El viudo del boticario asesinado en Ourense rebaja a 26 a?os la pena que pide para el acusado
El supuesto autor declara en su ¨²ltima intervenci¨®n en el juicio que el d¨ªa de su confesi¨®n recibi¨® de la polic¨ªa una "paliza grav¨ªsima"
El hombre acusado de acabar con la vida del farmac¨¦utico ourensano Tom¨¢s Milia, de 72 a?os, en octubre de 2013 ha asegurado al final del juicio que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Ourense desde el pasado lunes que la polic¨ªa le maltrat¨® psicol¨®gicamente y le dio una "paliza grav¨ªsima" antes de su ¨²nica confesi¨®n de los hechos. Fiscal¨ªa y acusaci¨®n ejercida por el viudo han rebajado la petici¨®n de pena a 26 a?os, mientras que la defensa solicita su absoluci¨®n.
El procesado intervino este jueves despu¨¦s de que la Fiscal¨ªa y la acusaci¨®n ejercida por el viudo de la v¨ªctima hayan rebajado su petici¨®n de prisi¨®n de los 33 a?os a 26 a?os y medio; mientras que la acusaci¨®n ejercida por la familia ha mantenido su demanda de 49 a?os de c¨¢rcel.
Por su parte, la defensa ha pedido la libre absoluci¨®n del acusado, aunque ha propuesto que en caso de que sea encontrado culpable se le condene a las penas m¨ªnimas por homicidio (10 a?os); por hurto, en lugar de robo con violencia (tres meses), desobediencia a la autoridad (3 meses) y por los da?os provocados por el incendio de la vivienda de la v¨ªctima (tres meses).
Despu¨¦s del silencio durante la instrucci¨®n de la causa y durante todo el juicio, Alexandru M.L. ha aprovechado su ¨²ltima palabra para decir que la ma?ana de su detenci¨®n, antes de la declaraci¨®n en la que reconoc¨ªa los hechos, le dieron "una paliza grav¨ªsima" y le "maltrataron psicol¨®gicamente". Sin embargo, ni los m¨¦dicos que le atendieron en un primer momento, ni su primer abogado se?alaron entonces la existencia de ning¨²n tipo de lesi¨®n aunque la abogada que lo defiende ha se?alado a la salida del juicio que su cliente "siempre ha contado" estos hechos.
La defensa ha solicitado la libre absoluci¨®n de Alexandru M.L. por considerar que "no ha quedado demostrado que haya cometido homicidio o asesinato" y que las periciales han sido "contundentes" a la hora de se?alar que "ninguno de los cuchillos que portaba" en el momento de su detenci¨®n pudo ser el causante de las heridas.
Respecto a la ¨²nica arma compatible con el crimen (el cuchillo de marca Thomas encontrado en una papelera cercana a la vivienda) ha resaltado que "nadie" vio quien arroj¨® el arma en el contenedor. Tambi¨¦n ha destacado que ninguno de los testigos vio a su cliente manchado de sangre, que no ten¨ªa muestras de sangre en su ropa y que "nadie le vio entrar en la vivienda", aunque s¨ª lo vieran abandonar el portal en torno a las 20,20 horas del d¨ªa de los hechos.
La letrada ha se?alado la falta de concreci¨®n de la hora de la muerte de Tom¨¢s Milia, con un margen de dos horas por encima y debajo de las 23,00 horas; as¨ª como la imposibilidad de que su cliente pudiera haber llevado s¨®lo el cuerpo del fallecido hasta la ba?era en la que lo encontraron los bomberos. Por todos estos motivos ha reclamado su libre absoluci¨®n y subsidiariamente las penas m¨ªnimas por homicidio, hurto, da?os y desobediencia, por un total de diez a?os y medio (de los que ya habr¨ªa cumplido tres a?os y medio, al haber ingresado en prisi¨®n en octubre de 2013).
La Fiscal¨ªa y la acusaci¨®n ejercida por el viudo han pedido para Alexandru M.L. 26 a?os y medio. Mantienen las peticiones por los delitos de homicidio (14 a?os), a pesar de a?adirle el agravante de abuso de autoridad; atentado a la autoridad (3 a?os) y tres a?os y medio por robo con violencia. Ambos han rebajado a la mitad (seis a?os) la petici¨®n por los da?os en el incendio de la vivienda al rebajar un grado su calificaci¨®n, al considerar que una reducci¨®n en el grado de peligro que sufrieron los inquilinos del bloque.
El fiscal ha recordado que los hechos coinciden en gran medida con la ¨²nica declaraci¨®n realizada por el acusado, tras ser detenido. Respecto al arma del crimen ha se?alado sin duda al cuchillo encontrado en la papelera, identificado por criminal¨ªstica como "el ¨²nico susceptible de producir la heridas" del cuello que provocaron la muerte de Tom¨¢s Milia.
Adem¨¢s, ha recordado que en la bolsa en la que se encontr¨® el arma hab¨ªa tambi¨¦n una caja de guantes de l¨¢tex en la que se identific¨® una huella de Alexandru M.L. y que cuando fue detenido portaba una bolsa de pl¨¢stico con tejidos (s¨¢banas, toallas y camisetas) "impregnados con la sangre " de la v¨ªctima.
El fiscal ha defendido la calificaci¨®n del crimen como un homicidio, ante la imposibilidad de conocer c¨®mo se produjeron las pu?aladas, aunque ha considerado "evidente" que el ataque contra Tom¨¢s Milia se produjo "con ¨¢nimo de matar", tal y como demuestran el arma empleada y las lesiones en una zona con ¨®rganos vitales.
Para el abogado de la familia el crimen ha sido un asesinato porque el agresor sorprendi¨® desde la espalda a su v¨ªctima sin que ¨¦sta tuviera la posibilidad de defenderse y abus¨® de su "superioridad y de la confianza" que le ten¨ªa el fallecido. "La v¨ªctima no se esperaba un ataque porque conoc¨ªa al acusado" (con el que ya hab¨ªa mantenido varios encuentros), tal y como demuestra que "no ten¨ªa ninguna lesi¨®n defensiva" en los antebrazos, seg¨²n el letrado.
En su intervenci¨®n el abogado de la familia Milia ha incidido en la existencia de un "desequilibrio" entre el agresor y la v¨ªctima debido a su diferencia de edades (72 y 19 a?os en el momento de los hechos) y porque el acusado portaba un arma. Tambi¨¦n ha considerado "acreditado" que el cuchillo de la papelera fue el arma del crimen y que el incendio puso en riesgo la vida de los inquilinos del edificio, en especial los de la cuarta y quinta planta debido al intenso humo.
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