Correr entre contaminaci¨®n

58.000 personas corren por las calles de Barcelona. Es domingo. La cita: la carrera de El Corte Ingl¨¦s, una oportunidad para pisar el asfalto sin preocuparse por los coches y su contaminaci¨®n. Correr es ya una actividad habitual en la ciudad, en esta y en la mayor¨ªa de las urbes del mundo. Pero cuando los veh¨ªculos recuperan la circulaci¨®n habitual y la emisi¨®n de part¨ªculas contaminantes vuelve a pie de calle, los corredores se encuentran con un escenario no muy propicio para la pr¨¢ctica del deporte. Sin embargo, un estudio realizado por seis?universidades y dos centros de investigaci¨®n¡ªentre ellos la Universidad Pompeu Fabra, el ISGlobal?de Barcelona y el Ciberesp de Madrid¡ªha demostrado que los beneficios del ejercicio f¨ªsico son superiores a los perjuicios de la contaminaci¨®n.

¡°No podemos perpetuar el miedo a la contaminaci¨®n. Nos condiciona el comportamiento¡±, explica David Rojas-Rueda, licenciado en Medicina e investigador del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal). El estudio Can air pollution negate the health benefits of cycling and walking? ("?Puede la poluci¨®n del aire negar los beneficios en salud de andar o ir en bicicleta?", en ingl¨¦s), realizado con la colaboraci¨®n de cient¨ªficos de varias nacionalidades, refleja la siguiente conclusi¨®n: Los beneficios de hacer deporte son superiores a los posibles da?os causados por la contaminaci¨®n. ¡°Las ¨²nicas ciudades europeas donde los da?os provocados por las part¨ªculas nocivas ser¨ªan superiores a las ganancias derivadas del ejercicio f¨ªsico est¨¢n en Bulgaria y Ruman¨ªa¡±, explica Rojas.

Los esfuerzos del Ayuntamiento en materia de calidad del aire se han centrado en medidas para restringir la circulaci¨®n por la ciudad a las tipolog¨ªas de coches m¨¢s contaminantes. Una de las iniciativas que ha generado m¨¢s pol¨¦mica es la de vetar la entrada a Barcelona a los veh¨ªculos de m¨¢s de 20 a?os durante los d¨ªas laborables a partir del 2019. Se calcula que el veto afectar¨¢ alrededor de 130.000 conductores. ¡°No es la mejor medida ni la final, pero se tiene que empezar por algo¡±, explica el experto en Geoqu¨ªmica Ambiental del CSIC Andr¨¦s Alastuey. ¡°Hay que empezar a prohibir la entrada de coches¡±, defiende Alastuey, quien considera que tambi¨¦n hay que mejorar el transporte p¨²blico y modernizar la flota de taxis y veh¨ªculos de mercanc¨ªas.

Rojas-Rueda tambi¨¦n se muestra cr¨ªtico con las medidas que plantea el Ayuntamiento de Barcelona. ¡°Elegir una tipolog¨ªa de veh¨ªculo y restringirlo no es una de las mejores propuestas para solucionar el problema de la contaminaci¨®n¡±, dice. Seg¨²n Rojas, el efecto que esa propuesta producir¨ªa en la calidad del aire seria pr¨¢cticamente nulo. Una de las pocas iniciativas que, en su opini¨®n, redefinen el espacio p¨²blico para promover una movilidad m¨¢s sostenible son las supermanzanas. El Ayuntamiento prev¨¦ implantar otra, como la del Poblenou, alrededor del mercado de Sant Antoni.

Si la presencia de part¨ªculas en suspensi¨®n en el aire no es excusa para dejar de hacer ejercicio f¨ªsico en suelo urbano, los expertos defiende que las pol¨ªticas pueden ir enfocadas a promover el deporte y la movilidad sostenible en la ciudad. ¡°Mejorar la red de distribuci¨®n del transporte p¨²blico es la primera alternativa¡±, a?ade Rojas.

El investigador del ISGlobal considera que en Barcelona el problema es intermunicipal, puesto que afecta a toda el ¨¢rea metropolitana. ¡°La mayor¨ªa de emisiones se producen en los trayectos entre municipios, no dentro de la ciudad. Hasta que no se mejore el sistema de movilidad p¨²blica para que conecte estos destinos de forma eficiente, competitiva, atractiva y agradable, no conseguiremos que la gente deje de utilizar el coche¡±, dice.?Mientras que la oferta de transporte p¨²blico en la capital catalana mejora ¡ªlos servicios de metro y autob¨²s han sacado este a?o la nota m¨¢s alta de los pasajeros en la ¨²ltima d¨¦cada¡ª la conexi¨®n con los municipios adyacentes todav¨ªa tiene mucho margen de mejora para ser realmente competitiva. Seg¨²n Rojas, una pol¨ªtica restrictiva en la circulaci¨®n sin una buena alternativa est¨¢ condenada.

El 50% de las part¨ªculas en suspensi¨®n proviene del desgaste de frenos y neum¨¢ticos. Los metales pesados altamente t¨®xicos¡ª y el pl¨¢stico que form¡ªa el engomado de las ruedas se volatilizan y son inhalados de la misma forma que los gases nocivos provenientes del tubo de escape. Una mayor proporci¨®n de coches de ingenier¨ªa el¨¦ctrica disminuir¨ªa dr¨¢sticamente la contaminaci¨®n ac¨²stica y parte de las emisiones pero no eliminar¨ªa los ¡°problemas de accidentalidad y de sedentarismo¡±, seg¨²n Rojas.

La?Agencia de Salud P¨²blica de Barcelona, que realiza anualmente el informe de calidad del aire que se respira en la capital catalana, y el investigador del ISGlobal, creen que esperar a que la transici¨®n tecnol¨®gica solucione los problemas es perder una gran oportunidad. ¡°Los problemas son oportunidades para mejorar. Tenemos mucho a ganar si apostamos por redise?ar nuestras ciudades¡±, concluye Rojas.