¡°Los secesionistas no est¨¢n locos ni alienados, est¨¢n enamorados¡±

Adolf Tobe?a (Graus, Huesca, 1950) es catedr¨¢tico de Psiquiatr¨ªa de la Facultad de Medicina y del Instituto de Neurociencias de la UAB. Autor prol¨ªfico en el campo de las emociones, acaba de publicar La pasi¨®n secesionista (ED Libros), un trabajo que intenta explicar desde la psicobiolog¨ªa y la neurolog¨ªa la consolidaci¨®n del independentismo en un movimiento de masas.

Pregunta. El preludio de La pasi¨®n secesionista dice: ¡°El libro est¨¢ dedicado a bucear en diversos vectores de la psicobiolog¨ªa del gregarismo, el etnocentrismo y la xenofobia, como resortes primordiales de los nacionalismos de base identitaria, pese a que se presenten con una impecable y enga?osa modernidad¡±.

Respuesta. El origen del libro es acercarse al s¨²bito ascenso del secesionismo catal¨¢n con herramientas de la psicolog¨ªa social, primero, y despu¨¦s con la neurobiolog¨ªa. Pese a que ha habido un verdadero ej¨¦rcito de intentos de an¨¢lisis, desde la sociolog¨ªa, la econom¨ªa, de los analistas pol¨ªticos e historiadores, estos no tienen explicado el fen¨®meno. Tampoco se explican por qu¨¦, tras cinco a?os, no estalla la burbuja.

P. ?Ser¨ªa ¨²til estudiar desde la neurolog¨ªa y la psicolog¨ªa movimientos de masas como el independentismo en Catalu?a o el 15M? En el libro explica experimentos desarrollados en Israel que parecen trasladables a nuestro momento.

R. Los israel¨ªes han generado una tradici¨®n de estudios fronterizos de vanguardia, para estudiar fen¨®menos de psicolog¨ªa social sobre litigios grupales. Estudios sobre prejuicios, xenofobia, aprensi¨®n, la influencia de los s¨ªmbolos, la tendencia del ciudadano a ayudar, a ser generoso o no seg¨²n si el otro pertenece a los tuyos o no. Los acad¨¦micos han aprovechado la fricci¨®n para realizar estudios de primer nivel. En Espa?a no se ha aprovechado.

P. Otro estudio impactante que cita es c¨®mo modificamos nuestra memoria por la presi¨®n del grupo.

R. Un individuo ve una pel¨ªcula, al cabo de una semana la recuerda perfectamente, pero el grupo del experimento le dice que no es as¨ª, ?y ¨¦l cambia! El 48% se apunta al recuerdo de los dem¨¢s. Es una t¨¦cnica tradicional en el combate pol¨ªtico.

¡°En el tablero pol¨ªtico, ahora est¨¢ muy de? moda? modificar el recuerdo¡±

P. El libro apunta que uno de los factores de ¨¦xito del independentismo es que los medios de comunicaci¨®n partidarios de la ruptura con Espa?a est¨¢n muy bien realizados. Si TV3, medio que usted destaca en especial, decidiera emitir de forma constante informaciones a favor de la uni¨®n con Espa?a, ?la ciudadan¨ªa que la mira, cambiar¨ªa de opini¨®n?

R. Por supuesto, y r¨¢pido, en cuatro o seis meses. Lo saben todos los publicistas. Si se quiere acentuar el elemento apetitivo de un producto, desde un objeto a la rep¨²blica perfecta, solo hay que insistir con una ingente promoci¨®n de la virtud con la que se vivir¨¢ en la rep¨²blica perfecta habitada por individuos perfectos. Los medios period¨ªsticos m¨¢s cercanos al carro secesionista han aprovechado una creatividad, una capacidad para generar productos atractivos, entretenidos, con dise?o espl¨¦ndido, coreograf¨ªas magn¨ªficas.

P. Usted refuta el argumento de aquellos que califican de ¡°locura¡± la irrupci¨®n de un independentismo masivo.

R. No hay ning¨²n brote psic¨®tico ni anomal¨ªa. Son fen¨®menos interesant¨ªsimos de la conducta normal y adaptativa de los grupos. Explico las ventajas. Cuando hay litigios, estos resortes se ponen al servicio de las posibilidades de victoria y de sometimiento de los otros. La intelectualidad espa?ola etiqueta el movimiento independentista catal¨¢n de delirio, de locura, intoxicaci¨®n, pero no tiene nada que ver con esto, tiene que ver con la competici¨®n intergrupal.

P. El libro tambi¨¦n destaca el cambio de paradigma que habr¨ªan experimentado pensadores como Josep Fontana.

R. Que un historiador que se ha pasado 40 o 50 a?os apuntado a tesis marxistas economicistas, de repente se apunte a versiones casi rom¨¢nticas de la cuesti¨®n, es un cambio monumental. Es paradigm¨¢tico que toda una tradici¨®n historiogr¨¢fica catalana, que se hab¨ªa apuntado al economicismo, ahora, sin avisar, se apunte a tradiciones ¨¦pico-rom¨¢nticas, es espectacular. Por cierto, h¨¢game la pregunta del subt¨ªtulo.

P. ¡°?El ¨ªmpetu secesionista naci¨® a partir de un enamoramiento colectivo?¡±.

R. Es una conjetura m¨¢s. El enamoramiento es una herramienta potent¨ªsima. Toda esta intelectualidad que intenta entenderlo desde el punto de vista de la obnubilaci¨®n, la alienaci¨®n, la intoxicaci¨®n e incluso la locura, ?no! Los secesionistas no est¨¢n locos ni alienados, est¨¢n enamorados; est¨¢n profundamente enamorados de forma biol¨®gica.

¡°Se ha aprovechado la creatividad en el mundo del dise?o y la publicidad, porque el pa¨ªs tiene mucho nivel en eso¡±

P. ?Enamorados de qu¨¦ o de qui¨¦n?

R. De la rep¨²blica perfecta habitada por individuos perfectos.

P. ?Enamorados de un ideal plat¨®nico?

R. Ni plat¨®nico ni rom¨¢ntico. Es una cuesti¨®n biol¨®gica profunda. El enamoramiento individual en el 99,9% de los casos no es loco; ya querr¨ªan los literatos que lo fuera, pero no lo es. Algunos enamoramientos llegan a ser locos, pero entonces es carne de los psiquiatras. En el 99,9% de los casos, el enamoramiento est¨¢ al servicio de seducir y conquistar a un aliado firme por si hay prole y se cuida entre dos. Est¨¢ montado por la biolog¨ªa en las especies que son como nosotros y en los p¨¢jaros, especies que son nombradas polig¨ªnicas imperfectas, para conseguir un aliado firme para tener cuidado parental de la prole. Y en el caso de los litigios intergrupales, para conseguir la victoria sobre los vecinos. Esto lo saben los l¨ªderes prof¨¦ticos desde siempre.