Los comunes buscan cobijo en Europa para blindarse ante el refer¨¦ndum unilateral

Los comunes, el espacio de izquierdas liderado por Ada Colau y Xavier Dom¨¨nech, han armado una estrategia para blindarse del refer¨¦ndum unilateral que ha prometido convocar Carles Puigdemont. Acusados por los independentistas de mantenerse en la ambig¨¹edad, los comunes han retado al Gobierno catal¨¢n a pedir el apoyo internacional de la Comisi¨®n de Venecia, un ¨®rgano consultivo que depende del Consejo de Europa. Con su decisi¨®n, los comunes ganan argumentos electorales. El independentismo lo considera un caramelo envenenado.

Catalunya s¨ª que es Pot registr¨® el viernes en el Parlament una moci¨®n para instar al Gobierno a buscar el apoyo de la Comisi¨®n de Venecia, un ¨®rgano integrado por 47 juristas ¡ªuno por cada Estado miembro del Consejo de Europa¡ª y 13 de Asia, Am¨¦rica y ?frica. Joan Coscubiela, portavoz de S¨ª que es Pot, condicion¨® el apoyo de su espacio al refer¨¦ndum a que la comisi¨®n d¨¦ el benepl¨¢cito con independencia del rechazo del Gobierno central. ¡°Puedo entender que se haga en contra el criterio del Estado. Pero no que no tenga aval internacional¡±, dijo. El plan sirve a los comunes para despojarse de la etiqueta impl¨ªcita de que solo apoyar¨¢n un refer¨¦ndum acordado con el Estado, algo imposible con las actuales mayor¨ªas en el Congreso.

La moci¨®n se votar¨¢ en el Pleno y supone un bal¨®n de ox¨ªgeno para los comunes, en el ojo de hurac¨¢n entre los partidarios y detractores del refer¨¦ndum. Su estrategia busca quitarse presi¨®n de encima y ganar argumentos para no ir a unas elecciones alineados con el bloque contrario a la consulta. Su intenci¨®n es no actuar solo para salvar la papeleta a Puigdemont. Miembros de Junts pel S¨ª y la CUP consideran en cualquier caso que su paso es en falso.

La Comisi¨®n de Venecia cuenta con un c¨®digo de buenas pr¨¢cticas que fija los requisitos de un refer¨¦ndum. Y el esencial es que deben ajustarse a la constitucionalidad. El apartado III del C¨®digo, titulado Reglas espec¨ªficas, sostiene que la pr¨¢ctica de los referendos debe ser permitida solo ¡°cuando se encuentre estipulado en la Constituci¨®n o en una ley conforme a esta (...) Los referendos deben ser organizados cuando el sistema legal lo estipule¡±. No solo eso: la ley de la que debe amparar la consulta tiene que estar aprobada un a?o antes de votar. Por ahora, a cuatro meses de la fecha del refer¨¦ndum, sigue en secreto.

La propuesta, formulada por Coscubiela, un diputado no precisamente cercano al n¨²cleo de los comunes, desconcert¨® a Junts pel S¨ª. Oriol Junqueras avis¨® de la dificultad de que la comisi¨®n de Venecia acepte el plan si el Estado se opone. Junts pel S¨ª y la CUP avisaron despu¨¦s de que solo pueden recurrir los Estados. ¡°No hag¨¢is trampas¡±, afe¨® a los comunes Mireia Boya, de la CUP. La realidad es que no solo los Estados pueden hacerlo. Los Estatutos del ¨®rgano especifican que pueden formular peticiones el Consejo de Ministros, la Asamblea de Parlamentarios o el Congreso de Autoridades Locales y Regionales de Europa. La Asamblea puede solicitar dict¨¢menes sobre ¡°ciertas reformas legislativas o constitucionales de un Estado¡±. Y, como dice Coscubiela, un comit¨¦ de la misma, sin atender a la correlaci¨®n de fuerzas ¡ªreproduce las del Parlamento Europeo¡ª, puede medir que monitoricen los conflictos.

Diferentes juristas consultados sostienen que no es un problema de legitimidad de quien puede recurrir a Venecia sino de la utilidad de hacerlo cuando apuesta sin ambages por defender la adecuaci¨®n de los referendos al orden constitucional. Y ponen como ejemplo que la comisi¨®n, por mucho que pidiera mejoras, valid¨® la reforma de la ley del Tribunal del Constitucional para abrir la v¨ªa penal. El problema es que parte del independentismo ha mitificado a la Comisi¨®n de Venecia porque no fija un m¨ªnimo de participaci¨®n en los referendos ¡ªs¨ª que los estableci¨® sin embargo en el caso de Montenegro¡ª para evitar que los contrarios al mismo fomenten la abstenci¨®n. Ese criterio lo ha repetido muchas veces Marta Rovira, de ERC,¡ª omitiendo que Venecia exige acatar el orden constitucional.