢ de encontrar en un paraje remoto de China una nueva especie de ave
En el mundo hay a¨²n espacio para la aventura de altos vuelos. Y nunca mejor dicho cuando de lo que se trata es de dar en un paraje remoto de China con un p¨¢jaro desconocido todav¨ªa para la ciencia.
Una expedici¨®n internacional va a tratar de hallar la misteriosa ave en el aislado macizo de Hupingshan, en Hunan, donde hay rumores de su existencia. Uno de los tres ornit¨®logos que van a ir juntos en busca del innominado plum¨ªfero es un catal¨¢n, Jos¨¦ Luis Copete (Badalona, 1968), autor de diversos art¨ªculos en publicaciones cient¨ªficas y en la actualidad uno de los redactores del HBW Alive, la versi¨®n online y continuamente actualizada del monumental Handbook of the birds of the World que publica Lynx Edicions. Los otros dos miembros de la expedici¨®n, porteadores aparte, son el afamado sueco Per Alstr?m, experto, precisamente en taxonom¨ªa aviar y una de las estrellas del pasado Birding Festival del Delta del Ebro, y el ornit¨®logo franc¨¦s radicado en Shenzhen Jonathan Mart¨ªnez, especialista en cantos.
En la zona hay numerosos carn¨ªvoros: leopardo, pantera nebulosa y el irascible oso negro del Himalaya
La julesverniana aventura de tres ornit¨®logos en la China meridional se va a desarrollar en un ¨¢rea de entrada restringida por el Gobierno chino y en la que, para adobar la peripecia, hay presencia de numerosos carn¨ªvoros: leopardo, pantera nebulosa y el irascible oso negro del Himalaya, que cada a?o suele causar alguna desgracia durante la ¨¦poca de cr¨ªa, en primavera.
"Iremos en mayo, de acampada durante dos o tres semanas, tenemos dos objetivos, uno es tratar de resolver el enigma de ese p¨¢jaro que parece ser desconocido para la ciencia ", explica Copete acodado en un bar de Gr¨¤cia mientras conjura aves ex¨®ticas y aventuras, a ser posible, puntualiza, libres de osos malhumorados. ?C¨®mo es ese p¨¢jaro misterioso? "Se trata de un zootera que canta de noche y vuela en c¨ªrculos como una becada". ?? "Bien, para que lo entiendas, es, por lo que nos ha llegado, un tipo de zorzal de monta?a, de un tama?o del doble de un zorzal com¨²n y muy esquivo. Hasta donde sabemos podr¨ªa ser una especie no descrita a¨²n. Trataremos de capturarlo vivo y averiguar qu¨¦ es".
?Han pensado en un nombre para la nueva especie? Ha de ser una tentaci¨®n ponerle el de uno mismo, un pel¨ªn latinizado para disimular. "Es un poco pronto para pensar en un nombre, pero supongo que le pondr¨ªamos uno que tuviera que ver con el lugar en que se le encuentre".
Cuando se trata de especies no descritas, que en general suelen ser tener un numero escas¨ªsimo de individuos (pues sino ser¨ªan m¨¢s f¨¢cilmente conocidas), matar al ejemplar capturado (que por otro lado es un sistema infalible para saber que se trata, en efecto, de una especie desconocida) suele provocar pol¨¦mica. As¨ª sucedi¨®, recuerda Copete, con el famoso caso de Chris Filardi y el mart¨ªn pescador de las Salomon o moustached kingfisher, que solo se encuentra pr¨¢cticamente en Guadalcanal, que ya es sitio. "Dicha especie, rar¨ªsima, solo se conoc¨ªa por un ejemplar disecado, una hembra, en un museo, lo que provocaba las l¨®gicas dudas. Filardi, del American Museum of Natural History, fue hasta all¨ª, vio bastantes y calcul¨® que la densidad garantizaba que no pasaba nada si matabas uno. As¨ª que consigui¨® el macho que faltaba para completar la muestra del museo y convencer a los esc¨¦pticos de la existencia de la especie. ?Y se le mont¨® una tangana formidable en Internet! Sacrificar o no un p¨¢jaro en aras de la ciencia es toda una disyuntiva".
Por si acaso, ellos no matar¨¢n el innominado zorzal chino. "Le arrancaremos unas plumitas y le extraeremos sangre para un an¨¢lisis conclusivo de ADN. Luego lo dejaremos ir". Como veo a Copete apurar con deleite el caf¨¦ con leche declino preguntarle si tambi¨¦n le har¨¢n la preceptiva extracci¨®n de semen, una maniobra que se efect¨²a introduci¨¦ndole a la avecilla una pipeta en la cloaca y sorbiendo. Ajeno a la direcci¨®n de mis pensamientos, Copete contin¨²a: "No vamos a comprometer la supervivencia de la especie. A veces este tipo de p¨¢jaros nuevos los encuentras cuando casi ya no quedan".
"Le arrancaremos unas plumitas y le extraeremos sangre para un an¨¢lisis conclusivo de ADN. Luego lo dejaremos ir"
Es el caso de la perlita de Iquitos, que puede ser que ya est¨¦ extinguida y que descubri¨® para la ciencia el bi¨®logo leon¨¦s afincado en la Amazonia peruana desde 1983 Jos¨¦ ?lvarez Alonso, una leyenda viva de la ornitolog¨ªa. Precisamente, se?ala Copete, ?lvarez Alonso es uno de los pocos espa?oles que ha descubierto especies nuevas. "Al a?o se descubren en todo el mundo cinco o seis especies realmente nuevas. Ahora mismo hay una en Per¨² sin nombre, una especie de antbird, parecido a un ruise?or bastardo pero con colorines. Un tipo lo encontr¨® fortuitamente delante de sus binoculares".
El otro objetivo de la expedici¨®n a China, m¨¢s mundano, es atrapar mosquiteros. "Estamos escribiendo un libro sobre ellos, que publicar¨¢ Lynx. Vamos a estudiar particularmente a dos especies que hay en la zona e investigar si se ha producido hibridaci¨®n entre ellas". El libro les obligar¨¢ a viajar a otros lugares para estudiar distintos tipos de mosquiteros y resolver algunos enigmas que plantean. El asunto les va a emplear alrededor de cinco a?os.
No puedo dejar de preguntarle a Copete, con indisimulada envidia, si cree que ver¨¢n en Hupingshan la pantera nebulosa, criatura casi legendaria. "Es dif¨ªcil, es muy nocturna y arbor¨ªcola, pero ya sabes que el a?o pasado tuve suerte y vi muy bien el leopardo de las nieves en el Ladakh. A veces hay suerte". De momento, Copete, que no para, vuelve a participar este a?o en la competici¨®n internacional Champions of the Fly, un marat¨®n de identificaci¨®n de aves en Israel, el 28 de marzo, como integrante del equipo Zeiss Reservoir Birds compuesto por Daniel L¨®pez-Velasco, Ferran L¨®pez, Frances Kirchner (el propietario de la tienda de naturaleza Oryx y director del Birding Festiva) y ¨¦l mismo. En la anterior edici¨®n a la que concurrieron, los Reservoir Birds quedaron terceros pero esta vez, prev¨¦ ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil. "Se ha incrementado el n¨²mero de equipos hasta 16 y participan, precisamente, unos ornit¨®logos chinos muy buenos... Vamos a ver qu¨¦ vemos".
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